LUNES 6 DE NOVIEMBRE DE 2000
Ť Dos trovadores reúnen a cerca de mil jóvenes
Música y sentimiento en el atrio de una iglesia católica en La Habana
Afp, La Habana, 5 de noviembre Ť Cerca de mil jóvenes cubanos se reunieron en el atrio de una iglesia católica de La Habana para escuchar la noche del sábado a los trovadores Polito Ibáñez y Carlos Varela, dos punzantes cronistas de la realidad en Cuba.
Para no pensar, Somos números y Como los peces, fueron algunas de las piezas interpretadas por los cantantes, muy populares entre los jóvenes cubanos por su lenguaje poético y a la vez agudo sobre la situación social en la isla. El concierto, al que acudió el cardenal Jaime Ortega y que se celebró en el atrio de la iglesia Jesús de Miramar, es el primer intento, en varios meses, de la Iglesia católica por acercarse a los jóvenes en actos masivos fuera o alrededor de los templos.
Ia Iglesia católica cubana tuvo una mayor actividad pública antes y durante la visita a la isla del Papa Juan Pablo II, en enero de 1998, cuando se le permitió celebrar procesiones en las calles, pero después fue notorio su recogimiento a los templos.
Escuchar a Polito Ibáñez "es escuchar las vivencias de una generación que se debate en el sendero, entre el abismo y la cúspide", dijo Orlando Márquez, vocero de la Iglesia católica cubana, en un folleto de presentación del concierto, el cual transcurrió sin incidentes y bajo la mirada discreta de un grupo pequeño de policías de uniforme.
"De eso nos hablan estos versos: del abandono y la esperanza, la traición y el amor, el miedo y las decisiones", agregó Márquez quien aclaró que el concierto se realizó por iniciativa de Polito Ibáñez.
El trovador Ibáñez "nos invita a volver a rezar por el pluralismo y para librarnos de nosotros mismos", apuntó Márquez.
Un grupo de jóvenes solicitó infructuosamente a Varela que interpretara Guillermo Tell, una composición iconoclasta que pide un relevo generacional.