MARTES 24 DE OCTUBRE DE 2000
Ť Asevera que era intolerante a las frustraciones
Ramos Tercero se suicidó por no soportar las críticas: PGR
Ť Carecía de habilidad para aceptar errores ante un escrutinio
Gustavo Castillo García Ť Las causas del suicidio de Raúl Ramos Tercero fueron su intolerancia a las frustraciones, su escasa capacidad hacia la crítica y su marcada falta de habilidad para aceptar sus errores ante un escrutinio social y público, concluyó la Procuraduría General de la República (PGR).
Ramos Tercero se quitó la vida el 6 de septiembre pasado. Fue subsecretario de Comercio y Fomento Industrial y encargado de la operatividad del Registro Nacional de Vehículos (Renave).
En conferencia de prensa, Everardo Moreno Cruz, subprocurador A de Procedimientos Penales, ratificó la hipótesis del suicidio y dio a conocer detalles de cómo, desde el 30 de agosto, el funcionario comenzó a preparar su muerte.
Informó que en el paraje La Loma, localizado en el Parque Nacional La Marquesa, sitio donde Ramos Tercero se quitó la vida, su cadáver fue objeto de pillaje. Le robaron los 2 mil pesos y el teléfono celular que portaba.
Confirmó que en la familia del subsecretario existen antecedentes de suicidio. Un hermano de Raúl Ramos Tercero se quitó la vida de un balazo a los 14 años, aproximadamente en 1980.
El subprocurador dio puntual referencia a cada una de las líneas de investigación que siguió la PGR para descartar que el deceso del funcionario de la Secofi fuera inducido o "asistido", como en círculos políticos y sociales se especuló tras conocer su muerte.
La Procuraduría se trazó como vertientes de la indagatoria saber si fue homicidio o suicidio; si hubo nexo entre su muerte y el Renave y si su situación patrimonial tuvo que ver con el deceso.
Una detención preocupante
Para desahogar las líneas de investigación, la Subprocuraduría A tomó 32 declaraciones ministeriales, entre ellas al secretario de Comercio, Herminio Blanco; a familiares; a colaboradores cercanos del fallecido funcionario; a Henry Davis, socio mayoritario de la empresa concesionaria del Renave, y a Ricardo Miguel Cavallo, ex director del Renave, quien en la actualidad está sujeto a un proceso de extradición a solicitud del gobierno de España, donde se le acusa de genocidio, tortura y desapariciones forzosas.
Los interrogatorios alcanzaron también a quienes, antes que las autoridades, tomaron conocimiento del deceso.
La captura de Ricardo Miguel Cavallo, ocurrida el 24 de agosto de este año, preocupó a Ramos Tercero.
Amelia Hinojosa Zamora y Mario Octavio Uribe Camarillo, secretarios del funcionario, así como Gustavo María Saavedra, director general de Industrias y Raúl del Campo Núñez, director de Industria Automotriz, coincidieron ante la PGR: "A partir de la noticia de la detención de Cavallo, el occiso se encontraba pensativo hasta el día de su deceso, notándolo preocupado, además de que canceló citas y compromisos (...) Se encontraba más presionado en cuanto a su trabajo".
Del Campo Núñez fue más explícito. Aseveró: "Las dificultades se presentaron en las últimas etapas del Renave, repercutieron en forma directa para el occiso, lo que debe haberle afectado anímicamente al grado de quitarse la vida".
Declaración ante Herminio Blanco
Ramos Tercero dijo el 31 de agosto al titular de la Secofi, Herminio Blanco, sentir que le estaba fallando y que lo hacía ver mal ante la prensa y los críticos.
El secretario le respondió, según entrevista concedida a este diario: "A ver, explícame cómo me estás fallando. ƑMe quieres decir que tú podrías haber predicho el resultado del 2 de julio? ƑMe quieres decir que tú podrías haber predicho que el señor Cavallo iba a ser quien es y que nos iba a causar problemas? No había forma de pronosticar esas dos cosas".
Ante la PGR, Blanco afirmó que esa vez fue la única ocasión en que lo notó angustiado y que le respondió que no se sintiera culpable.
