DOMINGO 24 DE SEPTIEMBRE DE 2000
Ť Tres créditos a México
Solicitan países al BID ayuda para combatir pobreza
Roberto González Amador, enviado, Praga, 23 de septiembre Ť El presidente del Banco Interamericano de Desarrollo (BID), Enrique Iglesias, informó hoy que varios países de la región latinoamericana solicitaron asistencia del organismo para aplicar programas contra la pobreza similares a los del actual gobierno mexicano. "El propio BID está interesado en conocer más del Progresa (Programa de Educación, Salud y Alimentación), que es el plan de combate a la pobreza más grande en América Latina", dijo Iglesias y anunció que reforzará la cooperación con el gobierno que encabezará el panista Vicente Fox Quesada a partir de diciembre próximo.
Entrevistado aquí después de la firma de tres préstamos del BID a México por 750 millones de dólares, Iglesias consideró conveniente que un plan como Progresa -por el que el Estado entrega pequeñas sumas de efectivo a habitantes de comunidades pobres- se extienda hacia la próxima administración. La declaración coincidió con el punto de vista de Guillermo Perry, economista en jefe para América Latina del Banco Mundial, quien consideró que Progresa debe mantenerse en el siguiente gobierno.
Enrique Iglesias manifestó el BID está interesado en crear un plan regional de combate a la pobreza que incorpore elementos y herramientas como las que maneja Progresa. "Es claro que en cada país hay condiciones distintas y que tendría que haber adecuaciones para cada uno".
En particular con la próxima administración federal de México, Iglesias dijo que el BID tiene "gran interés" en apoyar los planes de poner en práctica un programa de microcréditos para personas de escasos recursos que no reciben atención de parte del sistema bancario tradicional. Esta es una de las principales estrategias de Fox para combatir la pobreza, aunque no ha hecho explícita la forma en que se obtendrían los recursos para ello.
De los préstamos concedidos a México por un monto conjunto de 750 millones de dólares, 250 millones serán canalizados al Instituto para la Protección al Ahorro Bancario; 300 millones a Nacional Financiera para un programa de crédito multisectorial y los 200 millones restantes para capacitación laboral.