Ť Convoca a diputados a revisar conjuntamente las políticas de desarrollo urbano
Revela Buenrostro sabotaje a la línea B del Metro, en 1999
Ť Antes de su inauguración se provocaron cortocircuitos Ť Se buscaba impedir operaciones, señala
Raúl Llanos y Gabriela Romero Ť La ciudad de México rebasó, por mucho, el límite racional de crecimiento, y ojalá no sea con una catástrofe como los capitalinos y las autoridades ordenen el desarrollo, advirtió ayer el secretario de Obras del gobierno de esta ciudad, César Buenrostro, quien también reveló, a casi un año de haber ocurrido, un "franco sabotaje" a la línea B del Metro.
El funcionario público acudió ayer a la Asamblea Legislativa a exponer los avances logrados en su gestión, y durante su comparecencia hubo, como en botica, de todo un poco: aplausos de sus colaboradores, rechiflas y plantones de demandantes de vivienda, abrazos de diputados, reclamos en el pleno, e incluso un ataúd metálico, que flanqueado por cuatro cirios colocó el Frente de Organizaciones Sociales (FOS) al pie de las escalinatas del recinto de Donceles y Allende con la leyenda: "Aquí yace el Gobierno del Distrito Federal".
Buenrostro arribó a la ALDF antes del mediodía, y ahí ya lo esperaban grupos de taxistas, invidentes o demandantes de vivienda, como el FOS y el Frente del Pueblo, que exigían la dotación de servicios y el cumplimiento de promesas, en especial a las 280 familias de Ticomán 1650, quienes llevan varios meses sin servicios.
Precisamente, cuando los partidos fijaban su postura en el pleno, Lucas Alvarez, dirigente del FP, llegó hasta la curul que ocupaba el funcionario y le increpó la desatención a esas familias. Los diputados Gilberto Ensástiga y Adolfo López Villanueva debieron intervenir para evitar que personal de resguardo sacara por la fuerza al líder vecinal.
Ya en tribuna, los diputados de PRI, PAN y PVEM cuestionaron al secretario de Obras su gestión, los subejercicios presupuestales, la ausencia de "obras importantes", de nueva cuenta el gasto excesivo en difusión y, prácticamente, una visión de que en esta ciudad no se hizo nada en tres años en esta materia. Con sus matices, PT y PDS reconocieron los logros, pero también hicieron énfasis en que falta mucho por hacer.
En su oportunidad, Horacio Martínez Meza, del PRD, replicó a la oposición: "después de dos años y 10 meses volvemos a oír que en esta ciudad no ha pasado nada, que las condiciones de sus habitantes sigue igual o peor que cuando gobernaba el PRI", y les machacó el que no quieran darse cuenta de que hay mayores obras y mejores servicios, que los llevaron a ratificar el triunfo del PRD el 2 de julio. Aunque también insistió: el "revanchismo" del gobierno federal al negar el techo de endeudamiento al DF, y a pesar de que siempre se le apostó al fracaso de este gobierno --dijo--, "la ciudad no se paralizó y sigue en marcha".
Existe desinformación
A lo largo de su extenso documento, César Buenrostro se refirió a las acciones realizadas durante su gestión tanto en lo referente a agua potable, drenaje, limpia, vialidades como equipamiento urbano y residuos sólidos. Luego, para cerrar su intervención y en respuesta a los posicionamientos, afirmó que "existe desinformación" por parte de los diputados en el tema, aunque manifestó su disposición a aclarar todas las situaciones. También aprovechó para reclamar el recorte presupuestal federal al DF y los "cuadros completos de corrupción" que encontraron al llegar a la administración local.
Fue en la sesión de preguntas cuando el secretario de Obras respondió directamente al pecedista Raúl Nava, y dio a conocer un caso que no se supo públicamente en 1999 "y que ahora ya vale decirlo": que días antes de inaugurar la primera etapa de la línea B del Metro "hubo franco sabotaje", pues "a lo largo del cableado de las líneas se colocaron grapas y clavos que provocaron cortocircuitos".
Según el funcionario, con eso se buscaba impedir el inicio de operaciones. De ello, dijo, conoció la Procuraduría de Justicia capitalina, y ante los diputados precisó: "hay la presunción de dónde venía". Pero en entrevista posterior dijo que no se inició averiguación previa y de los posibles responsables ya no quiso hablar.
Fernando Espino Arévalo, diputado y líder de los trabajadores del Metro, preguntó con respecto a los inconvenientes para operar con los trenes necesarios la línea B, que irá de Villa de Aragón a Ciudad Azteca. Al respecto, Buenrostro precisó que no habrá ningún problema, pues se cuenta con el parque vehicular suficiente para ello y funcionará en fechas próximas.
Más adelante, comentó la intervención de la perredista Yolanda Torres, y expresó que el DF está más allá del límite de crecimiento, se ha desbordado por todos lados hasta llegar a una situación irracional, por lo que se manifestó por unir esfuerzos para ordenar el crecimiento y por ende la calidad de vida de sus habitantes.
Por último, y luego de comprometerse a reparar la luminaria de una calle donde vive una diputada panista, César Buenrostro convocó a los integrantes de la Asamblea Legislativa a revisar a fondo y de manera conjunta las políticas de desarrollo urbano para garantizar la viabilidad de la ciudad. Luego de esto el funcionario debió salir por la puerta lateral de la ALDF para evitar encontrarse con los manifestantes, quienes en cuestión de minutos levantaron sendas casuchas de lámina para permanecer ahí "hasta que nos resuelvan nuestra petición".