MIERCOLES 11 DE OCTUBRE DE 2000

Ť Anteproyecto panista

Podrían particulares distribuir y cobrar la energía eléctrica

Juan Manuel Venegas Ť El anteproyecto de la iniciativa foxista para la apertura del sector generador de energía eléctrica a la iniciativa privada (que conoce ya la fracción panista en la Cámara de Diputados) prevé el "paso gradual" de estas inversiones a "toda el área de consumo", lo que significa que al corto y mediano plazos las compañías privadas, nacionales y extranjeras, que decidan participar en la industria, se harán cargo de la "distribución y cobro" del servicio.

Por lo que hace a la petroquímica secundaria (cuya apertura también se pretende al ciento por ciento), se promueve entre la iniciativa privada aprovechar 49 por ciento de participación que la legislación mexicana permite. Esto es lo que se ofreció, en lo inmediato, a los inversionistas europeos, aunque con el compromiso de que se sacará adelante la reforma para la apertura total.

La iniciativa para las reformas del sector energético del país es, para el presidente electo Vicente Fox Quesada, asunto "prioritario" desde el arranque de su gestión. El anteproyecto indica al respecto que el Estado carece de los recursos que "se requieren urgentemente para la modernización de estos sectores", a fin de hacerlos "competitivos" y, en el caso de la electricidad, "para atender la creciente demanda interna".

Medida indispensable

Advierte que la apertura de estos sectores es "indispensable" para garantizar el crecimiento de la economía a 7 por ciento anual; además, dejando a la iniciativa privada la inversión para reactivarlos, el Estado mexicano estará "en mejores condiciones de orientar su gasto hacia otros sectores prioritarios en el área social, como son el combate a la pobreza, educación y salud".

Se precisa que en el caso de la generación de energía eléctrica, la idea es que los estados e incluso, los municipios, se involucren y participen -como ya lo han venido haciendo- en el proceso de apertura. "Respetando su autonomía y dependiendo de las necesidades de cada entidad o región se pueden establecer los proyectos de generación de energía con inversión privada. Con lo que estarían también en posibilidades de eficientar su gasto", se añade.

Así pues, las tres áreas de gobierno -federal, estatal y municipal- estarán en "condiciones muy ventajosas (con respecto a la situación actual) de aprovechar los fondos fiscales para atender otras tareas de gobierno", remarcando, sobre todo, los programas sociales y de combate a la pobreza.

La industria eléctrica, en tanto, dispondrá de los recursos para su crecimiento y modernización; de acuerdo con los estándares internacionales será una industria "competitiva por su productividad", y se garantizará la "viabilidad, calidad, certidumbre y capacidad del servicio al largo plazo".

Para esto, se propone que la apertura a la inversión privada contemple el "paso gradual hacia todo lo que represente el sector de consumo del energía eléctrica; es decir, que los inversionistas se hagan cargo de la distribución y cobro del servicio".

Respecto a la petroquímica secundaria (que el próximo gobierno prevé abrir al ciento por ciento a la iniciativa privada),se precisó que independientemente del rumbo que tome la iniciativa en el Congreso, una vez que se presente para su discusión y análisis, Fox Quesada seguirá promoviendo la oportunidad para que el capital privado participe hasta con 49 por ciento.

"No hay ningún impedimento legal" para impulsar la inversión privada en la petroquímica secundaria, en el marco que estableció el propio Congreso.