LUNES 30 DE OCTUBRE DE 2000

Ť Las autoridades comiciales, listas para la jornada del 12 de noviembre

Once candidatos contenderán por el gobierno de Jalisco

Ť La Comisión Estatal Electoral repartirá 36.38 millones de pesos entre los partidos

Cayetano Frías Frías, corresponsal, Guadalajara, Jal., 29 de octubre Ť A dos semanas de los comicios locales que se realizarán el 12 de noviembre, en los que se disputarán la gubernatura de Jalisco, las 124 alcaldías y 40 escaños del Congreso estatal, 20 de mayoría relativa e igual número de representación proporcional, el Consejo Electoral del Estado (CEE) dijo estar listo para la jornada.

Con un listado nominal de 3 millones 898 mil 876 ciudadanos que tendrán derecho a votar, ésta será con mucho la elección con mayor número de aspirantes que se haya registrado jamás: son ocho mil 540 las personas postuladas, entre ellas once candidatos a gobernador, 328 aspirantes a diputados (propietarios y suplentes) por la vía de la mayoría relativa, 220 a legisladores por la vía de la representación proporcional y hay siete mil 981 candidatos a regidores.

Por consecuencia, el costo de la elección también será onerosa, pues solamente para actividades tendientes a la obtención del voto, el CEE destinará a los partidos políticos la cantidad de 36.38 millones de pesos, de los que 70 por ciento se distribuye con base en el número de sufragios obtenidos en la elección inmediata anterior y el 30 por ciento restante a partes iguales para los once partidos.

Los más beneficiados en la distribución son el PAN, con 11.47 millones de pesos; PRI, con 9.38 millones de pesos, y PRD, con 4.04 millones de pesos, siguiéndoles el PVEM con 971 mil pesos y el PT con 478 mil.

Este subsidio es independiente del que reciben los partidos políticos por "actividades ordinarias" y "actividades específicas", que al PAN le significan ingresos adicionales por 7 millones de pesos, al PRI alrededor de 6.5 millones y para el PRD 3 millones de pesos durante el presente año.

El tope de gastos de campaña para gobernador es de 18.36 millones de pesos, mientras que los aspirantes a diputados locales no podrán gastar más de 918 mil 480 pesos. En lo que respecta a los candidatos a presidentes municipales, se les autoriza un gasto de 4.77 pesos por cada elector inscrito en la lista nominal.

Pese a que son once los partidos políticos que cuentan con registro en Jalisco, el panorama preelectoral con base en los antecedentes de estas mismas organizaciones tiende a un bipartidismo entre el PAN y el PRI, que llevan como candidatos a la gubernatura a Francisco Javier Ramírez Acuña y a Jorge Arana Arana, respectivamente, mientras que el PRD lucha con Raúl Vargas López por conservar el tercer lugar que tiene como fuerza política desde 1988.

El resto de los contendientes son Marisela Moguel Díaz, por el Partido del Trabajo; Gabriel de Jesús Varela Rizo, del Verde Ecologista de México; Juan Hernández Rivas, de Convergencia Democrática (CD); Adrián Michel, del Partido de Centro Democrático (PCD); Leda Isabel Tejeda, del Partido de la Sociedad Nacionalista (PSN); Silvia González Cervantes, del Auténtico de la Revolución Mexicana (PARM); Sergio René Rocha Reyes, del Partido Alianza Social (PAS), y Samuel Meléndez Luévanos, del Democracia Social (PDS).

Aquellos partidos que perdieron su registro al no alcanzar el mínimo de votos requerido por la ley el 2 de julio tienen derecho a participar en las elecciones de Jalisco porque la cancelación de sus derechos a nivel nacional se dio cuando ya había iniciado aquí en Jalisco el proceso electoral local y la ley no puede aplicarse en forma retroactiva.

Datos proporcionados por el Consejo Electoral del Estado (CEE) reflejan que el 12 de noviembre serán instaladas 6 mil 444 casillas, de las que 3 mil 304 son tipo básicas, 2 mil 157 contiguas, 147 extraordinarias y 36 serán especiales. Las Extraordinarias son aquellas que serán ubicadas en zonas cuyas condiciones geográficas hagan difícil el acceso de los electores y en los lugares donde se encuentran radicadas fuerzas armadas y corporaciones de seguridad, mientras que las especiales serán para los electores en tránsito.

