SABADO 14 DE OCTUBRE DE 2000

Ť Habrá expulsiones masivas de labriegos, alerta


Desatará el Plan Colombia una guerra armamentista: Indepaz

Ť La iniciativa sólo sirve a Estados Unidos, dice Camilo González

COLOMBIA-23Stella Calloni, enviada/II y última, Santafé de Bogotá, 13 de octubre Ť Para muchos analistas colombianos, el Plan Colombia o Plan Clinton, como también se le conoce aquí, desatará una guerra armamentista en la que no faltarían redes como las utilizadas durante la guerra en Centroamérica en décadas pasadas, cuando se canjeaban armas por drogas, situación que se vería favorecida por la autorización que han obtenido 350 contratos con agencias de guerra internacionales privadas, a lo que se añade el tema del reclutamiento de mercenarios.

"El Plan Colombia tiene muchísimos otros planes: escalará el armamentismo, ya que están entrando armas por todas las fronteras. No son sólo los helicópteros de la ley Clinton. Se producirá una verdadera fiebre de aparatos militares que se preparan para la confrontación", sostiene Camilo González, presidente de Indepaz.

Agrega que "eso significa no el fortalecimiento de unos y el debilitamiento de otros, sino el fortalecimiento militar de todos. Es lo que estamos planteando y lo que esperamos debatir en una reunión de nuestros movimientos y de las organizaciones no gubernamentales a la que están invitados grupos de 34 países, el gobierno, las guerrillas, todos los sectores y que se realizará en Costa Rica el próximo 17 de octubre".

Este plan "tiene la pretensión de ser una guerra humanitaria y al mismo tiempo con respeto a los derechos humanos y el derecho internacional, pero esto es imposible. Se proyectan recursos para 150 mil desplazados como resultado de fumigaciones y destrucción de cultivos. Pero la idea de economía alternativa en esas regiones es absolutamente falsa".

No hay ninguna alternativa en la Amazonia, dice, porque en un desplazamiento masivo no puede haber plan humanitario. Las contradicciones se crearán con los sectores afectados, ya que los cultivadores de hoja de coca y los que viven de ese circuito son fácilmente 2 millones de personas que se verán agredidas en su condición de existencia y se van a preguntar que si no siembran, ¿de qué vivirán? Esa gente no se va alinear con el gobierno y con Estados Unidos sino que se inclinará hacia la guerrilla, señala.

"Se producirán expulsiones masivas hacia Brasil Ecuador, Perú, lo que calentará una frontera que ya está ardiendo, y se incrementarán las acciones armadas sobre las ciudades. Se reproducirán los combates y la posibilidad de afectar a las infraestructuras como sucede en toda guerra que se escala".

Puntualiza que "si a eso se agrega el desempleo, la realidad de que 60 por ciento de los colombianos trabaja en el sector informal y que alrededor de 58 por ciento recibe menos de un salario mínimo, da una idea de la explosión que significa agregar más leña a esos temibles fuegos, que incrementarán en semanas el drama social. No hay conciliación posible entre guerra y humanidad".

La presencia paramilitar

Sobre la percepción de que el dinero estadunidense engrosaría la bolsa de los paramilitares, González afirma: "Quieran o no esto es así. El mapa del Plan Colombia comienza por el sur, en donde es más fuerte la guerrilla, y va a suceder que los paramilitares van a controlar una mayor porción de las áreas cultivadas. Se dice que controlan 30 por ciento. Carlos Castaño (el jefe paramilitar) ha dicho que tienen 30 mil hectá- reas en el área de influencia de la coca, que son la autoridad y cobran impuesto".

El desconocimiento que existe aquí sobre el Plan Colombia también es analizado por el presidente de Indepaz, quien recuerda que el proyecto surgió como un plan secreto.

"Su versión original fue redactada en inglés. No me escandalizo por el idioma inglés, sino por lo que refleja, que es un proyecto distante de la realidad colombiana y corresponde a la percepción de seguridad de Estados Unidos, y así lo dijo la secretaria de Estado Madeleine Albright, quien afirmó que se trataba en primer lugar de una necesidad de seguridad para su país y en segundo un plan para Colombia".

Y hay algo más: "El Plan Colombia entró en contradicción con el original trazado por el gobierno colombiano, aprobado por el Congreso y que era un proyecto de desarrollo social como complemento de las negociaciones. Ese proyecto pasó al cajón y sacaron la segunda versión, que es la que se impuso, y eso fue conocido en Colombia cuando se aprobó en Estados Unidos".

Indepaz y otros movimientos trabajan para dar contenido a la paz, aseguró, porque "desarrollo y convivencia democrática es entender la negociación como alternativa a la estrategia militar y supone restructuración del poder y, por lo tanto, importantes cambios económicos, sociales y políticos. No es una simple negociación. En este periodo ha venido ganando espacio la idea de la paz frente a la dinámica de la guerra".

Señala que se han realizado movilizaciones de millones de personas, "y a pesar de las encuestas coyunturales maquilladas que dicen que la gente ya no quiere conversaciones, hay una revolución ética de calidad y cantidad impresionante".

Asegura que en cualquier rincón de Colombia se encuentra a gente "reclamando por la paz, y hay algo muy importante: existe una verdadera conspiración de padres de familia para que sus hijos no queden prisioneros de la guerra. La gente se desplaza para evitarlo. Colombia es la violencia, dicen, pero en realidad estoy convencido de que hay un proceso de hastío, un instinto de sobrevivencia. Nadie quiere seguir viendo una masacre diaria".

Nadie quiere quedar prisionero en el círculo sin salida de una guerra que se perfila como un genocidio. Y también ese instinto se expresa en la creatividad, "en seguir creando en estas condiciones. Es algo que es necesario decir, porque es el otro rostro y es un rostro bello y nuestro, también colombiano", concluye González.

Rechazan rebeldes crear comisión

Afp, Dpa y Ap, Santafé de Bogotá, 13 de octubre Ť Las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC) rechazaron hoy una propuesta de crear una comisión internacional que solucione el diferendo en torno a un rebelde protegido en la zona de distensión, cuyo caso obstaculiza las negociaciones de paz.

Uno de los integrantes del equipo que negocia la paz con el gobierno del presidente Andrés Pastrana, Simón Trinidad, calificó la propuesta del alto comisionado gubernamental para la paz, Camilo Gómez, de "ridícula", ya que involucraría a extranjeros en asuntos internos.

Insistió además en que la única solución consiste en que el guerrillero Arnubio Ramos, que estaba preso y escapó en un helicóptero que aterrizó en la zona desmilitarizada, sea canjeado por uniformados que las FARC tienen en su poder.

La propuesta de Gómez era nombrar una comisión internacional de tres personas, de las cuales cada una de las partes designaría a una y la tercera se haría de común acuerdo, para buscar una solución al diferendo.

Por otra parte, las FARC ratificaron que "nada tienen que ver" en el secuestro de 10 extranjeros perpetrado el jueves en un campo petrolero de la Amazonia, en Ecuador.