MIERCOLES 27 DE SEPTIEMBRE DE 2000
Ť Hay desinterés de parte de autoridades: especialistas
La ciudad de México, en riesgo de una contaminación masiva del agua
Ť De darse el problema morirían un millón de habitantes: Mazari
El peligro de contaminación del agua es tan grave como el ambiental o el sísmico
Elena Poniatowska /I Ť (Para que Fox y sus colaboradores dediquen algo de su tiempo a escuchar las inteligentes propuestas de científicos como Mazari, quien conoce mejor que nadie la situación y la posible salvación de nuestro país.)
"Corremos el grave peligro de una contaminación masiva del agua", dice Marcos Mazari, ingeniero civil, físico experimental de 75 años y miembro del Colegio Nacional desde 1982. Con sus brillantes ojos azules y su inteligencia casi tan fulminante como su mirada, el doctor Marcos Mazari es una autoridad en los problemas de la cuenca de México, el agrietamiento de arcillas lacustres y su relación con el uso del agua y la contaminación atmosférica en la zona metropolitana.
-Lo que ocurrió hace poco en Chalco, para mí, es un aviso de que estamos muy cerca de algo que podría ser catastrófico masivamente -dice Mazari. En la tremenda inundación de Chalco, que fue algo local, cinco mil personas resultaron afectadas. El agua se desbordó del canal e invadió una parte relativamente pequeña, pero Chalco ya tiene un hundimiento de cinco metros. Si ese canal siguiera mandando aguas negras, invadiría la ciudad de México, en la parte central, por la Alameda, que tiene un hundimiento de diez metros.
"Cuando ocurrió la catástrofe de Chalco, sacaron una foto del Canal de los Remedios que se une al Gran Canal, y el río estaba hasta el tope, lleno. Fue apenas este año, hace un par de meses cuando comenzó a llover fuerte. Si el río llega a fallar y toda esa agua se desborda en México, yo no sé hasta dónde podría llegar, pero la parte más hundida de la ciudad es la Alameda. Lo lógico es que si siguiera habiendo mucha agua, šimagínate la Alameda con uno o dos metros de aguas negras, contaminadas por la industria con sustancias químicas! Sería una inundación equivalente a la de 1629, con Enrico Martínez, cuando subió dos metros el agua en la zona central de la ciudad. ƑQué hicieron los españoles? Los pudientes fueron a refugiarse a Puebla durante esa gran inundación que duró hasta 1631, pero los indios se quedaron en la ciudad, enfermándose y muriéndose de cólera y otras epidemias.
"La disminución de los indios desde la época colonial fue desastrosa y sigue siéndolo."
-ƑLas enfermedades gastrointestinales se deben a la mala calidad del agua de México?
-En gran parte sí. En pleno siglo XXI, los mexicanos más pobres siguen muriendo de enfermedades curables.
El grave agrietamiento del lago de Texcoco
-A principios de los cincuentas, a los ingenieros ya nos tocó ver el grave agrietamiento del lago de Texcoco, pero las grietas aún no llegaban al fondo, sino que las seguimos hasta unos ocho metros. Las arcillas se cerraban antes de la capa dura, que está como a 30 o 32 metros, dependiendo del hundimiento de la ciudad, pero al perder agua aumenta la cohesión y con ello la profundidad de la grieta.
-ƑQuién determina esto?
-Está determinado por una fórmula que produjo el experto en mecánica de suelos Nabor Carrillo, aunque ahora tenemos un número más preciso que el de Carrillo: "La profundidad de la grieta es igual a 3.57 veces la cohesión entre el peso del material". Cuando la profundidad es mayor a cierta cantidad dependiente de la cohesión, entonces se cierra. La arcilla se vuelve plástica y sella. Eso es lo que nos ha protegido, el hecho de que en nuestro manto acuífero, bajo lo que los ecólogos llaman el acuitardo, la capa de arcilla de arriba se mantiene impermeable, tanto que aunque haya agua cochina por arriba, no pasa abajo. Pero nosotros estimamos que dentro de 25 o 30 años la profundidad de la grieta va a llegar directamente al manto acuífero. Teniendo lagos cochinos y canales de drenaje de aguas negras que lleguen al acuífero pueden contaminarlo en una noche.
-šQué barbaridad!
