LUNES 2 DE OCTUBRE DE 2000
Ť Es parte de la cultura de la muerte, considera
Rechaza Norberto Rivera uso de la píldora abortiva RU-486
Ť Apoya la arquidiócesis el recurso contra la ley Robles
José Antonio Román Ť En tanto que el cardenal Norberto Rivera rechazó el uso de la píldora abortiva RU-486 por considerarla parte de la "cultura de la muerte" que impera en la sociedad, la arquidiócesis primada de México respaldó el recurso de inconstitucionalidad presentado hace unos días por el PAN y el PVEM ante la Suprema Corte de Justicia de la Nación en contra de la llamada ley Robles.
Respecto al temor de que este fármaco -de nombre genérico Mifepristona-, recientemente aprobado en el mercado de Estados Unidos, se pudiera expedir también en territorio nacional, el prelado aclaró que si bien a la Iglesia no le corresponde legislar, su papel será siempre rechazar todo aquello que atente contra la vida y promover todos los derechos humanos.
En breve entrevista, luego de su acostumbrada misa dominical en la catedral, comparó el uso de dicha píldora con las acciones de los alemanes en contra del pueblo judío. "En el tiempo de Hitler también se decía que eran métodos científicos y la Iglesia se opuso a la muerte".
Rivera Carrera indicó que ante todo la sociedad mexicana debe pronunciarse por defender la vida desde su concepción y fallecimiento natural, ya que es un don otorgado por Dios y sólo él es quien decide quitar la vida y en qué momento.
Por otra parte, el último número del semanario Nuevo Criterio, editado por la arquidiócesis primada de México, señala que tras el recurso de inconstitucionalidad, ahora le corresponderá a la máxima instancia de justicia en el país analizar las reformas al Código Penal del DF, las cuales amplían las causales del aborto.
La iniciativa de la jefa de Gobierno capitalino, aprobada por la Asamblea Legislativa del DF y puesta en vigor, otorga facultades al Ministerio Público que corresponden a la autoridad judicial, contraviniendo así el artículo 49 de la Constitución. Con esto, señala el semanario, se incumple el mandato que reciben las autoridades de ejercer sin discriminación la defensa de los derechos humanos de los niños desde la concepción.
Más adelante, Nuevo Criterio afirma que con la interrupción del embarazo se violan las garantías de los infantes, contenidos en el documento de la Convención sobre los Derechos del Niño, firmado contradictoriamente por nuestro país.
De igual forma, el editorial de Desde la Fe, otro semanario de la arquidiócesis, se refiere de nueva cuenta a la llamada Marcha por la Vida, realizada el pasado domingo 24 de septiembre, como una manifestación de rechazo a las reformas legales promovidas por la jefa de Gobierno capitalino. Dijo que la marcha "fue un clamor popular contra tanta injusticia y a la vez una celebración por los derechos humanos".
Y aunque no fue convocada por la Iglesia, sí puede afirmarse que fue una fiesta evangélica. Incluso, el editorial titulado ƑQué defiende la Iglesia?, afirma sin rubor alguno que ha sido el clero quien verdaderamente ha defendido y defiende a la mujer frente a quienes quieren convertirla en un objeto, o contra quienes, levantando la bandera de sus derechos, la hacen víctima de oscuros intereses políticos y económicos.
En su homilía, el cardenal Rivera apuntó que algo grave está ocurriendo en la sociedad cuando se descubre que en el paso de la niñez a la adolescencia, muchos niños pierden la fe, los valores y los puntos de referencia para crecer como seres humanos.
Durante su mensaje, el prelado pidió a los feligreses que no se limiten a hacer el bien al prójimo, como una tarea cumplida, sino que aporten un granito de arena a través de la palabra de Dios y eviten que el mal escandalice a los demás.