SABADO 21 DE OCTUBRE DE 2000
Ť Sería un acto de justicia social y un reconocimiento a la burocracia, dice
Insiste la FSTSE en aguinaldo de 90 días y bono sexenal
Ť Debió suspender su Consejo Nacional, pues la sede se ubica cerca de la discoteca que ardió
Fabiola Martínez Ť Una vez más, la Federación de Sindicatos de Trabajadores al Servicio del Estado (FSTSE) solicitó al gobierno federal incremento del aguinaldo a 90 días y el pago de un bono sexenal (estímulo económico por término de administración) equivalente a un mes de salario, ''como un acto de justicia social y en reconocimiento al esfuerzo y dedicación'' de 1.8 millones de trabajadores.
Desde septiembre pasado, la FSTSE hace gestiones en torno a un pliego petitorio de 11 puntos -aprobado en asamblea- y para ello estableció una mesa de negociación con representantes directos del secretario de Hacienda, José Angel Gurría.
Ayer viernes, el presidente Ernesto Zedillo hubiera dado una respuesta sobre el particular en el marco del Consejo Nacional Ordinario de la FSTSE, sin embargo, el acto fue pospuesto para la semana próxima debido a que la sede de esta federación se ubica muy cerca del lugar donde ardió la discoteca Lobohombo.
A partir del 2 de julio, el secretario general de la FSTSE, Joel Ayala, y su comité ejecutivo, exigieron al gobierno una serie de compensaciones económicas y alternativas para incrementar los salarios, al considerar que en los años anteriores los trabajadores al servicio del Estado ''aceptaron con disciplina y lealtad las restricciones presupuestarias'', y ahora que se presenta incluso superávit en las cuentas públicas ''creemos que es justo una retribución a este esfuerzo''.
Semanas después, Ayala manifestó su inconformidad por la autorización del pago a los integrantes del equipo de transición del presidente electo, Vicente Fox, ''mientras que a nosotros se nos relegaba nuevamente a un esquema restrictivo de fin de año y de sexenio''.
En el pliego petitorio se solicita también un aumento de salario a través del esquema de recategorización y renivelación escalafonaria; establecimiento de un nuevo catálogo general de puestos, y homologar las condiciones de trabajo en sectores afines en las dependencias de gobierno y organismos descentralizados del Estado.
Además, la liberación de los recursos económicos que el Fovissste tiene en reserva para incrementar la vivienda de los trabajadores; promover el servicio civil de carrera; basificar a los empleados eventuales cuyas actividades están consideradas como permanentes, y descongelar plazas que corresponden por derecho escalafonario a los propios trabajadores, entre otras peticiones.
En el segundo Consejo Nacional Ordinario de la FSTSE, a realizarse el próximo miércoles y al que asistirá el presidente Zedillo, se delinearán las bases con las que los delegados de cada sindicato federado elegirán o ratificarán la directiva de esta federación, así como otros aspectos de su vida interna, la relación con el próximo gobierno y con el PRI.
En el congreso nacional, de marzo de 2001, podrían revisarse algunos aspectos de los documentos básicos de la federación, relativos a los procesos internos, recientemente impugnados por una veintena de sindicatos federados que se oponen al actual esquema de elección de dirigentes, al considerar que limita el ejercicio democrático de los trabajadores al servicio del Estado.