Ť Marca el ingreso del realizador Arturo Ripstein en la comedia
La perdición de los hombres, filme abridor de la Muestra de Cine
Ť Retratar las flaquezas de mis personajes no es un juicio, sino un abrazo, dice Garciadiego
Ť La versión 36 de ese encuentro incluye largometrajes de Szavo, Tabío y Majidi, entre otros
Angel Vargas Ť La versión 36 de la Muestra Internacional de Cine comienza hoy con la proyección de La perdición de los hombres, la más reciente película de Arturo Ripstein, que marca el ingreso del realizador en la comedia.
Ganadora de tres premios en el pasado Festival Internacional de San Sebastián (Concha de Oro por mejor película, Concha de Plata al mejor guión y el Fipresci, que otorga la crítica internacional), se trata de la segunda cinta que el prestigiado director mexicano realiza en formato digital; la primera fue Así es la vida, que se exhibe en seis salas de la capital del país.
Con guión de Paz Alicia Garciadiego ?esposa del cineasta? y protagonizada por Patricia Reyes Spíndola, Luis Felipe Tovar, Rafael Inclán y Carlos Chávez, La perdición de los hombres es una comedia negra, incluso un tanto surrealista, acerca de lo absurdo de la vida.
Reza una canción ranchera que ''la perdición de los hombres son las malditas mujeres", y ésa es precisamente la idea con la que Rispstein juega durante toda su historia, definida por dos féminas que se disputan el cadáver del hombre que compartieron en vida y un inocente juego de beisbol cuyo final acarrea consecuencias paradójicas entre el humor y la tragedia.
Las acciones se suscitan en un desolado paraje del México rural, rulfiano, como lo definiría Paz Alicia:
Hay mucho de Juan Rulfo, ''sobre todo en el paisaje árido y en la soledad que necesariamente deben tener los personajes. Es una historia de solos, de seres al garete de la vida, como arbustos que mueve el viento. Y ese paisaje concita a un lenguaje rulfiano".
Incursión sin ambages en el humor
Paz Alicia Garciadiego y el propio Arturo Ripstein explicaron, en entrevista con La Jornada durante su estancia en San Sebastián, que este filme marca su incursión total en el terreno del humor:
''La reacción que se me da más en cine es hacia la comedia. Me asusto poco, lloro poco, pero me río mucho. Siempre quise entrar en este territorio que, aunque inexplorado de mi parte, me parece fascinante. Quise afrontarlo ahora más directamente y sin ambages", señaló el director, quien también precisó que en su filme buscó reflejar ese absurdo ''que, siendo mexicano, no puedo evitarlo".
Abundó: ''Venimos de un país donde se lee a diario que una persona fue asaltada por un policía, en donde privan este tipo de situaciones, en donde el juego político es absolutamente demencial. Y no podíamos ni queríamos estar lejanos a esta manera de ver. Y ahora decidimos afrontarlo muy directamente. No hay reproches de mi parte".
Acerca de esta ultima idea, Ripstein aclaró que La perdición de los hombres no es una visión crítica acerca del país, sino una mirada en la que hay implícitos sólo ciertos comentarios. "Mi labor no es juzgar, sino ver y eso es lo que tengo que hacer de la mejor manera posible", acotó.
Paz Alicia Garciadiego, en tanto, bromeó en aquella ocasión, en San Sebastián, y definió que el gusto de su esposo y de ella por el humor obedece a que ''nosotros somos payasos".
Reiteró su predilección por la comedia y adelantó que los galardones obtenidos en ese festival, sin duda, influirán para continuar en el género: ''Me gusta mucho la comedia. Me daba mucho miedo. Por supuesto, haber ganado estos premios será un estímulo. No sé si de repente me toque el corazón otra vez la cuerda de hacer llorar, que es muy sabroso, pero indudablemente me va a quitar trabas para hacer comedia".
El tema de lo absurdo es algo inherente a la pluma de la escritora, como lo es también una cierta rudeza con las circunstancias que viven sus personajes, pero eso sólo es aparente, según confió ella: ''Tengo mucha compasión por mis personajes, por todos, y encuentro la compasión, encuentro la humanidad en el absurdo y en las flaquezas. Entonces, retratar las flaquezas de mis personajes no es un juicio, sino un abrazo. Me río con ellos y lloro con ellos".
La perdición de los hombres se realizó en blanco y negro. Ello obedece sólo a un gusto personal que tiene su explicación en algunas vivencias de Ripstein, como él mismo indicó.
''Cuando comencé mi vocación de cineasta, hace muchos años, no había escuelas de cine en México. Era un arte que se aprendía viendo películas y leyendo libros. Tuve la fortuna adicional de poder estar dentro de los foros cinematográficos y aprender directamente el oficio. Las películas que veía eran, en su mayoría, en blanco y negro, y siempre me gustó mucho, me pareció que daba una apariencia mayor que la vida real".
Es de esta manera, como al público nacional le corresponderá juzgar los atributos de esta cinta que le valieron ser galardonada en el festival de San Sebastián, España, uno de los más importantes del mundo.
Las funciones de La perdición de los hombres serán hoy, a las 12:00, 16:00, 18:30 y 21:00 horas, en la Cineteca Nacional. Y posteriormente se exhibirán, entre el 18 y el 23 de noviembre, dentro de la Muestra de Cine, los filmes El amanecer de un siglo, de Istvan Szabo (Hungría-Alemania, 1999), el sábado 18 de noviembre; Nadie conoce a nadie, de Mateo Gil (España, 1999), domingo 19; Lista de espera, de Juan Carlos Tabío (Cuba-Francia, 1999), lunes 20; Recursos humanos, de Laurent Castel (Francia, 1999), martes 21; Bajo el sol, de Colm Nutley (Suecia, 1998), miércoles 22, y El color del paraíso, de Majud Majidi (Irán, 1999), jueves 23.