Ť "Necesito su ayuda", dicen en Chicago y Missouri
Gore y Bush pelean voto por voto, a unos días de la elección
Ť Recurren republicanos al convencimiento por correo electrónico
Ť El demócrata ha rechazado la presencia de Clinton como apoyo
Jim Cason y David Brooks, corresponsales, Washington, 2 de noviembre Ť Este Día de Muertos vale recordar que en la historia de las elecciones estadunidenses ha habido casos en los que muertos han votado para dar el triunfo a algún candidato. Hoy día, los dos principales candidatos a la presidencia pelean voto por voto, y seguramente ambos se frustran por no poder lograr que los muertos ayuden para poder obtener el margen que les dé la victoria.
El vicepresidente Al Gore celebró hoy un mitin con más de 50 mil simpatizantes en Chicago (uno de los lugares donde en el pasado se rumora hubo participación electoral desde ultratumba), como parte del esfuerzo de Gore y George W. Bush de pedir la participación electoral de sus bases para incrementar él número de votantes el próximo martes.
"Necesito su ayuda, necesito sus votos, necesito a Chicago, necesito a Illinois", rogó el candidato demócrata Gore a sus simpatizantes en el centro de la ciudad. A sólo 300 millas de ahí en San Luis, Missouri, el republicano Bush hizo la misma petición a sus bases antes de acudir a un suburbio de Chicago para repetir lo mismo y terminar el día en Wisconsin. Más tarde, Gore viajó a Las Cruces, Nuevo México a un mitin con bases hispanas donde se presentaron Carlos Santana y el actor Jimmy Smits.
Las encuestas siguen demostrando un pequeño margen a favor de Bush, pero el empate técnico en varios estados claves está obligando a ambos a presentarse en las mismas entidades, a veces con una diferencia de horas. De hecho, fue notable que los dos no se toparan al llegar uno y salir otro de Chicago.
Con la diferencia entre el triunfo y la derrota dependiendo ?según las encuestas? de unos pocos votos, los estrategas demócratas y republicanos coincidieron en que el esfuerzo de promoción del voto el día de los comicios podrá ser la clave para determinar el ganador. En un país en el que 50 por ciento de ciudadanos con derecho al voto (o sea los empadronados más los que tienen derecho de registrarse como votantes) decidió no votar en las últimas elecciones presidenciales, los dos principales partidos realizan esfuerzos sin precedente para "sacar el voto" a las urnas el mismo 7 de noviembre.
El Partido Republicano ha invertido casi 80 millones de dólares en su campaña de "sacar el voto" que incluye el envío por correo de panfletos con la intención de que lleguen a su destino el mismo día electoral, llamadas telefónicas y aventones a las urnas para votantes que no cuentan con transporte propio.
El diario Wall Street Journal informó que este esfuerzo está tan cuidadosamente diseñado que 2 millones de dólares fueron dedicados a convencer a votantes católicos (que se supone podrían favorecer la posición de Bush sobre el aborto) a votar. El partido también ha compilado una lista de correos electrónicos de 700 mil "capitanes" que tendrán la responsabilidad de comunicarse con votantes en sus comunidades para instarlos a votar.
El Partido Republicano también contará con los esfuerzos de organizaciones civiles conservadoras como la Coalición Cristiana, según la cual distrubuirá esta semana 70 millones de copias de una "guía electoral" diseñada por su líder evangélico Pat Robertson, en donde subraya las posiciones contra el aborto de Bush y el compromiso del candidato republicano con "los valores cristianos".
Los republicanos argumentan que necesitan desarrollar este enorme esfuerzo para contrarrestar la supuestamente más fuerte y amplia base activista de los demócratas. Un estratega del Partido Demócrata informó este jueves que la campaña de Gore tendrá 50 mil voluntarios el día de los comicios y que, con el apoyo de los sindicatos, espera poder hacer hasta 50 millones de llamadas telefónicas los últimos cuatro días antes de la elección.
Michael Whouley, quien coordina el esfuerzo nacional de promoción del voto para los demócratas, comentó al Wall Street Journal que algunos votantes podrían recibir hasta 10 recordatorios por teléfono y correo en estos últimos días antes de la votación.
La sede de la central obrera AFL-CIO en Washington está casi vacía porque casi todos que trabajan allí fueron enviados a prestar sus servicios en los esfuerzos de "sacar el voto" de última hora.
Aunque en esta recta final Gore ha solicitado la ayuda de muchos de sus amigos, hay un voluntario que el vicepresidente no ha invitado a acompañarlo en las giras de su campaña y que es a su casi ex jefe; el presidente Bill Clinton.
Aunque Clinton se presentó hoy en California para promover la campaña de Gore y también viajará a Arkansas, su estado natal, para hacer lo mismo, el periódico Los Angeles Times informó este día que la campaña de Gore ha rechazado solicitudes para que Clinton se presente en actos de apoyo en estados claves como Missouri, Pennsylvania y Michigan.