SABADO 30 DE SEPTIEMBRE DE 2000

Ť Los directivos de la emisora buscan acallar las voces de oposición, denuncian

Protesta en Radio UNAM por anomalías laborales

Ť Trabajadores de base y honorarios exigen pago oportuno y digno de sus salarios, que ya son simbólicos

Carolina Gómez Mena Ť Ante las persistentes violaciones a sus derechos laborales por parte de las autoridades administrativas, los poco más de 130 trabajadores de Radio UNAM, entre los que se incluye a todos los de base, locutores, productores, reporteros, operadores y vigilantes, entre otros, demandan cumplimiento del contrato colectivo de trabajo (CCT), revisión del convenio de condiciones especiales y pago "digno y oportuno" de sueldos.

Durante una concentración realizada en el estacionamiento de la radioemisora, los empleados relataron que existen demoras en el pago de salarios y honorarios, que fluctúan entre 15 y 30 días, disminución de prestaciones, total carencia de herramientas básicas para laborar e imposición de jornadas de trabajo sin remuneración extra, y que a esto se suma el "caso omiso" que las autoridades administrativas hacen a la demanda de aumento de sueldos, los que, al no haber tenido incremento desde 1996, son prácticamente "simbólicos".

Por ejemplo, un locutor que trabaja por honorarios gana mensualmente mil 700 pesos, por jornadas laborales de alrededor de 20 horas a la semana, y un reportero, mil 200 en promedio, expusieron los inconformes.

Al respecto, Gerardo Zurroza, trabajador de la emisora universitaria y delegado del Sindicato de Trabajadores de la UNAM (STUNAM), comentó que Carlos Pinto, jefe de la unidad administrativa, intenta deslindarse de su responsabilidad, y para ello, desde que asumió el cargo, hace "más de tres meses", ha propiciado la "política de puertas cerradas", a tal punto que muchos empleados no lo conocen personalmente.

Esa actitud ha tenido también el recientemente nombrado director general de la emisora, Francisco Prieto, quien no ha escuchado las demandas de sus trabajadores. "Con ellos se ha agravado el problema, porque la cerrazón es absoluta, no hay diálogo", indicó el representante sindical.

Entre gritos de šHoy, hoy, hoy! y la entonación de múltiples porras universitarias, los trabajadores expresaron estar desesperados por su crítica situación financiera y por las aparentemente nulas posibilidades de encontrar una pronta solución a sus demandas, esto gracias a la "poca disposición" de las autoridades de la radiodifusora.

En peores condiciones económicas se encuentran los nueve locutores, quienes perciben honorarios, y los alrededor de 15 productores, quienes carecen de servicio médico, vacaciones, prima de antigüedad y derecho a días festivos. "Si alguna vez no podemos venir a trabajar por enfermedad, nos descuentan el día no laborado", señaló uno de los locutores, quien prefirió no dar su nombre por temor a represalias.

Asimismo, productores, que sólo tienen el rango de colaboradores, dijeron que en la empresa se ha implantado una estrategia de "cambio imprevisto de programación", la que, al parecer, tiene como objetivo "acallar las voces de oposición" al gobierno.

Gerardo Zurroza acotó que también requieren que se revise la composición del Consejo Técnico Consultivo de Radio UNAM, el cual, según la normatividad, debería estar compuesto por autoridades y trabajadores, pero en la práctica sólo lo integran los primeros.

Otro punto que les preocupa es la contratación de jóvenes de servicio social, pues este ejercicio "está al margen de lo acordado en el convenio de 1995, en el que se especifica que estos muchachos no pueden quedarse ni como personal de confianza ni de base".

Añadió que tampoco se otorga a los trabajadores, pese a estar estipulado en el CCT, el derecho a vacaciones adicionales, días económicos y permisos por maternidad, entre otros.

El delegado gremial indicó que la excusa que pone Carlos Pinto para no recibirlos es que él no sería el conducto para las peticiones, por lo que los inconformes deberían acudir a la Coordinación de Relaciones Laborales de la emisora. No obstante, desde febrero esta instancia comunicó a los trabajadores que tales asuntos podían ser tratados con el jefe de la unidad administrativa.

Finalmente, sostuvo que la decisión de ir o no a paro en la emisora se tomará la primera semana de noviembre, luego de la revisión del CCT con el STUNAM.