-Al ver eso, el Instituto de Ingeniería desarrolló la teoría del mecanismo de agrietamiento de las arcillas, y lo que se ha observado es que el agrietamiento no va ocurriendo lentamente, sino que puede ocurrir instantáneamente ante un aguacero. En cuanto se formen charcos, cambia el estado de esfuerzos en las arcillas y entonces se forma la grieta instantáneamente.
Sólo 6% de aguas tratadas
Como te decía, cuando la ciudad se hundía fuertemente a mediados de este siglo, expertos en mecánica de suelos, como Nabor Carrillo, Fernando Hiriart, Raúl Marsal, gente que sabe y que está muy ligada a los problemas del agua en la ciudad, hicieron estudios para el Departamento del Distrito Federal, la Comisión del Agua y la Comisión Federal de Electricidad. Hoy nos hemos olvidado de las plantas para el tratamiento del agua. De toda el agua que sale, apenas 6 por ciento es tratada y Fernando Hiriart, Raúl Marsal y otros expertos siempre dijeron que este porcentaje debía crecer. Esa es una de las opciones que puede haber para un respiro, antes de que explote la cosa de una manera que yo le llamo catastrófica.
-Es decir, que la gente se muera.
-Sí, que la gente se muera tomando aguas negras durante la primera semana después de un agrietamiento de ese calibre. Así es que si 10 o 15 mil gentes murieron en el temblor de 1985, yo pienso que ahora hablaríamos de millón o un millón y medio de personas que perecerían por la contaminación del agua. Una vez lo platiqué con el doctor y patólogo Ruy Pérez Tamayo y le dije que nosotros estábamos preocupados por esa contaminación masiva del agua, ya que la gente en una semana jamás podría salir de la cuenca del Valle de México para ir a otro lugar, no es posible. Le pregunté sobre lo que ocurriría con una contaminación masiva que el sector médico no podría atender. ƑSabes que me contestó? "Ni nosotros, ni en ningún lado del mundo podrían resolver un problema de ese tamaño". Y yo creo que es cierto.
-ƑEstamos en un peligro real?
-Sí, lo del agua es muy peligroso y además es contra el tiempo. Puede que otros problemas no se manifiesten tan aprisa, por ejemplo, el agotamiento del agua.
-Que nos quedemos sin agua...
-Sí. El agotamiento del agua no ocurrirá aquí en el valle lacustre, pero en la parte norte, lo que llamamos la cuenca, esa parte es ya un fango. No nos han dado ningún resultado de las medidas que registra la Comisión del Agua sobre las presiones del agua, pero lo que vemos ahí es que si el agua en esa zona no es exactamente el mismo que aquí, no hay propiamente un acuitardo tan arcilloso como lo hay en Texcoco, México y Chalco.
-ƑQué es el acuitardo?
-El acuitardo son los 30 metros de arcilla de los que te hablé, el agua que se infiltra, pero en el caso de nuestra ciudad, el nivel freático ya anda por los 30 metros.
-šQué barbaridad, son muchos metros!
-Pero lo más grave es que ese nivel freático baja más de un metro por año. Si ya está en 20 metros y está bajando en promedio un metro quince cada año, esa situación tampoco se puede mantener por mucho tiempo. No va a ser tan inmediato, porque llueve y etcétera. Tenemos propuestas de cómo recargar esa agua que se filtre para purificarse antes de ser usada, pero tampoco ha habido ninguna respuesta de nadie a nuestros proyectos.
-ƑLa contaminación masiva puede ser mortal y no reacciona ninguna autoridad?
-Ninguna.
-Pero esto es espantoso, porque se está jugando la vida de los mexicanos más jóvenes, y la actitud de las autoridades es suicida.
-Así es. El país no le ofrece ninguna protección a sus habitantes.
-ƑCuáles son las propuestas que ustedes los ingenieros hicieron, Marcos?
-Propusimos, por ejemplo, desconcentrar a México, descentralizar. En eso participaron todavía Emilio Rosenblueth, Carlos Ramírez y otros expertos que coincidíamos en que la situación no podía seguir así.
Habla el ingeniero proyectista Carlos Ramírez Sama:
"La pobre cuenca de México pudo haber continuado siendo la cuenca privilegiada, por todas las condiciones naturales con que contaba, clima, lluvia, temperatura media, etc., pero la insistencia de hacerla crecer arriba de su potencial natural la han convertido en una ciudad sobrepoblada, contaminada, que degrada cada día más los pocos recursos que todavía le quedan".