En el trabajo de capacitación, el Consejo Electoral del Estado reporta que al 20 de octubre han sido 58 mil 912 los ciudadanos que tomaron el curso, con lo cual se supera el mínimo requerido de siete funcionarios por casilla, y todavía se sigue trabajando para tener el suficiente respaldo el 12 de noviembre.

Antecedentes de las últimas elecciones

Los resultados de los comicios del 2 de julio reflejan que en Jalisco se registró un abstencionismo de 31.81 por ciento en la elección para presidente de la República, en la que el PAN captó 49 por ciento de los votos, por 36 por ciento del PRI y 8 por ciento del PRD.

Un dato altamente significativo es que 62.85 por ciento de la población de Jalisco está concentrada en la zona metropolitana y en las ciudades medias, que es donde tradicionalmente encuentran su clientela los albiazules, y esto se reflejó en la elección federal pasada, pues en Zapopan el PAN logró 214 mil 634 votos, el PRI 141 mil 583 y el PRD 25 mil 167.

En Guadalajara, los panistas captaron 443 mil 132 votos, los tricolores 264 mil 176 y los del partido del sol azteca alcanzaron 53 mil 222; en Tlaquepaque, las cifras fueron en el mismo orden: 82 mil 157 para los primeros, 59 mil 217 para los segundos y 10 mil 566 para los últimos. En Tonalá la historia fue similar, pues el PAN logró 48 mil 512 sufragios, el PRI alcanzó 44 mil 27 y el PRD logró 5 mil 996.

Los operadores priístas, sin embargo, confían en que se repita el escenario que se presenta en las elecciones locales después de la elección federal, y ponen como ejemplo que en 1988, cuando Manuel Clouthier fue candidato del PAN, aquí ganaron ocho diputaciones de la zona metropolitana el 6 de julio, pero en noviembre del mismo año el PRI ganó la gubernatura con Guillermo Cosío Vidaurri y sólo dejó un distrito de mayoría al PAN de un total de 20.

La clave fue que se hubo un abstencionismo altísimo, pues oficialmente fue de 50 por ciento, sin tomar en cuenta que hubo maniobras ilegales que en el argot de los mapaches se traduce como "echarle fruta a la piñata".

En las elecciones locales de 1992, el PRI ganó las 20 diputaciones y se fortaleció en la zona metropolitana, enfrentando algunos movimientos poselectorales en Zapopan, donde los panistas argumentaron que hubo fraude. En la elección presidencial de agosto de 1994 los panistas ganaron de nuevo la zona metropolitana y por primera vez las diputaciones con cabecera en Puerto Vallarta, Ciudad Guzmán y Tepatitlán, como un aviso de lo que vendría después.

Para 1995 y después de que se habían registrado las explosiones del 22 de abril de 1992, que dejaron centenares de muertes, el despido de Cosío Vidaurri, así como el homicidio del cardenal Juan Jesús Posadas Ocampo, los panistas ganaron la gubernatura con Alberto Cárdenas Jiménez y triunfaron en 17 de los 20 distritos, además de ganar 52 alcaldías.

Para noviembre de 1997, ya con el desgaste de tres años de gobierno panista y el haber "implantado" récords en robo de vehículos, homicidios y asaltos a bancos, el PRI logró ganar once de las 20 diputaciones de mayoría, mientras que el PRD logró dos de representación proporcional con 15 por ciento de los votos, el PVEM alcanzó una.

Al sumar las curules, el Congreso estatal quedó con 20 diputados panistas y 20 militantes de otros partidos, lo que obligó a los albiazules a compartir la administración de la cámara y ceder algunas comisiones estratégicas, desde donde se han frenado negocios de los funcionarios del gobierno estatal. En ese contexto se registraron las elecciones del 2 de julio, durante las cuales 16 diputaciones federales fueron para el PAN y sólo tres para el PRI,