MIERCOLES 25 DE OCTUBRE DE 2000
Ť Su diseño, "con base en tiempos políticos", afirma
El plan de génericos intercambiables, "sin el impacto esperado": Anafam
Angeles Cruz Ť El programa de medicamentos genéricos intercambiables (GI) que surgió con el objetivo de reducir los precios de los productos al consumidor, se diseñó con base en tiempos políticos y por eso a la fecha no ha tenido el impacto que se esperaba, afirmó Mauro Lara, presidente de la Asociación Nacional de Fabricantes de Medicamentos (Anafam).
Dijo que para incorporar un medicamento al catálogo de GI, los fabricantes requieren invertir entre 50 y 70 mil dólares, además de que las pruebas para verificar la bioequivalencia con el producto original tardan tres meses aproximadamente. De ahí podrá calcularse, abundó, cuánto tiempo requiere la industria para impulsar este mercado.
Aseguró que los fabricantes nacionales están interesados en el desarrollo del mercado de GI. De hecho, recordó, "hemos coadyuvado con las autoridades". Así lo demostraron hace unos meses aportando 11 millones de pesos para la instalación de un centro de estudios de bioequivalencia en el Hospital General de México.
Mauro Lara detalló que este centro será el tercero de los laboratorios autorizados para realizar las pruebas necesarias para los GI. Empezará a funcionar entre noviembre y diciembre próximos.
En conferencia de prensa para anunciar la realización del primer Taller sobre Patentes y Marcas en Cuernavaca, Morelos, del 26 al 28 de octubre, el líder de los fabricantes de medicamentos se refirió también a la desaparición de la industria farmoquímica del país. La política económica neoliberal propició el quebranto, y de 97 empresas que existían hace 10 años, sólo quedan 20, que cubren sólo 20 por ciento de la demanda nacional, mientras que el resto se tiene que traer del extranjero.
De manera paulatina, explicó, entre 1989 y 1991 el mercado mexicano fue invadido por productos provenientes de China e India a precios muy bajos y con los cuales era imposible competir. "Dimos al traste con una industria que tenía cobertura nacional, balanza comercial favorable y era autosuficiente", indicó.
Si bien reconoció la importancia de las inversiones extranjeras para el país, Lara también resaltó que la reactivación de la industria nacional debiera ser prioritaria para no depender de los insumos del extranjero, porque "cuando vienen las crisis internacionales, nos ponen en aprietos".
La Anafam agrupa a 38 laboratorios, que según Mauro Lara, son el principal proveedor del sector salud, con una participación de 82 por ciento.
El objetivo del taller que comenzará mañana es dar a conocer el régimen de patentes y marcas suscrito por México y la normatividad y procedimientos que regulan su observancia, así como propiciar el adecuado aprovechamiento del mismo para la modernización de las empresas farmacéuticas interesadas en registrar y/o explotar una patente o una marca en el país.