DOMINGO 1o. DE OCTUBRE DE 2000
Ť La semana política en Estados Unidos
Ť Provoca muy poco interés el primer debate entre Gore y Bush
Ť Dos cadenas de tv optan mejor por ciencia-ficción y el beisbol
Ť Los cómicos, al parecer encargados de informar de campañas
Jim Cason y David Brooks, corresponsales, Washington, 30 de septiembre Ť La ciencia ficción y el beisbol son de mayor interés para los estadunidenses que el primer debate nacional entre los dos políticos que buscan ser el próximo líder del país más democrático y poderoso del mundo, mientras que la mejor manera de entender la contienda política estadunidense es a través de programas de variedades y de cómicos.
Estas conclusiones se derivan del hecho de que esta semana, dos de las cuatro cadenas nacionales de televisión más importantes (NBC y Fox Television) decidieron que en lugar de trasmitir el primer debate nacional entre los dos principales candidatos a la presidencia de Estados Unidos, el republicano George W. Bush y el demócrata Al Gore, la noche del 3 de octubre una transmitirá el partido del playoffs de beisbol y la otra estrenará su serie de ciencia ficción Dark Angel. Así, sólo ABC y CBS trasmitirán en vivo el primer debate, junto con canales de televisión por cable.
Por otro lado, no sólo parece que millones prefieren ver un partido deportivo o la ciencia ficción que el debate presidencial, sino que un segmento enorme del electorado se informa de la contienda política no en noticieros, eventos políticos o periódicos, sino a través de los cómicos y los talk shows, los programas nocturnos de entrevistas y plática light. El diario The New York Times informó que 48 por ciento del electorado joven del país se entera de la política a través de estos programas de charla, como Tonight Show, conducido por el cómico Jay Leno, y su competencia Late Show, con David Letterman.
Para cómicos como Leno, el juego electoral está lleno de contenido para el humor. En su programa de charla y comedia los chistes siguen una fórmula: Gore es caracterizado como un tipo tieso y académico a quien le cuesta contar historias personales, mientras Bush es generalmente presentado, simplemente, como un tontito.
"Ha sido fascinante observar el desarrollo de la figura de Bush", comentó Chris Harris, un guionista del Late Show, porque "eventualmente cometió todas esas equivocaciones, y nos dimos cuenta; es en realidad un tipo tonto. No hay mejor cliché que el del tipo tonto".
Sin embargo, Leno reconoció que hay algunas figuras políticas que son desastrosas para su profesión, y que la candidatura presidencial independiente del ecologista Ralph Nader, candidato del Partido Verde (y a quien no se le permitirá participar en los debates), le roba posibilidades cómicas: "Cuántos chistes de Ralph Nader han escuchado? No se escuchan. Aquí hay un tipo que sale y dice tal como están las cosas. Mi chamba se acabó".
Después de un largo y arduo debate sobre los debates, en el que Bush intentó buscar otro formato para enfrentarse con Gore, sólo para acabar aceptando la propuesta inicial de su contrincante de realizar tres comparecencias, resulta que los ejecutivos de algunos medios entienden que para millones éste no será un evento indispensable. Esto es uno más de los crecientes indicios de que esta campaña electoral aún no ha provocado gran interés popular.
Mas bien, los cómicos son los que parecen estar encargados de informar al publico la neta sobre el proceso más fundamental de este modelo democrático.
Sin embargo, hay otra lectura más generosa de todo este fenómeno: el electorado sabio puede haber concluido que la política estadunidense no está compitiendo con la ciencia ficción, el deporte y el humor, sino que esa es su esencia: las elecciones y el juego político aquí frecuentemente podrían ser un cuento de ciencia ficción, un combate deportivo, y a veces no deberían ser tomados muy en serio.