VIERNES 17 DE NOVIEMBRE DE 2000

Ť Si la industria eléctrica queda igual ''nos quedamos sin luz'', dice el CCE


Creará la IP un frente común para abrir el sector energético

Ť La planta productiva dispondrá de electricidad hasta el 2002, pero con apagones, afirma

Ť La mayor parte de los capitales privados vendrían del exterior, reconoce González Laporte

David Zúñiga Ť Los organismos que conforman el Consejo Coordinador Empresarial (CCE) acordaron en su reunión semanal crear un frente común para promover reformas a los artículos 27 y 28 de la Constitución, a fin de abrir el sector energético a la inversión privada extranjera y nacional.

El presidente del CCE, Claudio X. González, insistió en que si el sector eléctrico permanece como está ''nos quedamos sin luz''. El verano pasado, agregó, hubo entre 40 y 50 suspensiones de actividades en diversas industrias debido a la falta de energía. La planta productiva nacional, sostuvo, dispondrá de electricidad hasta 2002, ''pero con apagones''.

Según los cálculos del dirigente empresarial, aumentar en mil megavatios (MW) la capacidad de generación cuesta entre 600 y 700 millones de dólares. Como en la próxima década será necesario duplicar la capacidad instalada del sector eléctrico para generar 7 mil megavatios más cada año, el costo asciende a 50 mil millones de dólares. Según González Laporte, la apertura al capital privado es la única alternativa para el sector energético, pues de lo contrario el gobierno sacrificaría recursos que podría usar para combatir la pobreza, educación, seguridad pública y otros renglones.

Quien fuera asesor de inversiones extranjeras en el sexenio de Carlos Salinas reconoció que si el sector energético se abre, la mayor parte de los capitales privados vendrían del exterior y aseguró que ya hay inversionistas foráneos interesados en participar en la generación, distribución y venta de energía a cambio de un rendimiento ''razonable''.

Para el líder empresarial, quien forma parte de los consejos de administración de varias trasnacionales, entre ellas General Electric, Kimberly Clark, Kellog y Unilever, el actual esquema de apertura (49 por ciento privado y 51 por ciento estatal) ha convertido al sector energético en ''tierra de nadie''. Puso como ejemplo la industria petroquímica: actualmente México importa 6 mil millones de dólares anuales en petroquímicos, ''cuando debería estar exportando''.

Hasta ahora, lamentó González Laporte, los inversionistas interesados en participar en la generación de electricidad tienen que hacer ''cola'' hasta 2003 o 2004, lo cual le resta competitividad a México, frente a otros países que ofrecen más facilidades. ''Se necesita un marco legal que dé garantías al capital extranjero''. Si México no reforma sus leyes, los mercados internacionales nunca dejarán de verlo como ''un país emergente que no sabe hacer lo necesario para crecer''.

Por su parte, el director del CCE, Raymundo Winkler, señaló que los trabajos de cabildeo para abrir el sector energético deben comenzar cuando antes, pues además de los legisladores hay que convencer a otros sectores como los ecologistas.