SABADO 14 DE OCTUBRE DE 2000
Ť Ordena Arafat investigar el linchamiento de dos soldados israelíes
Moviliza Israel a sus reservistas por temor a escalada de atentados
Ť En estado de alerta, policías y soldados de Tel Aviv Ť Advierte Siria contra gobierno de emergencia
Ap, Dpa, Reuters y Afp, Jerusalén, 13 de octubre Ť Nuevos enfrentamientos se registraron hoy en los territorios autónomos en otro Día de la Ira declarado por los palestinos, mientras Israel, que espera la respuesta del derechista Likud a su oferta de integrarse a un gobierno de emergencia nacional, movilizó a sus reservistas ante una eventual escalada de ataques terroristas tras la liberación de decenas de combatientes islámicos y la explosión de violencia registrada durante la víspera.
Un día después de los ataques aéreos israelíes contra edificios de la Autoridad Nacional Palestina (ANP), como represalia al linchamiento de dos soldados en la ciudad cisjordana de Ramallah, el gobierno de Tel Aviv reforzó las medidas de seguridad y puso en estado de alerta al ejército y la policía.
Mientras, parecen desvanecerse las esperanzas de una pronta reunión entre los líderes palestino e israelí para negociar el fin a dos semanas de violencia que han dejado más de cien muertos, la mayoría palestinos.
El portavoz israelí, Nahmán Shai, declaró que su país no se ha comprometido aún a participar en una cumbre destinada a poner fin a la violencia, aunque, dijo, se está intentado reanudar el diálogo diplomático.
Nabil Abu Rudeina, consejero del presidente de la ANP, Yasser Arafat, también consideró que aún no hay condiciones para que se realice una cumbre, a pesar de los esfuerzos internacionales, pues consideró que antes Israel debe detener sus agresiones.
La policía israelí impuso fuertes medidas de seguridad en torno a la Explanada de la Mezquita, en Jerusalén, y prohibió el acceso a los hombres menores de 45 años para la oración del viernes, por temor a que nuevas manifestaciones culminaran en disturbios, como sucedió la semana anterior.
El estricto bloqueo sobre Cisjordania y la franja de Gaza redujo aún más el ingreso de fieles a Jerusalén, además de que extrictas medidas de seguridad fueron reforzadas en todo el territorio israelí, en especial en los lugares de mayor reunión pública.
Además, Israel llamó a la ANP a que encarcele "inmediatamente" a los detenidos del grupo islámico extremista Hamas y del Movimiento de Resistencia Islámico, que se oponen al proceso de paz y fueron liberados la víspera durante los bombardeos.
"Consideramos estas liberaciones como un desarrollo muy grave y la ANP tiene la responsabilidad de volver a encarcelarlos lo antes posible", dijo Shai; agregó que Arafat sí ordenó detenciones, pero la de los responsables del linchamiento de los dos soldados israelíes en Ramallah, y que ya se está realizando una amplia investigación.
El primer ministro de Israel, Ehud Barak, dijo a la televisión pública de su país que su gobierno "ejercerá su venganza" sobre los palestinos que participaron el jueves en el linchamiento, tras asegurar que dispone de videos y fotografías de lo que pasó.
Israel sostiene que policías palestinos participaron en los linchamientos de los soldados, que aparentemente llegaron por equivocación a Ramallah, mientras éstos ase- guran que no pudieron detener a una turba que se reunió frente a la comisaría donde los militares estaban detenidos.
Aunque hoy hubo menos incidentes violentos, un palestino murió en Hebrón, al ser alcanzado por disparos de israelíes contra un grupo de manifestantes que se dirigía hacia una colonia judía. Unos 30 palestinos resultaron lesionados.
Otros 20 palestinos fueron heridos en Belén, donde se registraron los más violentos choques entre palestinos y soldados israelíes, mientras que unos 50 resultaron heridos en Ramallah y Gaza, aseguraron informes de hospitales palestinos.
Por la noche, una carga explosiva estalló al paso de una patrulla israelí cerca del asentamiento judío de Netzarim, en Gaza, pero se desconoce si hay muertos; mientras, otro palestino murió en un enfrentamiento en Hebrón.
En el ámbito político, el derechista partido Likud estudiaba aún su respuesta a la invitación hecha por Barak para entrar a formar parte de un gobierno de emergencia.
El líder del Likud, Ariel Sharon, es señalado por los palestinos como responsable de haber detonado la violencia con su visita el 28 de septiembre, rodeado de soldados, a la Explanada de las Mezquitas.
El ex primer ministro de derecha Benjamin Netanyahu, por su parte, se pronunció a favor de una "política de mano de hierro" contra los palestinos.
Pero el gobierno de Siria advirtió hoy que la formación de un gobierno de emergencia nacional con la derecha sólo logrará "impulsar a los árabes a la unión y a la solidaridad a nivel oficial y popular".
Esta solidaridad llevó a miles de personas a manifestarse hoy nuevamente en los países árabes en apoyo a los palestinos. En varias ciudades de Líbano, unas 20 mil personas salieron a las calles para pedir la ruptura de relaciones con Israel y la expulsión de diplomáticos estadunidenses.
Líbano, sin embargo, prohibió a los refugiados palestinos aproximarse a la frontera con Israel, que envió sus aviones simulando ataques sobre la región fronteriza, tras haber amenazado la víspera con disparar contra cualquier manifestante agresivo.
Por primera vez, Egipto permitió que miles de manifestantes marcharan por El Cairo. Igualmente, hubo expresiones de solidaridad en Jordania, Siria, y Yakarta.
Las tensiones en Levante se trasladaron a Estados Unidos, cuando miles de personas participaron en manifestaciones frente a la Casa Blanca, una pro israelí y otra pro palestina, sin que se registraran disturbios. Esta última contó con la participación de ju-díos de la secta minoritaria Neturei Karta, que desconocen al Estado de Israel.
Lo mismo sucedió en Nueva York, donde los palestinos preparan manifestaciones, en tanto que en Chicago se registró una protesta de 3 mil judíos estadunidenses.
Tanto Estados Unidos como Francia y Argentina, reforzaron las medidas de seguridad ante el aumento de la violencia en el Medio Oriente. En Francia, las medidas fueron tomadas luego de que cinco sinagogas fueron incendiadas el jueves y otras más fueron atacadas por vándalos.
La policía francesa informó que desde el comienzo de la crisis entre palestinos e israelíes ocurrieron unos 70 incidentes antisemitas, desde agresiones verbales hasta incendios premeditados.
En Argentina, el gobierno dispuso "medidas de seguridad extraordinarias" ante la posibilidad de actos terroristas en el país, donde un atentado contra una mutual judía dejó en 1994 casi un centenar de muertos.