JUEVES 28 DE SEPTIEMBRE DE 2000

Ť En Chiapas, el conflicto menos peligroso, dice el experto


El riesgo de convulsión social en México es inmediato: Schmidt

Ť Debe el nuevo gobierno canalizar políticamente la inconformidad

Arturo Jiménez Ť Las convulsiones sociales en México no son un riesgo a futuro, sino una realidad presente, y para ello sólo hay que mencionar el narcotráfico, los secuestros, los asesinatos en la frontera, la delincuencia común, los conflictos políticos y los más de 20 grupos guerrilleros ante los que no hay una estrategia gubernamental, sostiene Samuel Schmidt, profesor e investigador de la Universidad de Texas.

Y advierte: si con el cambio de gobierno en el país no se canaliza esta inconformidad de manera política, si se fracasa, esta convulsión puede plantear la posibilidad de otro camino.

"La gente está expectante, y hay quienes, por la radio, piden ya la devolución de su voto. No voté, dicen, por los que niegan el aborto ni por los que atacan la libertad de expresión. Los que llegarán al poder ya están dando señales de qué es lo que quieren."

Samuel Schmidt se encuentra en México para "relanzar" La capacidad de gobernar en México, libro coordinado por él y publicado en 1997 por editorial Aguilar, conformado por ensayos y propuestas de Yehezkel Dror, Lorenzo Meyer, Sergio de la Peña, Macario Schettino y él mismo.

De los muchos conflictos mencionados, Schmidt considera que el de Chiapas es el menos peligroso, pues se encuentra "contenido" y así puede mantenerse, pese a los abusos, retenes y paramilitares. El riesgo en esa entidad, dice, vendrá si quien quede en el Ejército presiona para que haya una solución militar.

Lo que sí, precisa, es que Chiapas es un problema simbólicamente muy importante. "Y las baladronadas de Fox de resolverlo en 15 minutos le generarán alguna necesidad de definición muy rápida".

Son más preocupantes los otros 22 grupos guerrilleros, porque han mantenido una actitud de confrontación bélica con el gobierno. "Y a esos no se les está haciendo caso; no hay una estrategia para ellos".

Y preocupa aún más el narcotráfico, continúa, porque genera condiciones de inestabilidad nunca vistas: las matanzas y el nivel de penetración que tiene en las altas esferas del gobierno mediante la corrupción. Recuerda que fuentes en Estados Unidos aseguran que el negocio del narcotráfico representa 500 mil millones de dólares al año, y que la mitad se gasta en sobornos.

Escuelas para gobernantes

Frente a la crisis mundial de "gobernación", de la que México es muestra tangible, Schmidt hace dos recomendaciones fundamentales al presidente electo: que los políticos, especialistas y grupos sociales "redefinan prioridades" y generen un proyecto de país, y crear una escuela para que los mandatarios aumenten su capacidad de gobernar.

"Llegue quien llegue al poder -dice-, debería plantearse transformaciones fundamentales, que es lo que este libro propone. La capacidad de gobernar en México es mala. Y las causas son:

"Incapacidad de los políticos de construir consensos (tesis de Meyer) y de manejar bien la economía (tesis de Schettino), y la destrucción del paradigma gobernante y del mito revolucionario (tesis de Schmidt)".

Precisa: el concepto de "gobernación" que recorre el libro no es un planteamiento ideológico, sino político, "y muy serio". La gobernación es mucho más que administrar un país. Se puede bajar la inflación como una medida administrativa, pero se generan impactos políticos y económicos desastrosos. Así, las soluciones traen problemas peores a los originales. Por ello, mejorar la gobernación implica generar prioridades distintas.

"Es la razón de humanidad que menciona Dror: vamos a poner la calidad de vida de la sociedad por delante, en lugar de la razón de Estado. En lugar de buscar qué es necesario para que el gobierno tenga estabilidad, debe verse qué es necesario para que la sociedad viva bien, porque si es así se tendrá estabilidad".

Si Vicente Fox llega sin reformular los principios fundamentales de la gobernación será un gobierno muy difícil, "y algunas de las tensiones y torpezas ya se están viendo".

Sin embargo, considera que hay "una oportunidad de oro", y agrega: "en este cambio, por salir de un gobierno de 71 años a otro, se abre la posibilidad de repensar el país y de una reingeniería del mismo".

-ƑCuáles serían las prioridades a redefinir?

-Primero, un régimen de libertades muy amplio. Segundo, un régimen de lucha contra los males sociales, como la corrupción, la delincuencia y la inseguridad. Tercero, un esfuerzo nacional de redefinición del tipo de país, poniendo por delante la razón de humanidad y no la razón de Estado, como hasta ahora. Debemos tener metas y tiempos.

-ƑQué le sugeriría a Vicente Fox desde una posición académica?

-Armar un equipo de pensadores que analicen bien el país y hagan una propuesta de modificación a largo plazo, y buscar el mejoramiento de la capacidad de gobernar mediante la creación de una escuela para gobernantes. Si se hacen las dos cosas, ya la hicimos.