LUNES 9 DE OCTUBRE DE 2000
Ť Cerca de la ruptura, la coalición gobernante
Arrecia la crisis política argentina; renuncia el presidente del Senado
Dpa, Ap, Reuters y Afp, Buenos Aires, 10 de octubre Ť El presidente provisional del Senado argentino, el oficialista José Genoud, renunció hoy al cargo enmedio de la crisis política que afecta a la Alianza gobernante tras la dimisión, el viernes, del vicepresidente Carlos Chacho Alvarez.
La renuncia de Genoud, hasta hoy el primero en la línea de sucesión presidencial, ocurrió unas horas después que el mandatario, Fernando de la Rúa, afirmó que estaba decidido a promover cambios en la Cámara alta, afectada desde hace dos meses tras denuncias de que legisladores recibieron sobornos para aprobar la reforma a la ley laboral, en abril pasado.
En la mañana, el ministro del Interior, Federico Storani, afirmó que la "gobernabilidad está garantizada", al igual que la unidad de la Alianza gobernante, integrada por el Frente País Solidario, de Alvarez, y la Unión Cívica Radical, de De la Rúa, aunque analistas estimaron que la coalición está al borde de la ruptura.
Genoud, cuya renuncia debe ser aprobada por los senadores, indicó que decidió abandonar el cargo tras asegurarse que su sucesor será un oficialista y no un opositor peronista, y precisó que no lo hizo antes, ya que podría haberse interpretado como que había recibido sobornos para aprobar la polémica reforma laboral. Trascendió que De la Rúa designará al nuevo presidente del Senado, cargo que también ejercía Alvarez, mientras que la oposición aseguró que aceptará a un legislador oficialista. Alvarez renunció el viernes un día después que el presidente realizó, sin consultarlo, una serie de cambios en el gabinete, en el que ratificó a dos funcionarios involucrados en el pago de coimas.
En declaraciones a los diarios Clarín y La Nación, De la Rúa reconoció que debió "haber hablado más claramente" con Alvarez sobre los cambios, y reiteró que "no hay crisis en el gobierno, el presidente está en funciones, las instituciones funcionan plenamente. Hay garantía de estabilidad".
Alvarez y De la Rúa acordaron vía telefónica reunirse en los próximos días, y el ex vicepresidente comentó que también se entrevistará con el titular de la UCR, el ex presidente Raúl Alfonsín, y otros miembros del gobierno. Agregó que insistirá en las investigaciones sobre el escándalo en el Senado, e impulsará "una movilización de la gente para que los senadores (involucrados) renuncien".
La ministra de Desarrollo Social, Graciela Fernández Meijide, advirtió que se necesitan "gestos muy fuertes" para superar la crisis política, y justificó la dimisión de Alvarez porque, dijo, "fue por un tema de convicciones".
Una encuesta del diario Clarín indicó que tras la renuncia de Alvarez 45.7 de los argentinos considera mala la imagen del gobierno; 69.2 se declaró contra los cambios en el gabinete, y la imagen del presidente es buena sólo para 23 por ciento de los consultados.