Una a una sus almas regresaron a México por el Cañón del Chivo
Ť La nube, duelo público contra la banalización de la muerte
Merry Mac Masters, enviada, Tijuana, BC Ť Una por una sus almas emprendieron el camino de regreso a México.
La única nube visible en el cielo azul de Goat Canyon (Cañón del Chivo) ?enclave por donde pasa la barda divisoria antes de continuar a Playas de Tijuana? el pasado sábado era aquella fabricada con mil globos blancos por Alfredo Jarr (Santiago de Chile, 1956). El artista chileno, radicado en Nueva York, tiene 20 años de trabajar con refugiados e inmigrantes. Respecto de los tres mil muertos en la región, en la última década al intentar cruzar la frontera, Jarr sólo pudo sentir rechazo. Su proyecto La nube nació de la indignación. Pero, en vez de hacer un acto de protesta, quiso ofrecer un momento público de duelo, pues no existe un recogimiento colectivo en torno de estas desapariciones.
Jarr, entonces, respondió a la rabia y violencia con poesía y música de cámara a fin de revaluar la vida humana. La nube de globos suspendida sobre la barda se movía con el viento. De repente tomó la forma de un borrego. Sobre las 10:30 horas, y durante cerca de 60 minutos, se dio la controversia musical en tres puntos ?había una chelista de lado de Estados Unidos?, mientras la nube lentamente soltaba su contenido. A la media hora se pidió un momento de silencio para los fallecidos, algo en que insistió Jarr ante la ''banalización" de que ha sido objeto la muerte en la frontera. Poco después pasó un vehículo de la Border Patrol. Al final una estela de esferas, ayudada por las corrientes de aire, tomó camino hacia el sureste.
Para su proyecto, Jarr trabajó con una serie de instituciones que brindan apoyo a los inmigrantes. Y no obstante que algunos familiares fueron invitados a la ceremonia, el artista reconoció que la mayoría no reside en la frontera, entonces, ''hemos tenido problemas para localizarlos a todos". Además, todavía se desconoce la identidad de 20 por ciento de los muertos.
A la zaga, el objeto artístico
La nube constituyó el momento más emotivo del fin de semana inaugural (13 al 15 de octubre) del proyecto binacional de arte contemporáneo Insite2000 organizado en la región de Tijuana y San Diego. Otro, sin embargo, resumió los nuevos lineamientos de la trienal, en donde el objeto artístico ha quedado atrás frente al proceso de trabajo, su documentación, así como el involucramiento de los públicos. Un ejemplo fue Las reglas del juego, de Gustavo Artigas (ciudad de México, 1970).
Dividido en dos partes, la primera consistió en un partido de baloncesto entre dos equipos estadunidenses comunitarios y otros dos equipos mexicanos de soccer, pero simultáneamente en la misma cancha. La idea era que cada quien aprendiera a estar con el otro, pero manteniendo su estatus. Artigas sostuvo cerca de cinco reuniones con cada uno de los equipos para sensibilizarlos con proyectos de arte contemporáneo. También trabajó con el entusiasta público estudiantil que asistió a la actividad en la Escuela Preparatoria Lázaro Cárdenas. Pero, aparte del fenómeno sociológico, ¿en qué momento resulta una experiencia artística? Para Artigas esto empieza desde el ''diseño cromático de los uniformes" hasta ''todas las circunstancias de roce que se dieron", y las dislocaciones de tiempo. Para la segunda parte del proyecto se construyó un frontón en la colonia Libertad, frente a la barda, pero un poco más alto. A los dos días los vecinos le habían acomodado una canasta de basquetbol.
Contrario a las versiones anteriores de Insite, ahora los 29 proyectos, que comprenden a 35 artistas, serán abiertos o presentados en bloques de cuatro fines de semana. Por esto también el encuentro se extendió hasta el 25 de febrero de 2001. Entre lo que se dio a conocer ahora está Mama, del brasileño Mauricio Dias y el suizo Walter Riedweg. En el pasillo peatonal para entrar a México, ambos construyeron dos cuartos. En uno se presenta la videoinstalación Rituales viciosos, en donde un grupo de inmigrantes una y otra vez trata de pasar la frontera en un punto en el que siempre son capturados. Por su parte, Motherland consta de un video de 12 minutos que versa sobre la relación maternal de los oficiales aduaneros estadunidenses con sus perros ?Woody, Kelly, Ray, Egon, Scooty? entrenados para detectar drogas.
En en el área de Playas de Tijuana y Border Field State Park, Valeska Soares (Brasil, 1956) creó la ilusión de un hoyo en la barda al instalar grandes placas metálicas reflejantes. Sobre estos espejos se puede leer el texto Ciudades invisibles, de Italo Calvino, en español del lado mexicano, pero que se puede leer al revés del lado de San Diego, y viceversa.
Las únicas dos intervenciones en museos son las tres figuras de cera ?la Virgen de Guadalupe, Dante y Richard Nixon descubierto con las cintas del Watergate? que el nativo de Torrence, California, Jeffrey Vallance concibió para el Museo de Cera de Tijuana, y el par de pinturas ''más deseadas" que los rusos Vitaly Komar y Alex Melamid confeccionaron con base en encuestas realizadas en los dos lados, para el Museo de Arte de San Diego. Se exhiben flanqueadas por obra de Joaquín Sorolla y Robert Delaunay. Román de Salvo, originario de San Francisco, instaló unos baleros en forma de tres juegos electrónicos en un pasaje de la céntrica avenida Revolución.
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