VIERNES 3 DE NOVIEMBRE DE 2000
Ť Se les subsidiaría temporalmente y de forma parcial, según el CAPEM
Debe apoyarse a empresas ante alza del gas
Ť Propone cambiar el régimen fiscal de Pemex Ť La paraestatal debe invertir en infraestructura
David Zúñiga Ť El precio del gas natural podría volver a alcanzar los ocho dólares por millón de BTU (unidad británica de generación de calor). Ante esta situación, el gobierno tendrá que diseñar un sistema de compensación fiscal similar al que aplica a las gasolinas y otros combustibles de uso masivo, señaló el presidente del Centro de Análisis y Proyecciones Económicas para México (CAPEM), César Castro Quiroz.
En entrevista, Castro explicó que el sistema de compensación reduce los impuestos de los combustibles para evitar que su precio impacte directamente los costos de las empresas y la inflación; consideró preocupante que no se haya aplicado este esquema en las industrias que han modificado sus procesos, entre ellas siderúrgicas, químicas y vidrieras.
Hasta ahora, explicó, se ha buscado diferir el impacto de estas alzas por medio de subsidios temporales, pero la idea es que rija el precio internacional. A México no le conviene que los altos precios del petróleo produzcan una desaceleración en Estados Unidos y Europa, pues 90 por ciento de las exportaciones mexicanas son no petroleras; no obstante, su efecto en la inflación es marginal.
Organizaciones empresariales alegan que el precio que pagan por el gas no es realmente internacional, sino el del sureste de Estados Unidos; asimismo, señalan que la compra de coberturas de riesgo no es una alternativa. Interrogado al respecto, castro Quiroz explica que la cotización es la estadunidense, porque es el principal proveedor de las industrias mexicanas (México importa 20 por ciento del gas natural que utiliza). No puede calcularse un precio ponderado porque México no compra gas de Europa ni de otras regiones; "nosotros estamos conectados a Estados Unidos, y no hay opción".
Respecto a las coberturas, señala que "debieron haberse comprado mucho antes, a principios de año"; en este momento no tendría sentido adquirirlas porque se volverán inútiles cuando el West Texas Intermediate vuelva a la banda de 22 a 28 dólares.
La alternativa, insiste, es otorgar un subsidio y/o reducir temporalmente el precio o el impuesto mientras los precios se estabilizan para apoyar a las industrias que usan el gas como materia prima y como combustible.
-ƑEs justo subsidiar con recursos públicos a empresas que no se protegieron a tiempo?
-Creo que sí se les debe echar la mano, pero en forma parcial; tampoco se trata de cubrirles lo más fuerte del golpe. Por ejemplo, si sube más de cinco dólares, el gobierno podría absorber el excedente, pero debe haber corresponsabilidad.
-Dar apoyo, pero con la condición de que se cubran cuando los precios se estabilicen.
-Así es.
Finalmente, señaló que la alternativa para resolver los problemas de abasto es modificar el régimen fiscal de Pemex, a fin de que la paraestatal pueda disponer de recursos para invertir en infraestructura. "Nuestro nivel de producción de crudo es casi el mismo de 1982; estamos hablando de cerca de 3.2 millones de barriles diarios. La inversión ha sido para tratar de mantener lo creado, no para expandir el sector ni para elaborar productos de valor agregado".