Ť Sindicatos, partidos y ONG exigen castigo a culpables

Primer homenaje en 35 años a guerrilleros caídos en Madera

Ť Fueron los iniciadores del movimiento urbano armado en el país

Miroslava Breach y Rubén Villalpando, corresponsales, Chihuahua, Chih., 23 de septiembre Ť Por primera vez en 35 años, organizaciones no gubernamentales, sindicatos y partidos políticos de oposición organizaron actos en Ciudad Juárez, Madera y en esta capital para rendir homenaje a los guerrilleros caídos en el asalto al cuartel militar ubicado en el municipio de Madera, perpetrado en 1965, y que fue el inicio del movimiento guerrillero urbano que se extendió a todo el país hasta finales de la década de los 70.

En el panteón municipal de Ciudad Juárez, miembros del Comité de Presos y Desaparecidos Políticos montaron una guardia de honor y recordaron a "las decenas de jóvenes que fueron ejecutados por la Brigada Blanca en la década de los 70".

El profesor Fernando Alvarez Montoya acotó que el 23 de septiembre de 1965 murieron ocho maestros en el asalto al cuartel del municipio de Madera, "hecho que desencadenó la represión oficial y detención de decenas de ciudadanos, especialmente estudiantes y maestros de la escuela normal de Saucillo".

En este ataque murió el profesor Arturo Gámiz, quien encabezaba la primera guerrilla rural que surgió en México, y que posteriormente se convirtió en la Liga Comunista 23 de Septiembre.

Alvarez Montoya, acompañado por maestros y familiares de presos y desaparecidos políticos exigió que se castigue a los responsables de la represión y violación de derechos humanos en nuestro país, entre ellos los generales Arturo Acosta y Humberto Quirós. Además, mencionó a Miguel Nassar Haro y Fernando Gutiérrez Barrios, a quienes señaló como las cabezas visibles de la contrainsurgencia de las décadas de los 70 y 80.

Asimismo, exigieron la presentación con vida de 20 jóvenes originarios de Ciudad Juárez, a quienes desaparecieron los grupos contrainsurgentes que se aglutinaron en la Brigada Blanca.

En el panteón de Madera, ciudad ubicada en la sierra Tarahumara, se realizó un acto similar, donde se recordó que los ocho muertos -Arturo Gámiz, Pablo Gómez, Miguel Quiñónez, Rafael Martínez, Oscar Sandoval, Emiliano Gámiz, Salomón Gaytán y Antonio Scobello- fueron enviados a la fosa común, al argumentar sus asesinos que "buscaban tierra y eso les dieron".

Durante la década de los 70 y principios de los 80 fueron ejecutados más de 15 jóvenes, a quienes se acusó de ser guerrilleros de la Liga 23 de Septiembre.

Asimismo, se detuvo a unas 20 personas, de las cuales dos fueron presentadas públicamente y luego desaparecidas, sin que al momento se les haya localizado vivas o muertas.

En el acto celebrado en la capital de Chihuahua, la diputada local perredista Alma Gómez Caballero, hija de Pablo Gómez Ramírez, señaló que en los 70 la inconformidad social por el atraso económico de la región y el autoritarismo del gobierno local, encabezado entonces por el general Práxedes Giner Durán, "precipitaron la rebelión armada de un grupo de jóvenes que buscaban cambiar el estado de cosas".

La legisladora agregó: "la sangre que corrió en Madera no fue producto de una acción desesperada o de un acto suicida; fueron víctimas de una celada, de la traición y el engaño".