SABADO 23 DE SEPTIEMBRE DE 2000
Ť Para los líderes sindicales, son grupos minoritarios
Avanzan corrientes opositoras entre petroleros y electricistas
Ť Exigen cuentas claras y democracia interna en ambos organismos
Fabiola Martínez/I Ť Trabajadores petroleros y electricistas, integrantes de dos de los gremios más poderosos del país, avanzan en el fortalecimiento de grupos opositores en los sindicatos que dirigen los priístas Carlos Romero Deschamps y Leonardo Rodríguez Alcaine, respectivamente.
Las principales demandas de ambos grupos disidentes redundan en exigir cuentas claras de los millonarios recursos que se captan mes con mes en las organizaciones en cuestión y, sobre todo, democracia interna -a través del voto universal, directo y secreto- como la única vía posible para lograr una contienda electoral más o menos equitativa.
Las corrientes democráticas en los gremios petrolero y electricista aún son minoritarias porque son pocos quienes se atreven a ''dar la cara'' ante las múltiples experiencias que les representa ser oposición, las cuales invariablemente se traducen en poner en riesgo sus prestaciones, empleo y hasta la libertad.
Por lo pronto, los petroleros inconformes se adhieren poco a poco en torno a la Alianza Nacional Democrática de Trabajadores Petroleros (ANDTP), constituida como asociación civil en 1999, mientras que los electricistas, integrados en corriente democrática, registraron ayer una planilla opositora que, por primera vez luego de 25 años, le disputará la dirigencia a Rodríguez Alcaine, también dirigente de la CTM y del Congreso del Trabajo, sector obrero del PRI.
En el caso de los empleados de base de Petróleos Mexicanos, la ANDTP envió una carta al secretario del Trabajo y Previsión Social, Mariano Palacios Alcocer, en la que solicitan su ''apoyo e intervención'' para que se eliminen las ''prácticas antidemocráticas'' en el gremio petrolero, que se traducen en la elección mediante un voto registrado en una boleta en la que aparece el nombre, firma y número de ficha de cada uno de los más de 80 mil trabajadores sindicalizados.
La solicitud se sustenta también, señalan, ''en la irrupción de la democracia en la vida política del país'', pero sobre todo en la Constitución, en los convenios internacionales sobre libertad sindical y derecho de asociación que México ha ratificado y en un reciente acuerdo firmado en el marco del Tratado de Libre Comercio para que se haga respetar el voto secreto en los procesos electorales internos de todos los sindicatos del país.
La ANDTP, contra caciques y mafias
La ANDTP es encabezada por Julio César Rodríguez Velázquez, trabajador de la sección 11 (Nanchital, Veracruz) con 19 años de antigüedad, adscrito como supervisor en el complejo petroquímico Morelos. A esta alianza nacional se han adherido también trabajadores de las secciones 34, 15, 35 (Tula), 24 (Salamanca), 10 (Minatitlán), 11 (Nanchital), 14 (Macuspana), 38 (Salina Cruz) y 9 (Veracruz), entre otras de las 36 secciones que conforman el STPRM.
Una de las principales luchas de la ANDTP se registró el año pasado en Las Choapas, Veracruz, cuando luego de varios meses de protestas, plantones, toma de la sección sindical y encarcelamiento de trabajadores se logró la basificación de 304 petroleros que por más de 15 años habían permanecido en calidad de transitorios.
Ahora, van avanzando en otras secciones del país con trabajadores de entidades no aledañas a Veracruz, quienes aun sin conocer el trabajo de la alianza han iniciado luchas locales a favor del voto secreto, como es el caso de un grupo de la sección 38 de Salina Cruz, Oaxaca, o de los empleados del Hospital Picacho de Pemex.
En este intento por derribar a los ''caciques y mafias" del STPRM, como califican a sus dirigentes, participan aquellos que han sido sancionados e incluso encarcelados por su actividad opositora, como David Ramírez Escobar, de Salina Cruz, acusado de robo y despojo en contra de la gasolinera Comisión de Servicios Pancardo, propiedad de la sección 38 del STPRM y en la cual existió un conflicto ''intersindical''.
Ramírez es responsable de un boletín informativo disidente llamado Regeneración y tras permanecer en el Reclusorio Regional de Salina Cruz por varios meses fue liberado la semana pasada por falta de pruebas.
Otro de los que participan activamente en la alianza es Joaquín Antonio Hernández Correa (hijo del ex dirigente petrolero Joaquín Hernández Galicia, La Quina), quien compite en una planilla opositora en la sección 1 de Ciudad Madero, Tamaulipas.
Junto con un grupo de petroleros que viajaron de diversos puntos del país a la ciudad de México para realizar un plantón frente al STPRM, Hernández Correa, ex diputado del PRD, afirma que la lucha es por ''dignidad'' y para exigir cuentas claras de las finanzas de este gremio.
Señala que en la época en que su padre era ''líder moral'' de los petroleros, las arcas del STPRM registraban 450 mil millones de dólares en múltiples propiedades de la organización sindical (tiendas de consumo, gasolineras, farmacias, ranchos, comercios, cooperativas) ''pero ahora sólo hay números rojos a pesar de que cada quincena se captan millones de pesos por concepto de cuotas y cajas de ahorro''.
Para el actual dirigente petrolero Romero Deschamps, ex senador y actual diputado federal priísta, los grupos opositores no son más que minorías de jubilados y empleados transitorios que persiguen intereses políticos y cuyo único fin es que otros sectores vulneren la autonomía sindical.
Ante esto, los petroleros de la alianza muestran de inmediato los documentos que los acreditan como trabajadores en activo y aseguran que cuentan con el apoyo de ''un buen número de compañeros'', por lo que consideran que la única alternativa para que se demuestre este hecho es que en las elecciones sindicales los más de 80 mil afiliados ejerzan el voto secreto y no se repitan hechos ''antidemocráticos y de burla'' como el ocurrido hace algunos años en Tula, donde de acuerdo con un video tomado por observadores independientes, se evidencia que la ''asamblea'' seccional se realizó en un estadio de beisbol y, ya bajo los efectos del alcohol, se tomó la votación de manera multitudinaria y a mano alzada.
Otros trabajadores como Edgar Tenorio, de Coatzacoalcos, actualmente rescindido por supuesta negligencia laboral, señalan que no se requiere una modificación estatutaria para proceder en las elecciones con voto secreto, toda vez que esto ya ha ocurrido en otras secciones como la 22, 16 y 44, por lo que sólo se requiere "voluntad política para permitir que se aplique este precepto democrático en todo el país".
"El sindicato petrolero es el negocio de unos cuantos y por eso queremos un cambio; ya no más cacicazgos de aquellos que sólo han ejercido poder político y económico y que se ostentan como líderes intocables cobijados por la autonomía sindical. Esta situación ya no es un problema interno sino un asunto nacional porque están acabando con nuestra organización y sobre todo con Pemex", señaló.