MIERCOLES 11 DE OCTUBRE DE 2000
Ť Es investigado por la PGR por delitos contra la salud
En breve, sentencia de solicitud de amparo de González Quirarte
Ť Juicio al hermano del cerebro financiero del cártel de Juárez
Gustavo Castillo García Ť El juzgado sexto de distrito en materia de amparo elabora ya un dictamen de sentencia para la solicitud de protección de la justicia federal que interpuso Enrique González Quirarte, hermano de Eduardo, principal "cerebro financiero" del cártel de Juárez en la zona de Jalisco.
El amparo solicitado por Enrique González Quirarte es contra la orden de aprehensión que se le giró por delitos contra la salud dentro del llamado maxiproceso (causa penal que entabló la Procuraduría General de la República contra más de 100 integrantes de la organización de Amado Carrillo Fuentes).
Como lo informó La Jornada en septiembre pasado, Enrique González Quirarte, presunto integrante del grupo paramilitar denominado Los Arbolitos -dedicado a combatir a narcotraficantes de organizaciones distintas a la de Carrillo Fuentes-, solicitó a la jueza María Elena Leguízamo Ferrer la protección de la justicia federal para no ser arrestado y sujeto a proceso penal.
Hasta el momento, en el juzgado sexto ya se han realizado dos audiencias, en ellas se recibieron y desahogaron las probanzas y argumentos, tanto del demandante de amparo como de la PGR.
El juicio de garantías designado con el número de expediente 681/2000 está a punto de finalizar, pues ya se estudian las pruebas y argumentos; no obstante su resolución tomará todavía unas semanas más ya que las pruebas que posee la PGR se presentaron a través del juzgado tercero de distrito en materia penal, quien entregó copia de los 60 tomos que componen las indagatorias del llamado maxiproceso.
De acuerdo con fuentes judiciales consultadas, diversos testigos de cargo que ha utilizado la PGR han señalado que Enrique González Quirarte, junto con su hermano Eduardo, participó en diversos operativos en contra de la organización de los hermanos Benjamín y Ramón Arellano Félix.
Estas acciones se realizaron a través de efectivos de la Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena) adscritos a la quinta Región Militar, cuando el comandante en jefe de esa adcripción castrense era el general Jesús Gutiérrez Rebollo, condenado a más de 50 años de cárcel por colaborar con la organización de Carrillo Fuentes.
Los testimonios refieren que esas acciones tenían como objetivo principal apoyar a la organización del Señor de los cielos y "despejarle el camino a sus cargamentos de doga procedentes de Colombia".
Presuntamente, Enrique y Eduardo González Quirarte, así como el padre de ambos, también de nombre Enrique, se encargaron de establecer una estructura financiera de lavado de dinero en la zona de Jalisco, Sinaloa, Nayarit y Colima.
Además, Enrique González Rosas, padre de Eduardo y Enrique, fungió como arrendatario de las tierras de la Base Aérea Militar de Zapopan, "las cuales sembraba" de maíz. El arrendatario, según los testimonios contenidos en el maxiproceso, era el comandante de la zona en turno.