JUEVES 12 DE OCTUBRE DE 2000
Ť Impugnan contratos
Confían empresarios en que con Fox cambiará la LFT
David Zúñiga Ť Durante el gobierno de Vicente Fox sí se modificará la Ley Federal del Trabajo para eliminar "tabúes absurdos" como las llamadas conquistas laborales y las restricciones al trabajo parcial y por horas, así como cambiar los contratos ley, que se han convertido en un obstáculo para la productividad de diversas industrias, afirmó Jorge A. de Regil, ex presidente de la Asociación Nacional de Abogados de Empresas (Anade) y coordinador del seminario La visión tripartita del derecho laboral.
De Regil Gómez-Muriel comentó que Carlos Abascal Carranza y Francisco Kuri, integrantes del equipo de transición, se han reunido con dirigentes de la Confederación de Cámaras Industriales (Concamin), de la Cámara Nacional de la Industria de la Transformación (Canacintra), de la Cámara Nacional de la Industria Azucarera y Alcoholera y de la Cámara Nacional de la Industria Hulera, entre otras, para escuchar propuestas para la reforma laboral.
Entre los temas que han tratado destacan los contratos ley que rigen en las industrias hulera, textil y azucarera y "sus lamentables resultados" en el empleo y en la productividad de estas empresas. "Recientemente cerró Uniroyal, lo que dejó sin empleo a 850 trabajadores; en la industria azucarera muchos ingenios han cerrado o han dejado de operar y la industria textil ha ido en decremento".
La Anade, explicó, ya trabaja con la industria hulera y con los sindicatos en la elaboración de un acuerdo marco de productividad que si bien no pretende cambiar por ahora el contrato ley, sí busca recuperar la productividad. "Cuando Fox era candidato yo le expuse personalmente la problemática del contrato ley de la industria hulera y sin duda algo se hará", dijo.
Flexibilidad en la contratación
Refirió que se deben revisar los conceptos de contratación individual y hacer más ágil y flexible la colectiva, permitir ésta sea más acorde con la realidad económica y efectuar cambios en las causales de rescisión.
Los mecanismos actuales para la rescisión de contrato, derivados de "la muy infortunada" reforma de 1980 que prevé el aviso por escrito sólo ha generado "abusos y un sistema de extorsión y búsqueda de dinero" en caso de despido.
Según De Regil, las reformas laborales buscan abrir oportunidades de empleo a través de las jornadas parciales y el pago por horas. "Mientras más se obstinen los opositores en que la jornada de trabajo no sea menor a 48 horas, le negarán oportunidades de trabajo a las mujeres, a los jubilados y a los estudiantes e impedirán el crecimiento de las empresas que necesitan personal en jornadas no continuas", como restaurantes y hoteles, que tienen más flujo de clientes en determinadas horas del día.
El dirigente argumenta que este sistema es una alternativa para combatir la economía informal y permitirá reducir el precio de bienes y servicios, incluidos los pasajes de avión.
"Las rigideces laborales tienden a hacer más escaso y caro el trabajo y, por consiguiente, los productos y servicios que éste genera". En el resto del mundo, afirma De Regil, operan este tipo de esquemas; en México no porque es "un tabú, como el ejido y las conquistas laborales". La protección a las mujeres "es un tabú absurdo: mientras más se les protege menos pueden acceder al empleo. Ya estuvo bien de posiciones demagógicas", expresó.