MARTES 24 DE OCTUBRE DE 2000

Ť Tortilla y leche subieron 455 por ciento: Amedec


Aumentó 370% el precio de la canasta básica este sexenio

Ť A partir de 1994, el poder adquisitivo cayó a niveles de los 70

Patricia Muñoz Ríos Ť El precio de la canasta básica aumentó 370 por ciento durante el presente sexenio, mientras el salario mínimo sólo se incrementó 135 por ciento, lo que provocó que se redujera dramáticamente el consumo de productos de primera necesidad en el país, que el poder adquisitivo retrocediera a niveles de los 70 y que la promesa central de campaña del presidente Ernesto Zedillo de "bienestar para tu familia" quedara incumplida.

La Asociación Mexicana de Estudios para la Defensa del Consumidor (Amedec) dio a conocer ayer un informe semestral sobre el comportamiento de precios, el cual apunta que, ciertamente, se ha logrado contener la inflación, "pero el costo social ha sido altísimo", pues además de los 40 millones de mexicanos en pobreza extrema, 70 por ciento de la población sufre malnutrición, y la talla de los niños mexicanos se ha reducido en cerca de 5 por ciento.

El consumo de alimentos básicos ha bajado entre 10 y 50 por ciento -dependiendo del rubro-; el mercado interno sufre una prolongada postración que amenaza las fuentes de trabajo y es evidente que hoy en día, el mayor reto para la economía nacional es encontrar la fórmula para iniciar la recuperación del poder de compra de las mayorías, porque el nivel de los salarios en México es de los más bajos del mundo, mientras que los precios son similares a los de los países más ricos, se detalla en el documento.

Apunta que a finales de 1994, la canasta básica tenía un precio promedio de 640 pesos, mientras que al cierre del sexenio la cotización de estos mismos productos es de 2 mil 55 pesos, casi tres veces más.

Según se señala, entre los productos que más incrementaron su valor destacan los alimentos básicos, como la leche, que se elevó en 455 por ciento; los quesos, con 516; las galletas saladas, 483; las naranjas, 341; los huevos, 300; el pan de caja, 289; la mantequilla, 275; la cerveza, 258; los aceites comestibles, 250; la carne de res, 214 en promedio; el gas doméstico, 405, y el servicio telefónico, hasta 500 puntos porcentuales.

Adicionalmente, aumentaron los precios de detergentes, en 328 por ciento, y los medicamentos se han vuelto completamente inaccesibles para los consumidores; tan sólo el poder de compra del salario frente a las medicinas se ha perdido en 172 por ciento, según el estudio de la Amedec.

Pone como ejemplo de la dramática situación el caso de la tortilla, que se elevó en 455 por ciento en este periodo, y señala que a consecuencia de este encarecimiento, el consumo de este alimento se desplomó entre 12 y 30 por ciento. Esta caída es un hecho inédito en la historia reciente del país, ya que tradicionalmente "la tortilla había sido el refugio alimentario de los pobres, muro de contención contra el hambre abierta", y fue el último de los productos con precio controlado hasta 1998. Explica que hasta hace dos años se podía comprar 16 kilos con un salario mínimo, y ahora sólo se puede adquirir 7.5 kilogramos.

Expone que el precio de la leche también se elevó en este sexenio en 328 por ciento, y las presentaciones en polvo y evaporadas hasta en 600 por ciento, lo que ha provocado que 83 por ciento de la población haya excluido este producto de su dieta diaria. Así, con unas ventas caídas en este sector, quienes la consumen destinan un promedio de 230 mililitros diarios, mientras que la OMS recomienda 600 mililitros.