VIERNES 27 DE OCTUBRE DE 2000

Ť Inauguró el Presidente la reconfiguración de la refinería Cadereyta


Imaginación para producir más gas natural, pide Zedillo a Pemex

Ť El sector petrolero, indispensable para apoyar el crecimiento económico y la calidad de vida

Ť La modernización permitirá reducir la importación de gasolinas de 24 a 9%: Montemayor

Georgina Saldierna, enviada, Cadereyta, N.L., 26 de octubre Ť El presidente Ernesto Zedillo consideró ayer necesario que Petróleos Mexicanos (Pemex) desarrolle fórmulas imaginativas para producir más gas natural con la mayor prontitud posible, porque se trata de un producto esencial para el desarrollo industrial del país.

Con sus señalamientos, el jefe del Ejecutivo dio respuesta a la demanda que le presentó el gobernador Fernando Canales Clariond para que, sin subsidios, se estructure un sistema de precios que permita utilizar el energético (encarecido a causa de los enfrentamientos en Medio Oriente), tanto en el desarrollo de la industria como a nivel doméstico.

Los dos funcionarios hablaron luego de que Zedillo Ponce de León puso en operación la reconfiguración de la refinería de Cadereyta Ing. Héctor R. Lara Sosa, estrategia que incluyó la edificación de 10 plantas de procesamiento, la ampliación de las 10 existentes, obras de servicios auxiliares para soportar la creciente operación, la construcción de 55 tanques y 12 esferas de almacenamiento con una capacidad de 4.1 millones de barriles, 600 kilómetros de tubería, 260 bombas de transferencia de productos y una terminal de manejo y distribución de azufre.

Con la ampliación de la refinería se incrementa de 91 mil a 192 mil barriles por día la producción de gasolinas, diesel y turbosina, y se eleva de 230 mil a 270 mil barriles diarios la capacidad de proceso de petróleo crudo tipo Maya. El proyecto Cadereyta tuvo una inversión de mil 618 millones de dólares, se realizó bajo el esquema de obra pública financiada y su ejecución estuvo a cargo del consorcio empresarial formado por Sunkyong; Siemens, de Alemania, y Tribasa, de México.

El gobernador Canales Clariond destacó en su discurso que gran parte del desarrollo industrial y de la calidad de vida que se tiene en Nuevo León se debe al uso de gas natural. ''Sabemos que por las circunstancias de los mercados internacionales el precio de este energético en el mundo en los últimos meses ha crecido en forma exponencial'', por lo que pidió crear un sistema de precios que lo haga accesible.

Como parte de su respuesta, el presidente Ernesto Zedillo dijo que en su administración se incrementó en 34 por ciento la extracción de gas natural; sin embargo, la situación del mercado petrolero mundial pone de manifiesto la urgencia de que ''apretemos el paso en el desarrollo de una mayor capacidad de producción. Será muy importante que en el futuro cercano, en lo inmediato, Pemex desarrolle nuevas fórmulas imaginativas para que el país pueda producir más gas''.

Previamente, el jefe del Ejecutivo señaló que el sector petrolero ha sido y seguirá siendo por mucho tiempo más, indispensable para apoyar el crecimiento de la economía nacional y la calidad de vida de todos los mexicanos. Así, resaltó que de esta área proviene el 34 por ciento de los ingresos fiscales del gobierno federal, en promedio, y que sus exportaciones representan 9 por ciento del total.

Por su impacto en la economía, subrayó que durante su gobierno se invirtieron 375 mil millones de pesos para fortalecer la capacidad de respuesta de la industria petrolera. Esta cantidad es la mayor que ha invertido una administración federal desde 1982. Como resultado, la producción de crudos y líquidos del gas se situará en 3.4 millones de barriles diarios. Además, se elaboran 1.3 millones de barriles diarios de productos refinados del petróleo. No obstante, la oferta debe crecer más, por lo menos al ritmo de la economía.

El director de Pemex, Rogelio Montemayor Seguy, informó que la reconfiguración de la planta de Cadereyta forma parte de un programa de modernización de todo el sistema nacional de refinación que consta de tres etapas. La primera se inició con la refinería de Nuevo León en 1997; la segunda se efectúa en las de Madero, Tula y Salamanca y comenzó el año pasado, y la tercera fase empezará en el 2001 y comprende las refinerías de Minatitlán y Salina Cruz. La modernización del sistema permitirá reducir el volumen de importaciones de gasolina de alrededor del 24 por ciento del total de la demanda al 9 por ciento a la conclusión de las obras en el año 2005, explicó.