VIERNES 13 DE OCTUBRE DE 2000

 
¿LA FIESTA EN PAZ?
 

Una tienta

Leonardo Páez Ť Tienta es la labor de examinar, a campo abierto o en la plaza de la ganadería, la bravura, el estilo o forma de embestir y la fuerza de las reses de lidia, principalmente vacas entre dos y tres años de edad, a efecto de seleccionar las que por sus cualidades resulten más aptas para la reproducción y preservación de la bravura.

O como en épocas menos enrarecidas sostenían bastantes criadores: "Que las becerras, antes de ser madres, demuestren que merecen serlo". Criterio que entre los humanos desafortunadamente nunca se ha aplicado, con las consecuencias por todos padecidas, empezando por los antiabortistas.

Hace unos días don Juan Flores, propietario de la ganadería de La Guadalupana ?¿por qué la quejumbrosa Asociación Nacional de Criadores de Toros de Lidia no organiza periódicamente tientas de capacitación para la prensa especializada??, tentó cuatro vacas y dos novillos en la plaza de su finca de Tepozotlán.

Ello no sólo con el propósito de probar la bravura, estilo y fuerza de sus animales, sino también de dar oportunidad de entrenamiento a los novilleros Leopoldo Casasola y José Serrano, así como al matador español Martín Pareja Obregón, habida cuenta de que el tentadero es, en la intimidad del campo bravo, lo más aproximado a una plaza de toros, donde igualmente son cubiertos los tres tercios, y preparación óptima para quien está en vísperas de actuar en algún ruedo.

Hay plazas de tienta con solera, las hay nuevas, chicas, grandes, lujosas o sencillas, y hay las que a alguna de las características citadas aúnan otra: paisaje.

El tentadero de esta sucursal mexiquense de La Guadalupana ?la matriz se ubica en el municipio de Villa de Coss, Zacatecas? posee un horizonte de magia, compuesto por las apacibles aguas de la presa de La Concha, rodeada de encinos y eucaliptos, verdes laderas con potreros, reses pastando... donde uno quisiera quedarse a contemplar para siempre.

La primera becerra, pronta, fija y clara, empujó en dos varas y Pareja Obregón ?alternativa en Sevilla el 31.03.91 de manos de Curro Romero y de testigo Espartaco? exhibió sobriedad y temple, familiarizándose apenas con la lenta embestida del ganado bravo de México. Luego Serrano conseguiría varias tandas con dimensión. La segunda, floja para el caballo, resultó particularmente dócil en la muleta, y Casasola se hartó de torearla por ambos lados. Las otras dos vacas resultaron mansas y el ganadero ordenó que fuesen estoqueadas.

Al primer novillo, de unos 350 kilos, el diestro español lo toreó con sabor a la verónica. Tras pelear en una vara permitió corroborar que el temple ?moderar la velocidad del astado? es el rasgo distintivo de Pareja Obregón, quien realizó una faena de calidad por ambos lados, dejando una entera en todo lo alto.

Con el otro novillo, más corto de embestida y al que le faltó un punto de trasmisión ?de emoción en su comportamiento?, Casasola lo toreó con aseo, en tandas breves, para dejar una estocada fulminante.

Lo dicho, mejor harían los ganaderos mexicanos en iniciar tientas de capacitación entre la prensa especializada. Aunque como observó alguien: ¿Y quién la capacita en ideología taurina esclarecida y en ética periodística?