JUEVES 9 DE NOVIEMBRE DE 2000
Ť El nuevo gobierno pondrá énfasis en ese aspecto, señala Abascal Carranza
Productividad, sugerencia en las revisiones contractuales
Juan Manuel Venegas Ť En las revisiones de los salarios contractuales que se iniciarán en enero próximo, el gobierno de Vicente Fox Quesada ''sugerirá'' poner ''énfasis en la productividad y calidad'' del trabajo, adelantó el coordinador de asuntos laborales del equipo de transición, Carlos Abascal.
Por otra parte, Fox Quesada anunció que su administración dará impulso a la creación de un sistema de banca social que permita a la población abierta acceder a crédito y financiamiento para generar micro, pequeñas y medianas empresas, que además impulsen el empleo y los ingresos familiares.
Durante una reunión que sostuvo ayer con la directiva de la Confederación Revolucionaria de Obreros y Campesinos (CROC) -que en realidad ejerce su mayor influencia entre los trabajadores del sector turismo del país-, el futuro mandatario dijo que será ''insistente promotor'' de una nueva cultura laboral que implique también ''la dignificación humana de los trabajadores mexicanos''.
De su parte, el eterno dirigente croquista, Alberto Juárez Blancas -aquel que exigía la llegada de Manuel Bartlett a la presidencia del PRI para detener el avance de la derecha-, expresó al mandatario electo el respaldo de sus agremiados al nuevo gobierno.
Como lo hizo hace una semana el líder del SUTERM, Leonardo Rodríguez Alcaine, esta vez tocó a otro fiel representante del corporativismo sindical del sistema priísta ir a ponerse ''a la disposición'' del futuro gobernante de extracción panista.
Al término de la reunión, el coordinador de asuntos laborales del equipo de transición, Carlos Abascal, adelantó que en la revisión de los salarios contractuales que se iniciará en enero próximo, ''se recomendará a los diversos sectores y a las distintas empresas poner énfasis en la productividad del trabajo'', pues el futuro gobierno tiene entre sus planes ''convertirse en promotor de la capacitación, de la calidad total y de la productividad''.
Sobre el trato que mantendrán con los viejos líderes sindicalistas, acusados por los mismos trabajadores de ''corrupción'' y ''charrismo'', Abascal Carranza comentó que al gobierno no le corresponde intervenir en la vida interna de los sindicatos, ''y son los trabajadores los que se encargarán de que sus organizaciones reflejen la aspiración democrática que se expresó el 2 de julio''.