DOMINGO 5 DE NOVIEMBRE DE 2000

Ť La cifra llega a $231 por ciudadano, ya que eligió presidente, senadores y diputados


Cada voto válido el 2 de julio costó al erario $77.23

Mireya Cuéllar Ť Cada voto válido que se emitió en la elección federal del pasado 2 de julio tuvo un costo promedio para el erario de 77 pesos 23 centavos. Es decir, sacar a votar a un ciudadano y lograr que lo hiciera correctamente implicó un gasto de 231 pesos, porque cada uno de los 36 millones 781 mil 199 electores que se acercaron a las urnas participó en tres procesos: uno para elegir presidente, otro para senadores y uno más de diputados. Esta estimación no incluye las aportaciones privadas que recibieron los partidos políticos y que podrían ascender a 3 mil millones de pesos.

ƑEs mucho? ƑEs poco? Que cada quien haga sus cuentas. Lo cierto es que el Congreso aprobó el año pasado un presupuesto de 8 mil 453 millones 654 mil 73 pesos para que el Instituto Federal Electoral pudiera organizar los comicios federales y hacer frente a las prerrogativas que se entregan anualmente a cada partido. Con ese presupuesto, el IFE logró que se emitieran 109 millones 448 mil 292 votos en los tres procesos que se realizaron el 2 de julio.

Para la elección presidencial se emitieron 36 millones 781 mil 199 sufragios; en la de senadores fueron 36 millones 386 mil 275 y en la de diputados 36 millones 280 mil 818. La diferencia de votos entre una y otra elección tiene diversos orígenes; puede ser desde que el ciudadano elige anular alguna de las boletas o vota equivocadamente, hasta la invalidación del sufragio por parte de alguna autoridad.

De los poco más de 8 mil millones de pesos de que dispuso el órgano electoral -usados para pagar desde la nómina hasta la elaboración de las boletas, la actualización del padrón o los conteos rápidos-, 3 mil millones 912 mil pesos fueron a dar directamente a las arcas de los partidos para costear las campañas.

La ley establece que los partidos podrán recibir financiamiento privado hasta por un peso menos del que obtengan del erario. Para esta elección, las fuerzas políticas más beneficiadas fueron las que participaron en coalición, porque unieron presupuestos y las alianzas por México y por el Cambio consiguieron mayores recursos públicos que el PRI. Si los partidos alcanzan el tope de financiamiento privado a que tenían derecho, la elección del 2 de julio habrá costado alrededor de 11 mil millones de pesos, 2 millones más de los que recibió la UNAM este año.

El alto costo que alcanzaron los procesos electorales en los últimos años ha sido motivo de comentarios. La respuesta de las autoridades electorales es siempre que la enorme desconfianza que existía en los comicios volvió muy caro dar certidumbre a los ciudadanos. La actualización constante del padrón, el uso de materiales infalsificables en la papelería... además de la gran cantidad de recursos que se dan a los partidos políticos para que compitan en condiciones cada vez más equitativas. Cuando el IFE haga público el gasto que hicieron los partidos en campaña podrá determinarse el costo total del voto y no sólo el gasto que representó para los contribuyentes.

Durante el proceso de 1994, los partidos gastaron -oficialmente- en conjunto 399 millones de pesos en las distintas campañas para presidente, senadores y diputados. Sin embargo, años después y a raíz de las cajas de Andrés Manuel López Obrador y las declaraciones de Carlos Cabal Peniche desde Australia, se supo que hubo una gran cantidad de recursos que llegaron a la campaña del PRI y que no pudieron ser cuantificados. En esta ocasión, lo que el Instituto Federal Electoral no podrá cuantificar es el gasto que hicieron partidos y candidatos en la precampaña.