MIERCOLES 18 DE OCTUBRE DE 2000
Ť Clinton anuncia integración de una comisión para investigar causas de la escalada
Pactan Barak y Arafat el fin de la violencia en territorios palestinos
Ť Ninguna de las partes firmó la resolución, dice Reuters Ť Sesión especial de la ONU en Ginebra
Dpa, Ap, Reuters y Afp, Sharm el Sheikh, 17 de octubre Ť Israelíes y palestinos acordaron este martes el cese de casi tres semanas de sangrientas hostilidades y el nombramiento de una comisión de investiga- ción sobre las causas del estallido de la violencia en los territorios palestinos, al término de la reunión cumbre que se celebró por dos días en este balneario egipcio.
Sin embargo, tanto el primer ministro israelí, Ehud Barak, como el presidente palestino, Yasser Arafat, manifestaron cautela después de que el presidente de Estados Unidos, Bill Clinton, anunció el acuerdo que ambas partes aceptaron pero que ninguna firmó, según Reuters.
"La prueba estará en la ejecución", dijo Barak, quien anunció que en 48 horas, si hay calma, retirará todos los equipos pesados del ejército israelí a los lugares que ocupaban antes de que comenzara la crisis, y concluirá el cierre de los territorios palestinos, mientras que Arafat afirmó al regresar a Gaza que desea que Israel sea estricto en la implementación precisa y honrada de lo que se acordó.
El presidente de Egipto, Hosni Mubarak, declaró que el resultado de la reunión podría no satisfacer las expectativas, pero constituye un paso adelante para reanudar los esfuerzos para una paz permanente después de que la región se haya estabilizado.
Clinton anunció que israelíes y palestinos alcanzaron un acuerdo sobre tres grandes objetivos: fin de la violencia, instauración de una comisión de investigación sobre el origen de los enfrentamientos y la reactivación del proceso de paz.
Sobre el primer punto, Clinton dijo que israelíes y palestinos van a exhortar públicamente a que se ponga fin a la violencia y a eliminar los puntos de fricción para evitar la repetición de los levantamientos.
En cuanto al punto dos, Estados Unidos coordinará con ambas partes y con el secretario general de la Organización de Naciones Unidas (ONU), Kofi Annan, la creación de una comisión para investigar los acontecimientos de las últimas semanas.
Sobre el tercer punto, se acordó que Washington consultará con ambas partes, durante las próximas dos semanas, para determinar cómo continuar las gestiones de paz.
Luego de esto el mandatario estadunidense advirtió a los protagonistas del conflicto que si no ponen en práctica sus compromisos, la tensión y la inestabilidad volverán a imperar en la región, aunque reconoció las dificultades que se enfrentarán para que esto se convierta en realidad.
Reabren el aeropuerto de Gaza
Por lo pronto, a su regreso a Israel, Barak ordenó la reapertura del aeropuerto palestino de Gaza, y a su ejército que actúe para poner fin a la violencia y ponga en práctica la declaración de Sharm el Sheikh, así como ponerse en contacto con sus homólogos palestino y estadunidense para coordinarse inmediatamente con ese objetivo.
Arafat se comprometió a devolver a prisión a los integrantes musulmanes de Hamas y Jihad liberados por órdenes suyas en días pasados, y aunque consideró que los resultados obtenidos en la cumbre no responden a la esperanza del pueblo palestino y árabe, "son una base sobre la que se puede construir (...) a condición de que exista una verdadera voluntad de paz".
Un funcionario israelí de alto rango, que rechazó ser identificado, dijo a la prensa a bordo del avión en el que Barak regresó a su país, que durante la cumbre Tel Aviv y Palestina también alcanzaron un entend imiento secreto sobre asuntos de seguridad, y cuya aplicación será supervisada por la Agencia Central de Inteligencia, en tanto que el jefe palestino de Seguridad Preventiva para Cisjordania, Jibril al Rajoub, negó la existencia de tal acuerdo.
En la cumbre que concluyó luego de que Clinton sostuvo arduas entrevistas relámpago con Arafat y Barak, participaron el presidente Mubarak, Clinton, Kofi Annan, el rey Abdallah II de Jordania y el alto representante para la política exterior de la Unión Europea, Javier Solana.
En Ginebra, los 53 estados miembros de la Comisión de Derechos Humanos de la ONU comenzaron una sesión especial para analizar la situación, en la que se podría decidir el establecimiento de una comisión de investigación sobre las violaciones de las garantías individuales y determinar la responsabilidad de la violencia --que ha dejado 111 muertos desde el 28 de septiembre--, de la cual se acusaron mutuamente en esta primera sesión israelíes y palestinos.
Los países del mundo acogieron con alivio los acuerdos alcanzados en Sharm el Sheikh, pero la Unión Europea, Canadá y Rusia insistieron en la necesidad de una aplicación correcta e inmediata de los mismos por las partes en conflicto.
Gerhard Schoeder, canciller federal alemán, expresó que los acuerdos sentaron las bases para detener la violencia y derramamiento de sangre, y señaló que su rápida aplicación es clave para reanudar las negociaciones sobre el proceso de paz, mientras que el jefe de la diplomacia japonesa, Yoshei Kono, dijo que Tokio está listo para proporcionar toda la ayuda posible para lograr la paz por medio de la negociación.
A su vez, el ministro de Defensa de Irán, Ali Chamjani, propuso la utilización de la producción y venta del petróleo por parte de los países productores árabes como arma de respaldo a Palestina.
"Los jefes de Estado islámicos deben tomar decisiones políticas, económicas, petroleras, diplomáticas, informativas y de defensa comunes", señaló.