DOMINGO 24 DE SEPTIEMBRE DE 2000

Ť Exigen la destitución del alcalde palenquense Samuel Hernández Pérez


Tzotziles bloquean la carretera San Cristóbal-Palenque

Elio Henríquez y Juan Balboa, corresponsales, San Cristóbal de las Casas, Chis., 23 de septiembre Ť Decenas de indígenas tzotziles bloquearon hoy la carretera que comunica a esta ciudad con Palenque para exigir la destitución del alcalde priísta Samuel Hernández Pérez y del síndico municipal Belisario Pérez Martínez a quienes acusan de no tener capacidad para gobernar.

Entretanto, indígenas de 30 comunidades de Ocosingo mantienen retenidos desde ayer a seis funcionarios municipales y federales para exigir la entrega de recursos económicos "sin condicionamientos" y la desaparición de los llamados Centros de Atención Social (CAS), dependientes de la Secretaría de Desarrollo Social (Sedeso) porque "sólo han servido para dividir a las comunidades".

Delfino Méndez, representante de los tzotziles inconformes, afirmó que los habitantes de Huixtán se movilizaron pues el Congreso del estado no ha atendido su demanda de que el alcalde y el síndico sean destituidos, por no cumplir con las promesas de construir obras de beneficio social en la zona rural, aparte de que "ya no vive en Huixtán, sólo se la pasa en San Cristóbal y por lo mismo no atiende a la población".

Agregó que el 11 de septiembre, habitantes de 42 de las 48 comunidades de Huixtán destituyeron a ambos funcionarios a través del sistema de usos y costumbres y entregaron al Congreso local el acuerdo firmado, pero hasta la fecha "no nos han hecho caso y por eso decidimos bloquear la carretera".

Mientras tanto, el Centro Fray Bartolomé de las Casas informó que unos 25 indígenas evangélicos del municipio de San Juan Chamula huyeron a la montaña, debido a que policías estatales y las autoridades municipales "los han estado hostigando y amenazado de muerte".

Marina Patricia Jiménez, directora del organismo que preside el obispo Samuel Ruiz García, explicó que los patrullajes de los policías en Otatulán "han alterado la situación y los evangélicos tienen temor de ser agredidos o asesinados", por lo que abandonaron San Juan Chamula.