"El ingeniero Pablo Tapié Gómez, preocupado como muchos de nosotros por los problemas que se iniciaron hace tiempo, que sufrimos en la actualidad y por las graves consecuencias que producirán si no cambiamos nuestra actitud de querer, a toda costa, que el altiplano sea el asiento de esta población, ha insistido desde 1983 en que la única solución que tiene México para sobrevivir en el siglo XXI es la de desarrollar nuevos centros de población, industriales y comerciales en las zonas costeras del país que cuentan con agua abundante, regulada por almacenamientos existentes o que deberán construirse para aprovechar al máximo nuestro recurso más preciado, el agua".
Todo al mar
Antonio Sanz Polo, de planeación física y administración de obras, coincide con Pablo Tapié Gómez:
"El área metropolitana de la ciudad de México, con una población cercana a los 20 millones de habitantes y con un ritmo de crecimiento acelerado, se ha convertido para la nación entera en un problema de proporciones monstruosas y, aparentemente, sin solución, cuando se prevé un incremento de 30 millones más de habitantes para el año 2010 en todo el país, 30 millones de los que, si no se anticipa cuando menos un límite, 12 millones poblarían la ciudad de México, adicionalmente a los ya existentes.
El peligro que encierra esta amenaza para la supervivencia de la nación hace evidente que al país se le plantea un problema de ética, entendida ésta como la racionalidad de las decisiones políticas y las inversiones hacia la óptima supervivencia de individuos, instituciones y la nación como un todo.
Pensamos que estos 30 millones de habitantes que vienen para el 2010 deberían alojarse en 100 mil kilómetros cuadrados, de esos 100 mil kilómetros cuadrados, tendríamos 30 mil kilómetros cuadrados en el Istmo de Tehuantepec, teniendo allí el agua de los ríos Papaloapan, Coatzacoalcos, Grijalva y del Usumacinta; allí pueden alojarse hasta 10 o 15 millones de habitantes. Del lado de la cuenca baja del río Pánuco y utilizando también como detonador el puerto industrial de Altamira, podrían alojarse unos 10 millones de habitantes y el resto en la cuenca del río Balsas, donde pudieran asentarse otros 5 o 10 millones más de habitantes.
Lo que falta es la red de transportes; esta autopista sería también el gran libramiento de la ciudad de México. No como el que tratan de construir por el Desierto de los Leones, que generará más fraccionamientos y más aglomeraciones en la ciudad central. Se trata de un verdadero libramiento, ya que gran parte del tráfico del oriente necesariamente pasa ahora por la ciudad de México y sigue hacia el oeste.
La aglomeración, el peor problema que tenemos los mexicanos
Una ciudad es un centro de mercado de niveles múltiples, donde el intercambio de bienes y personas juega el papel esencial. La ciudad de México está moribunda porque su aparato circulatorio se encuentra infartado. Estamos viendo que la aglomeración es el peor problema que tenemos los mexicanos y que, por otra parte, tenemos la esperanza de hacer de éste un gran país, porque tenemos una gran cantidad de capital nuevo. Si el uso del suelo es el capital fundamental que el hombre hereda de la naturaleza tenemos mil 800 kilómetros cuadrados de capital nuevo no utilizado, cuya conquista y urbanización configurará la gran hazaña de los mexicanos para el próximo siglo".
Hasta aquí el doctor Antonio Sanz Polo.
Advertencias que no sirven de nada
Desde 1990 -prosigue Mazari- organicé unas conferencias en el Colegio Nacional acerca de los problemas de la cuenca de México, de las cuales después sacamos un libro que editó el propio Colegio Nacional.
Le di copias a un alumno de la Comisión del Agua para que las repartiera. "Lo único que te pido es que me digas a quién le vas a dar el libro", le dije. Una de esas era para Julia Carabias. Ella sólo me envió una nota dándome las gracias y lo peor es que eso fue casi lo único que recibí de las 450 copias que distribuí. No hubo ningún eco ni ninguna respuesta de autoridades ni de universitarios ni de nadie. Nada. Entregamos 24 copias a la Comisión del Agua y no obtuvimos siquiera un comentario. Nada.