VIERNES 22 DE SEPTIEMBRE DE 2000

Ť Encuentro de ex guerrilleros con la sociedad civil

La guerra sucia dejó mil 500 muertos y 600 desaparecidos

Ť Rememoran el 35 aniversario del asalto al cuartel Madera

José Gil Olmos Ť A 35 años del asalto al cuartel de Madera, una página de Internet será puesta en el ciberespacio a partir de este viernes en memoria del primer movimiento guerrillero del país.

"ƑTrasnochado? Lo será para las 40 familias más ricas del país porque las condiciones fundamentales de pobreza, marginación social, así como la crisis profunda en el campo se mantienen", responde airada Alma Gómez, hija del profesor Pablo Gómez, muerto junto con Arturo Gámiz en la intentona de levanta- miento armado del 23 de septiembre de 1965.

Mientras tanto, en la ciudad de México y como parte del aniversario de este levantamiento armado, considerado como el punto de partida de los grupos guerrilleros en las últimas tres décadas, un amplio grupo de ex combatientes se citaron para reunirse por primera vez en la Universidad Lasalle con la finalidad de reconstruir la historia del movimiento y de los grupos armados de los sesenta y setenta.

Enrique Condés, Mario Ramírez, Jorge Poo Hurtado, Teresa García Moisés y Ramón Ruiz Sandez -ex miembros de agrupaciones armadas y de la Liga Comunista 23 de Septiembre- en conferencia de prensa señalaron que durante la "guerra sucia" de los setenta hubo más de mil 500 guerrilleros muertos y 600 desaparecidos.

Con matices personales, señalaron que de acuerdo con la experiencia adquirida en años de clandestinidad y de cárcel, la vía armada no es el camino del cambio, e invitaron a EZLN y EPR a que se incorporen a la lucha política legal y pacífica.

Incorporados en agrupaciones políticas y sociales públicas, los ex guerrilleros, sin embargo, rechazaron que su cambio de postura por la vía democrática y legal sea interpretada como un arrepentimiento a la opción armada que siguieron por muchos años.

Tampoco aceptaron que se pueda considerar como un "error" que los actuales movimientos armados sigan este camino. "La violencia sólo genera más violencia, y yo ya no quiero eso, se los digo por experiencia", argumentó Mario Ramírez, ex integrante de la Liga Comunista 23 de Septiembre, y quien fuera uno de los encargados de tratar de convencer a Lucio Cabañas, del Partido de los Pobres, para que se formara un solo frente de lucha a nivel nacional, tanto en las zonas urbanas como en las rurales.

En Internet

Hija de Pablo Gómez, uno de los que formaron el grupo junto con Arturo Gámiz en el intento de asalto al cuartel de Madera, Alma Gómez, diputada en el Congreso de Chihuahua por el Partido de la Revolución Democrática, asegura que el 23 de septiembre debe ser guardado en la memoria colectiva como uno de los hechos más importantes en la historia de las transformaciones democráticas "porque marcó la lucha por una transformación radical del país con todo un planteamiento político que aún es actual."

A partir de esta noche, en Internet se podrá consultar una página con los documentos originales que fundamentaron el movimiento armado que fue sofocado por el Ejército mexicano, testimonios de lucha, artículos, reportajes, así como la biografía de Arturo y Emilio Gámiz, Pablo Gómez, Salomón Gaytán, Rafael Martínez Valdivia, Miguel Quiñones, Oscar Sandoval y Antonio Scovel Gaytán, quienes participaron en ese levantamiento frustrado.

"Forma parte de la historia del país, es importante en la formación de la izquierda y de muchos de los cambios políticos que se han dado. Es una referencia obligada para quienes quieren ser consecuentes", aduce la legisladora, al afirmar que en Chihuahua este pasaje histórico incluso ha sido integrado a los libros de historia que se reparten en las escuelas.

Mis muertos no me dejan en paz

Ramón Ruiz Sandez, ex miembro de las Fuerzas Revolucionarias Armadas del Pueblo (FRAP), al participar en los preparativos de la reunión de este sábado, recuerda las palabras de uno de sus compañeros muerto en la guerra sucia de los setenta: "Mis muertos no me dejan en paz", y bajo este manto cubre la intención de recuperar la historia de los grupos armados y quitar la imagen de "asesinos" que les tildó el gobierno desde entonces.

Luego de varios años de vida política pública, ante los medios de información otros ex guerrilleros, como Jorge Poo -del grupo Lacandones-, manifestaron su rechazo por la lucha armada en la que están los actuales grupos. Poo dijo que el mensaje del pasado 2 de julio fue por el cambio a través de la vía democrática, y que es contradictorio que un movimiento armado quiera esto mismo porque, por naturaleza, quiere imponer una ruta o un programa de transformación.

Teresa García Moisés, también ex integrante de la Liga 23 de Septiembre, dijo que para el caso de Chiapas -donde trabajó por años antes del 94- se debe presentar una solución integral. Por una parte cumplir con los acuerdos de San Andrés, desarmar a los grupos paramilitares y retirar al Ejército; y por la otra abatir los niveles de pobreza y marginación, así como reconciliar a las comunidades y pueblos chiapanecos.

"No me arrepiento de haber participado; esos eran los códigos de lucha que se tenían hace 20 años, pero ahora los códigos son diferentes, hay mayores libertades de expresión", señaló.

A pesar de estar en contra de la lucha armada, los ex combatientes afirmaron que no se puede negar que persisten las condiciones de pobreza, marginación y olvido que dieron origen a los movimientos guerrilleros. Dijeron que mientras no se cambie esta situación, podrán surgir nuevos "movimientos no deseables".