VIERNES 20 DE OCTUBRE DE 2000
Ť Ni en la Nueva España la situación era mejor, dice Raúl González Schmal
Inmejorable, la coyuntura para la libertad religiosa: asesor foxista
Ť El presidente electo podrá mirar de frente sin los oscuros anteojos del juarismo, señala Olimón Nolasco
José Antonio Román Ť Ni en la época de la Nueva España, México había estado en una ''situación tan favorable'' como lo está ahora, en la víspera del gobierno de Vicente Fox, para llevar a cabo una profunda reforma que garantice plenamente el derecho a la libertad religiosa y en consecuencia las relaciones entre el Estado y las comunidades creyentes, afirmó Raúl González Schmal, asesor de la mesa de consulta en materia religiosa del equipo foxista.
Al participar en el panel La libertad religiosa en México. ƑQué propone el nuevo gobierno?, señaló que el país se encuentra en una ''coyuntura histórica e inédita'' para hacer realidad el respeto a la libertad religiosa, a la que el papa Juan Pablo II ha calificado como la ''piedra angular'' de todos los derechos humanos.
Durante el foro, realizado la noche del pasado miércoles en el Instituto Mexicano de Doctrina Social Cristiana (Imdosoc), González Schmal dijo que el decálogo de propuestas presentadas por Vicente Fox en materia religiosa, durante su campaña, tiene también el ''enorme acierto" de haber sido planteado dentro del contexto de un ''Estado laico'', pero entendido éste no como antirreligioso o anticlerical.
Es decir, no se trata de Estado confesional, como algunos pretenderían de buena o mala fe, sino de un Estado laico moderno, que incluso hay quienes denominan ''Estado de libertad religiosa''.
Necesario agradecimiento
Además, consideró que habría que ''agradecer'' a Vicente Fox esta visión que tiene de la libertad religiosa, la cual pretende reconocer de manera amplia, pues parte de la premisa de que dicha libertad es un derecho humano fundamental que al Estado le toca reconocer y proteger.
Durante su exposición, abordó con detalle las propuestas contenidas en el llamado decálogo. Dijo que aunque se pueden presentar ciertas interpretaciones, por su redacción que ''no es muy precisa'', estas imprecisiones se deben a que fueron planteadas en el fragor de la contienda electoral, aunque se parte de la premisa de que la libertad religiosa es un derecho inalienable, consagrado también en múltiples documentos internacionales.
Desde hace un par de meses, Raúl González Schmal se integró como asesor a la mesa de consulta en materia religiosa del equipo foxista, que es coordinada por Alberto Ortega. De dicha mesa, hace dos semanas surgió la propuesta presentada por varias iglesias -incluyendo la católica- para que el gobierno de Fox sustituya la actual Subsecretaría de Asuntos Religiosos por un ''consejo nacional para la libertad religiosa'', que también dependa, en un principio, de la Secretaría de Gobernación.
En el panel también participó el presbítero e historiador Manuel Olimón Nolasco, autor de varios libros sobre las relaciones Estado-iglesias. Recordó que desde 1917, cuando se promulgó la actual Constitución, hasta 1992, año en que se dieron las reformas constitucionales en materia religiosa, no hubo una separación entre el Estado y las iglesias, sino una supremacía del primero sobre las segundas.
Dijo que por su formación, Vicente Fox podrá mirar de frente esta relación sin los ''oscuros anteojos'' del juarismo, del constitucionalismo y del cardenismo, pero advirtió del surgimiento de falsas interpretaciones que están dentro de este clima de cambio, en las cuales algunos sectores de la misma Iglesia piensan que tienen el derecho de intervenir en cuestiones públicas y también, erróneamente, a meterse en asuntos de la vida privada del presidente electo.
Incluso, dijo, se ha llegado a decir: ''Fox es católico, luego la Iglesia al poder; Fox tiene un asunto matrimonial un poco delicado, entonces nos vamos a meter en su vida privada''.
Olimón Nolasco cuestionó severamente a grupos de la Iglesia o ligados a ella que piensan de manera errónea que por la confesión católica del presidente electo, la doctrina de la Iglesia tendría que aplicarse a las leyes civiles.
''Esto me preocupa porque se está pretendiendo que un gobierno ejercite un papel que no le corresponde, Ƒo acaso le corresponde al gobierno o al Estado promover los valores más profundos de la conciencia? No, le corresponde respetarlos, pero son las comunidades religiosas, con su inspiración, las que tienen la obligación de formar los valores en las conciencias y de hacer una especie de rechazo adulto del mal y no simplemente una campaña de propaganda o de manifestaciones para detener alguna legislación'', dijo.
Referencias familiares
Y aunque no mencionó directamente al semanario Nuevo Criterio, editado por la Arquidiócesis de México, lamentó que el editorial de un medio católico diera cátedra sobre lo que debiera hacer o no con su vida privada el presidente electo, Vicente Fox, sugiriéndole regresar con su primera esposa. Lo que está de fondo aquí, sostuvo, es la verdadera separación entre el Estado y las iglesias, pero una separación ''bien entendida''.
Por otra parte, cuestionó la propuesta de crear un consejo nacional para la libertad religiosa, donde presumiblemente las iglesias estarían integradas a través de representantes. El conflicto aquí, adelantó, estará en la representatividad de las iglesias, pues lo más probable es que se enfrente una situación similar a la representación que tienen los países en la Organización de las Naciones Unidas (ONU).