SABADO 18 DE NOVIEMBRE DE 2000

Ť Pide cambiar la reglas económicas en el mundo


Inauguró Mireya Moscoso la Cumbre Iberoamericana

Fernando Martínez, corresponsal, y David Aponte, enviado, Panamá, 17 de noviembre Ť La presidenta de esta nación, Mireya Moscoso, hizo un llamado para que "el mundo cambie las reglas del juego de la economía mundial" y que los países pobres puedan enfrentar las condiciones de pobreza y pobreza extrema en las que viven los niños y adolescentes de América Latina.

"ƑPero cómo hacemos nosotros, países pobres con economías dependientes de los intereses de las potencias, tanto geopolíticos como económicos y comerciales, cómo invertir en desarrollo humano sostenible teniendo que enfrentar la pesada carga de la deuda externa, enfrentando condiciones a nuestras exportaciones, exigencias de calidad y producción, y críticas a nuestras políticas fiscales?", se preguntó.

Al inaugurar los trabajos de la décima Cumbre Iberoamericana, dedicada a los niños y adolescentes de Latinoamérica, España y Portugal, la mandataria destacó que la mayor parte de las naciones, por cierto pobres, ve sufrir todos los días a esos menores "y sentimos el compromiso de resolver esos problemas".

Para ello, agregó la presidenta, "debemos enfrentar el reto del nuevo milenio: la re- solución de la deuda externa, único medio viable para enfrentar de manera exitosa el tema de la pobreza".

Ante los jefes de Estado y de gobierno de los países de la región (con excepción de los presidentes Alberto Fujimori, de Perú, y Arnoldo Alemán, de Nicaragua), Moscoso reconoció que en el curso de los últimos 10 años mucho se ha conseguido en la procuración de los derechos de los niños y niñas, en el combate y erradicación de enfermedades que en el pasado prácticamente diezmaban a la población infantil y ha mejorado la educación y la alimentación de los menores, pero precisó que todavía falta mucho por hacer.

Moscoso lanzó una dura crítica a los medios de comunicación --radio, cine y televisión--, que están llenos de escenas que "sublimizan" la violencia, con ídolos que pregonan el sexo, la droga y la rebeldía como modelos de conducta, y que forman el carácter de los niños y niñas del presente.

En el Teatro La Huaca del Centro de Convenciones Atlántico-Pacífico (Atlapa), el presidente de Cuba, Fidel Castro, presentó un panorama poco alentador para la niñez, cargado de cifras y estadísticas de los organismos internacionales que describen la "dramática" situación en la que sobreviven millones de menores latinoamericanos: trabajo infantil, prostitución, indigencia, carencia de servicios básicos, deficiencias nutricionales y maltrato.

Los jefes de Estado y de gobierno comenzarán sus trabajos plenarios este sábado. Por la tarde, darán su visto bueno a la Declaración de Panamá, que contiene los compromisos básicos del foro de concertación a favor de la niñez y la adolescencia y la reafirmación de los principios que rigen la convivencia internacional.

Los mandatarios latinoamericanos e ibéricos suscribirán cuatro declaraciones al término de la reunión: el beneplácito por la recuperación del Canal de Panamá, un llamado a conmemorar los 150 años del natalicio del prócer cubano José Martí, una exhortación para que Argentina y Gran Bre- taña reanuden negociaciones tendientes a encontrar una solución en el caso de las islas Malvinas y una condena al "grupo terrorista" ETA en España.

Todo esto, con la propuesta todavía "incierta" de que la undécima reunión, la del 2001, tenga lugar en Perú, país sudamericano en donde existe una grave crisis política por actos de sobornos, razón por la cual el presidente Fujimori no asistió esta vez a la cita de Panamá.