LUNES 9 DE OCTUBRE DE 2000

Ť Denuncian eventuales ser objeto de represalias, amenazas y golpeteo


Bloquean funcionarios del GDF y grupos afines al PRI formar sindicato en la Ceda

Ť Acusan los trabajadores, entre plomeros, choferes y peones, recibir un trato discriminatorio

Susana González G. Ť Entre represalias, amenazas y "golpeteos", un grupo de trabajadores de la Central de Abastos (Ceda) ha intentado crear desde hace ocho años un sindicato independiente, al margen de las organizaciones gremiales afines a la CTM y la CROC que dominan ahí, para defender los derechos laborales de por lo menos 700 personas, entre plomeros, choferes, peones de limpieza o ayudantes en general, contratadas de manera eventual.

Los pioneros de esta idea manifestaron que además de enfrentarse al dominio ejercido por las organizaciones afines al PRI, "que siempre han asegurado contar con el apoyo de la mayoría de los trabajadores de la Ceda, sin que esto sea verdad", han padecido en los últimos años el bloqueo por parte de algunos funcionarios del gobierno capitalino.

Rafael Estrada, quien afirmó haber sido despedido hasta en tres ocasiones de la Ceda por impulsar la creación de este sindicato, señaló a Manuel Fuentes Muñoz, ex director general de Trabajo y Previsión Social y actual consejero jurídico del gobierno capitalino, como uno de los responsables de este "golpeteo".

Tanto Estrada como sus compañeros, refirieron que conocieron a Fuentes Muñiz en la Asociación Nacional de Abogados Democráticos (ANAD) para que los asesorara en la creación del sindicato. Sostuvieron que por él aceptaron en 1997 integrarse al Sindicato de Trabajadores y Empleados de Mantenimiento de los Conjuntos Urbanos y Condominios, Similares y Conexos del Distrito Federal, titular de las relaciones colectivas en el Fideicomiso del Ceda y cuya secretaria general era María Gloria Calderón, para poder obtener un contrato colectivo, que entró en vigencia en octubre de ese mismo año.

Sin embargo, como consta en una carta dirigida en junio de 1998 al entonces jefe de Gobierno del Distrito Federal, Cuauhtémoc Cárdenas, los trabajadores de limpia, transporte, operación y mantenimiento denunciaron que las autoridades de la Ceda ignoraban el contrato al regatearles el pago de sus prestaciones, vacaciones, ayuda de despensa, notificación por bono insalubre, etcétera.

Ante ello, los trabajadores eventuales (algunos de los cuales cumplen más de diez años de antigüedad) determinaron crear otro sindicato tras considerar que sólo se obtuvo un contrato de protección administrado por Fuentes Muñiz. "Más que favorecernos nos perjudicó ya que dicho abogado conjuntamente con la COR pactaron y firmaron un contrato colectivo de protección y bloqueó todo trámite en la Junta Local de Conciliación y Arbitraje sobre nuestro sindicato independiente".

Con todo, los trabajadores reconocieron que el contrato colectivo, aún de la forma en que se obtuvo, representó un avance porque por primera vez los trabajadores eventuales gozaron de algunas prestaciones que tienen quienes pertenecen al Sindicato Unico de Trabajadores del Gobierno del Distrito Federal (como el pago de despensas o los días de descanso obligatorio con goce de sueldo), pero advirtieron que no resulta suficiente por las condiciones de trabajo que existen en la Central de Abastos.

Los trabajadores eventuales, aseveraron, reciben un "trato discriminatorio" con respecto a los basificados (a los cuales triplican en número), no se les respetan los derechos laborales y comenten diversas arbitrariedades en su contra como no respetarles los horarios de trabajo, carecer de garantías de seguridad y salud para el desempeño de sus labores o están expuestos a ser despedidos sin justificación alguna.

Mencionaron como ejemplo que tan sólo una semanas después de que obtuvieron su contrato colectivo, trece de sus compañeros fueron despedidos sin explicación alguna, y quienes permanecieron y simpatizan con crear una organización laboral independiente no dejan de ser hostigados y amenazados.