LUNES 9 DE OCTUBRE DE 2000

Ť De Estados Unidos, el monopolio de las drogas

El narcotráfico impulsa el comercio mundial: FARC

Ť Los Pozos, sede de las pláticas, zona de riesgo para la guerrilla

Stella Calloni, enviada/ II, Villa Nueva Colombia, Los Pozos, 8 de octubre Ť Mientras hablamos con el comandante Simón Trinidad, en la sede de las negociaciones de paz, los guerrilleros, mujeres y hombres, circulan alrededor en una intensa actividad, y otros analizan la importancia política de las Audiencias Públicas, mediante las cuales convocan a diversos sectores de la población para exponer los problemas del país, lo que a ellos les ha permitido "enriquecer sus programas" políticos.

Todos saben que en estos momentos Los Pozos es el lugar más expuesto para los guerrilleros de las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC), porque de decidirse repentinamente un cambio en las condiciones de la negociación, podrían convertirse en un blanco abierto.

Lo saben, pero también confían en sus propias fuerzas. Las FARC tienen más de 60 frentes en todo el territorio nacional, y no 20, como sostienen algunos medios bogotanos. La derecha colombiana y otros sectores, especialmente los paramilitares y sus tutores políticos, presionan duramente al gobierno para acabar con la zona de despeje, pero sin ésta sería imposible negociar, porque considerando las continuas matanzas, todo tránsito guerrillero hacia una zona de negociación bajo control del ejército o los paramilitares, significaría un suicidio.

Trinidad continúa analizando el tema del narcotráfico. "Todo el mundo sabe que cada vez más el narcotráfico impulsa el comercio, porque el comercio mundial se beneficia enormemente de las inversiones por medio de las cuales se lava dinero en cantidades millonarias. Entonces uno se pregunta si matando campesinos que siembran la hoja de coca se acabaría el narcotráfico. Hace treinta años no se sembraba nada en Colombia, sólo en zonas indígenas donde la hoja de coca tiene para ellos propiedades medicinales y otras. No es droga. Es más, el primer cultivo que se dio fue de mariguana, y quienes le enseñaron a los campesinos fueron los estadunidense, para consumirla ellos.

"Fueron traficantes norteamericanos quienes en los primeros años les enseñaron y ellos mismos venían a llevarla en sus aviones. Eso hasta que aparecieron las mafias exportadoras. El negocio de la mariguana se acaba cuando ellos, los norteamericanos, comienzan a sembrarla allá y controlan toda la cadena. Se siembra más mariguana que maíz en Estados Unidos, mediante cultivos hidropónicos; se siembra en los jardines, en los armarios. Por las utilidades que produce, toda la cadena, la producción y demás, es monopolio norteamericano", expone el comandante Simón Trinidad.

Agrega: "Y es entonces cuando nace para Colombia la siembra de coca. Hasta entonces Colombia, por su ubicación geográfica, era lugar de tránsito desde Bolivia y Perú. Llegaban aviones aquí a cargar combustible en general, pero cuando se reprime a los indígenas y campesinos en esos países, los narcotraficantes inducen a sembrar coca en Colombia, y esto se puede hacer debido al terrible abandono en que viven los campesinos, sin tierras, sin insumos, sin créditos, abandonados por el Estado. O también campesinos con tierra pero que no tienen créditos ni infraestructura alguna que les permita vender con facilidad sus productos.

"A la coca se la van a comprar al mismo lugar de cultivos, y eso es importante a la hora de pensar en las sustituciones, porque, Ƒqué hace el campesino para vender sus productos si no tiene caminos ni salidas ni nadie va a ir a comprarle a su zona? Esto que parece tan simple es el fondo de la dramática situación del campesino, que ahora va a ser perseguido y matado. Se calculan unos 50 mil muertos y millones de afectados. Esos campesinos se trasladaron en masa a las selvas en departamentos muy lejanos como el Amazonia, el Putumayo, Caquetá y otros, adonde llegan los compradores. Entonces el estímulo para sembrar la coca es que hay una demanda mundial y narcotraficantes que les garantizan la compra de la producción de coca. Posteriormente los narcotraficantes ya deciden procesar la hoja base y ahí se convierte Colombia en uno de los principales productores de coca y su transformación en cocaína.

Para este comandante de las FARC, "son los narcotraficantes los que se enriquecen y mueven su dinero en el gran mundo de los negocios. Los campesinos -como todos pueden ver- siguen siendo pobres, sin luz, sin agua, sin salud, sin educación, viven en la extrema pobreza y es la única forma de sobrevivencia que tienen. Pero también consumen una serie de productos que les llegan muy caros y que hay que llevar a la selva, y allí se agrega la prostitución, el alcohol, la descomposición familiar.

"Ese es el círculo dramático de la vida de los campesinos obligados por las circunstancias a sembrar la hoja de coca. Y es sobre ese campesino, no sobre los responsables, sobre los que se quiere actuar. Hay narcotraficantes colombianos, por supuesto, que procesan y exportan la cocaína, pero ellos no viven en las selvas sino en Bogotá, en Cali, en Barranquilla, en Ibagué, donde sea que se viva muy bien con grandes dineros. Y todos saben donde están y los conocen y saben que los dineros que reciben en este negocio los invierten y depositan en la banca y entra al circuito financiero. Es una cadena perversa", concluye.