LUNES 13 DE NOVIEMBRE DE 2000
Ť Se incautaron boletas electorales en Nuevo México, a petición de los republicanos
Inédito conteo manual de votos en el condado de Palm Beach
Ť Ventaja para el demócrata Al Gore, al contabilizar 1 por ciento de los sufragios
Ť Representante de la campaña del vicepresidente no descarta una posible demanda
Ť Kissinger se suma al debate y afirma que "ninguna corte debe decidir una elección"
Ap, Afp, Reuters y Dpa, West Palm Beach, 12 de noviembre Ť Las autoridades electorales del condado de Palm Beach, en Florida, ordenaron hoy un inédito recuento manual de los más de 425 mil votos emitidos en la elecciones del pasado martes 7, en momentos en que los asistentes de los candidatos Al Gore y George W. Bush intensificaron el debate sobre el procedimiento.
La decisión fue adoptada tras varias horas de un recuento manual de 4 mil 500 boletas, que representan sólo uno por ciento de los votos depositados en el condado. En este conteo manual, los resultados fluyeron diferentes a los arrojados por el conteo con máquina, y el demócrata Al Gore tuvo 33 votos más, mientras el republicano George W. Bush 14, lo que dio una diferencia de 19 votos en favor del vicepresidente.
Carl Robert, miembro de la junta del condado, que está a favor del conteo manual de todos los votos, alegó que si esos 19 sufragios eran extrapolados a todo el condado, habría unos mil 900 votos adicionales para Gore, que le proporcionarían la victoria en Florida y por tanto le abriría las puertas a la Casa Blanca.
En todo caso, la decisión fue adoptada por una votación de dos a uno en las primeras horas de este domingo.
Se realizaron dos recuentos de las 4 mil 500 boletas, el automático, solicitado por los republicanos, y el manual, que deseaban los demócratas. La junta se reunirá la mañana de este lunes para discutir la logística de un conteo manual en todo el condado.
El resultado final de las elecciones presidenciales de Estados Unidos depende del voto de Florida, donde el republicano Bush aventaja al demócrata Gore por una cifra no oficial de 327 votos de los seis millones de sufragios depositados en el estado.
El candidato que gane Florida se lleva sus 25 votos electorales y gana la mayoría de 270, necesarios en el Colegio Electoral para ganar la presidencia.
Bush y su compañero de fórmula, Dick Cheney, demandaron a Palm Beach y a otros tres condados en un intento por detener los recuentos manuales. Su petición será escuchada el lunes por un juez federal en Miami.
El ex secretario de Estado James Baker, representante de la campaña de Bush, dijo que la situación era una "mancha negra" sobre el proceso electoral estadunidense.
Baker ofreció retirar la demanda si los demócratas acuerdan "respetar los resultados del recuento en todo el estado (de Florida) y que se dependa sólo de la tabulación de los resultados de las boletas en el extranjero".
"Quienquiera que gane entonces, gana", dijo Baker al programa Meet the Press de la cadena NBC. "Aceptaremos ese resultado".
Respecto de la ligera ventaja que otorga a Bush la cifra no oficial del recuento de votos de Florida, Baker dijo que "hay algún riesgo, supongo, pues George W. Bush podría perder cuando se cuenten las boletas del extranjero. Pero él está dispuesto a decir 'bien, esto debe acabar aquí'".
Y agregó: "Me gustaría saber la respuesta de la campaña de Gore a esta propuesta".
La contraparte de Baker en la campaña de Gore, el también ex secretario de Estado Warren Christopher, aunque no se refirió directamente a los comentarios de Baker, dijo a Meet the Press que esperaba que el resultado de la carrera presidencial se hiciera público en "cuestión de días".
Christopher rechazó las insinuaciones de que la campaña de Gore estuviera intentando demostrar la solución de la situación en Florida para descalificar al estado del voto del Colegio Electoral, previsto para el 18 de diciembre, y así inclinar el resultado a Gore, quien sin Florida tiene la mayoría de los votos electorales.
"Por supuesto que no. Por supuesto que no", sostuvo Christopher. "No estamos hablando de una demora más larga. Francamente, creo que es cuestión de días -no de semanas, no de meses- pero de días antes de que alcancemos un resultado completo y justo, pero queremos hacerlo de forma rápida".
Christopher, sin embargo, dejó abierta la posibilidad de que la campaña pueda entablar una demanda en los próximos días, en momentos en que trascendió que el diario británico Times señala en su edición de este lunes que el Partido Demócrata solicitó al Buró Federal de Investigaciones que investigue una serie de papeletas de votos presuntamente amañanadas en favor de los republicanos, las cuales fueron entregadas a electores negros de Miami en principio favorables a Gore.
Y aunque el debate post electoral está enfocado en Florida, la policía de Nuevo México, al responder a un pedido de abogados republicanos, comenzó a incautar boletas electorales en ese estado -donde Bush aventaja a Gore por apenas 17 votos-, por si se necesitan para un nuevo recuento.
Al debate se sumó el ex secretario de Estado Henry Kissinger, quien dijo que si la batalla es trasladada a los tribunales podría resultar afectada la democracia en Estados Unidos. "Ninguna corte debe decidir una elección", dijo al diario Welt am Sonntag. Kissinger señaló que cuando concluya el conteo de votos en Florida, "espero que el perdedor reconozca públicamente su derrota, evitando más trámites judiciales. Si todas las elecciones son impugnadas ante una corte, entonces el proceso democrático sufrirá mucho".
La incertidumbre en el proceso electoral estadunidense continúa generando reacciones externas, y este domingo el presidente venezolano, Hugo Chávez, manifestó su preocupación por lo que sucede en Estados Unidos, aunque externó su confianza en que pronto se alcanzará una solución "por la democracia, y porque allá se van a respetar las leyes".
De su lado, las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia, a través de su vocero Simón Trinidad sostuvieron que "definitivamente se derrumbó la democracia de papel de Estados Unidos. Hay corrupción, hay chanchullos, hay compra de conciencias", y agregaron que "la mayor democracia del mundo está llena de corruptores".
En Europa, la prensa insistía en que Estados Unidos debe poner fin a la incertidumbre electoral que rodea el resultado de las elecciones del martes pasado, al destacar no sólo la inquietud en ese país, sino también en le resto del mundo, mientras el escritor británico Salman Rushdie manifestó que "los que tenemos experiencia en elecciones del Tercer Mundo nos preguntamos por qué no hay suficientes estadunidenses que se interroguen aceca del hecho de que todo esto ocurre en un estado donde gobierna el hermano de principal beneficiario de este fisaco", escriobió en referencia a Jeb Bush en un artículo publicado en The Independent.