VIERNES 3 DE NOVIEMBRE DE 2000
Ť Por su detención, dice
Chiapas, al borde de una guerra civil: líder paramilitar
Angeles Mariscal y Elio Henríquez, corresponsales, Tuxtla Gutiérrez, Chis., 2 de noviembre Ť Los once integrantes del grupo Paz y Justicia recibieron la noche del miércoles el auto de formal prisión por su presunta participación en la comisión de los delitos de terrorismo, motín, asociación delictuosa, delincuencia organizada, portación de arma de fuego de uso exclusivo del Ejército y Fuerza Aérea, despojo y daños. El dictamen fue apelado por su abogado defensor.
Horas después, el líder de la organización, Samuel Sánchez Sánchez, exigió al gobierno federal la creación de una ley de diálogo a favor de los grupos paramilitares, pues se autodefinió como preso político, líder de una de las organizaciones contrapeso del EZLN. Advirtió que la entidad se encuentra "al borde de una guerra civil", producto de la inconformidad que ha generado en algunos sectores las acciones contra los civiles armados.
Reproches a dirigentes priístas
Entrevistado en el penal de Cerro Hueco, el máximo líder de Paz y Justicia y ex diputado local priísta, reprochó a los líderes nacionales y estatales del Partido Revolucionario Institucional (PRI), que "hoy se sienten avergonzados de nosotros, de los que somos catalogados como grupos paramilitares, como grupos armados. Hoy se intentan hacer a un lado".
En concreto, les pidió que intercedan "por los indígenas que no se incorporaron a la lucha armada de 1994. Por nosotros que ahora somos presos políticos".
Visiblemente cansado, sudoroso y con la camisa ajada, Samuel Sánchez mantuvo el porte arrogante y sonriente que lo caracteriza para explicar que "el problema que se suscitó en el predio Paraíso -y que dio pie a su detención- fue sólo un pretexto para poder aprehendernos, para involucrarnos a nosotros, los líderes de la organización".
Explicó que los once detenidos se pueden clasificar en tres partes: él y Marcos Albino, los líderes; el dirigente de la organización que efectuó el desalojo del predio Paraíso y que tendrá que afrontar el problema agrario; y por último "los campesinos demandantes del predio y que también fueron aprehendidos. Ellos son inocentes, no tienen nada que ver en este baile al que los llevan".
Advirtió que las acciones emprendidas contra personas y grupos que son catalogados como paramilitares "están colocando al estado al borde de una guerra civil. Hay mucha inconformidad en nuestras comunidades, entre nuestra base social".
En San Cristóbal de las Casas, la Red de Defensores Comunitarios por los Derechos Humanos afirmó que miembros de Paz y Justicia sostuvieron ayer tres reuniones en comunidades del norteño municipio de Yajalón, presuntamente para planear la estrategia a seguir luego de la detención de sus dirigentes históricos Samuel Sánchez y Marcos Albino Torres.
"Estas tres reuniones se realizaron por la noche en las comunidades de San Ramón, Esperanza Takinukum y Rancho Peña y hubo disparos al aire con escopetas calibre .22 y .380", afirmó en conferencia de prensa ofrecida esta tarde aquí.