JUEVES 12 DE OCTUBRE DE 2000

Ť Acción Nacional se retiraría de la mesa de negociación, indica el partido

Jaloneos del PAN y PRD en Chiapas por reformas al CEE

Angeles Mariscal, corresponsal, Tuxtla Gutiérrez, Chis., 11 de octubre Ť Los dos principales partidos que llevaron a la gubernatura a Pablo Salazar Mendiguchía, PAN y PRD, entraron hoy en un serio conflicto luego de que el segundo aprobó, junto con el PRI, una reforma de un artículo del Código Electoral del Estado que les permitirá efectuar otras reformas tendientes al cambio de consejeros, magistrados y la anulación de posibles alianzas en los comicios para elegir presidentes municipales y diputados locales.

Luego de criticar la postura del PRD, el PAN anunció su retiro de las mesas de negociación de la reforma constitucional en materia electoral. La coordinadora parlamentaria del órgano político sostuvo que a partir de este momento las posibles reformas que se establezcan serán "por imposición, albazo o contubernio bipartidista".

Expresamos, dijeron, que se pretende una contrarreforma político-electoral apartada del sentir e intereses de la sociedad chiapaneca (...) "sabemos que este repentino proceder legislativo bipartidista es acomodaticio, convenenciero, antidemocrático y excluyente", sostuvieron los diputados panistas.

Advirtieron también que la pretendida contrarreforma busca tomar revancha contra consejeros ciudadanos, magistrados electorales, por haber avalado el triunfo de Salazar Mendiguchía en los comicios del pasado 20 de agosto.

Y es que con la iniciativa de decreto que adiciona un artículo transitorio al Código Electoral del Estado atrasa un mes el inicio del proceso electoral del 2001, que debería empezar la primera quincena de enero, para poder dar tiempo a establecer diversas reformas permanentes a dicho Código, y que las mismas entren en vigencia en el proceso del año entrante.

Las reformas propuestas por el PRI son cambiar la figura de consejero ciudadano por consejero electoral, y con ello renovar completamente dicho órgano; en los mismos términos, cambiar la estructura del Tribunal Estatal Electoral.

Establece, entre otros puntos, que bajo pena de perder el registro, cada uno de los partidos que contenderán por las presidencias municipales y diputaciones locales deberán presentar por separado a sus candidatos, sin ningún tipo de alianza.