Preparativos del suicidio
El 30 de agosto, el subsecretario realizó actividades que serían claves para su muerte: a las 11 de la mañana se entrevistó con Ismael Gómez Gordillo, director general de Aseguradora Hidalgo, a quien "le expresó su preocupación por las consecuencias que pudiesen derivarse de los problemas de la operatividad del Renave".
El subsecretario preguntó a Gómez Gordillo "sobre la existencia de un seguro para proteger la responsabilidad de carácter civil en que los servidores públicos pudieran incurrir en el ejercicio de su cargo, a lo que le respondió que estaba estudiando esa posibilidad". El asunto jamás se concluyó.
Luego de la reunión en Aseguradora Hidalgo, Efraín Carbajal Sánchez, chofer de Ramos Tercero, llevó a éste a Presidente Masaryk número 111, colonia Polanco. Las
conclusiones de la PGR no mencionan con qué persona se entrevistó ni a quién pertenece ese inmueble.
Posteriormente, el chofer lo trasladó a Liverpool Polanco y a la Plaza Comercial Moliere, donde el ex funcionario ingresó a La Casa del Fumador y adquirió "una navaja y una piedra para afilarla".
Ese día, Ramos Tercero acudió al filo de las 13:45 horas a Office Max, sucursal Polanco, donde adquirió los sobres en los que, el 6 de septiembre, metió cada una de las seis cartas póstumas que dejó en el interior de su vehículo.
El día del suceso
El 6 de septiembre, Amelia Hinojosa, secretaria privada de Ramos Tercero, "proporcionó a éste las hojas blancas, el sobre de papel manila y una pluma de color negro, que luego fueron identificados como los que empleó para redactar las cartas póstumas y que posteriormente guardó en el sobre mencionado".
El subsecretario permaneció hasta poco antes de las 12 en su oficina. Al mediodía se trasladó a su casa y seis minutos después salió de ella, subió a su auto y enfiló rumbo a Toluca.
Al paraje La Loma llegó a las 13:45 horas. Su cadáver fue reportado a la Cruz Roja a las 7:05 de la noche. Agentes de la policía municipal de Ocoyoacac y de Santiago Tianguistenco tomaron conocimiento de los hechos y se trasladaron al lugar. El cuerpo fue recogido al filo de las nueve de la noche por el Servicio Médico Forense de la Procuraduría General de Justicia del Estado de México.
Las dos navajas
La navaja adquirida en La Casa del Fumador no fue la que utilizó Ramos Tercero para quitarse la vida. Compró el cutter con el que lo hizo en la papelería Laurita, que se localiza en Tiro al Pichón número 14, colonia Lomas de Bezares, delegación Cuajimalpa, muy cerca del que fuera domicilio del ex funcionario.
El otro objeto punzocortante y la piedra para afilar fueron encontradas dentro del vehículo de cargo de Ramos Tercero.
Los peritajes
"Sicológicamente se entiende que tenía niveles muy altos de exigencia personal y nula resistencia para aceptar frustraciones", dijo el subprocurador Moreno Cruz.
El dictamen de una interpretación sicológica del contenido de las cartas póstumas, elaborado por Marisela Campos Velázquez, establece: "Estaba viviendo sentimientos de desesperación; se aprecian sentimientos de impotencia, aflicción y culpabilidad en lo relativo a su situación laboral".
Era "una persona con elevado nivel de autoexigencia laboral, con poca capacidad para la crítica y marcada inhabilidad para aceptar sus errores ante un escrutinio social y público".
Ayer, Moreno Cruz externó que durante las diligencias practicadas por la PGR no se encontraron indicios de enfrentamiento con Henry Davis ni con Ricardo Miguel Cavallo y que la relación con ambos fue cordial; además, el asunto del Renave fue tratado en la misma tesitura.
Rechazó las versiones que ligan a la esposa de Ramos Tercero con militares argentinos y las de un grupo de colaboradores de Ricardo Miguel Cavallo, que hicieran presumir que la muerte del ex subsecretario fue inducida o "asistida".
Aseguró que la licitación y el otorgamiento de la concesión del Renave fueron transparentes; que el monto de los recursos con que contaba Ramos Tercero y su esposa hasta el 31 de agosto pasado eran por 142 mil 224 pesos, por lo que no hay pruebas documentales que indiquen enriquecimiento ilícito. La indagatoria fue enviada de manera definitiva al archivo, es decir, no hay nada más que investigar.