MARTES 19 DE SEPTIEMBRE DE 2000

Ť Aún sin determinar, la vigencia de la Cocopa


Persisten disensos en el Senado sobre las comisiones de trabajo

Ť Las negociaciones, por buen camino, según coordinadores

Andrea Becerril Ť Los coordinadores de los grupos parlamentarios en el Senado de la República todavía no llegan a un acuerdo sobre la integración de las 29 comisiones de trabajo.

Incluso, aún no existe una determinación unánime en torno a la Comisión de Concordia y Pacificación (Cocopa), el organismo que por ley es la única instancia que puede definir la ruptura del diálogo entre el gobierno federal y el Ejército Zapatista de Liberación Nacional (EZLN).

Mientras el Partido de la Revolución Democrática (PRD), en voz de Jesús Ortega, advirtió que no está a discusión siquiera la desaparición de la Cocopa, el panista Diego Fernández de Cevallos, en su calidad de presidente de la Junta de Coordinación Política, declaró: "Se está tratando de ver lo procedente para llevarlo al pleno y que ahí se tome una decisión responsable".

--La Cocopa es una comisión bicameral y ustedes no pueden decidir sobre su desintegración.

--Tienen razón. Al estar integrada por las dos cámaras, nosotros no podríamos decidir unilateralmente su desaparición.

"Lo que en todo caso podríamos decidir unilateralmente sería nuestra permanencia o nuestra salida, pero no es el caso. Nadie ha propuesto nada al respecto y vamos a ser muy cuidadosos para que esas decisiones se adopten plenamente justificadas y de cara a la sociedad."

El coordinador priísta, Enrique Jackson, también presente en la conferencia conjunta que ofrecieron después de la reunión de ayer, no hizo comentario alguno.

Ortega aclaró que el asunto no ha sido discutido. En entrevista aparte, remarcó que el partido del sol azteca se opondría a cualquier intento por desmantelar la Cocopa, toda vez que es la instancia especial encargada de coadyuvar en la solución del conflicto en Chiapas.

Fernández de Cevallos, en cambio, insistió en que ni la Junta de Coordinación política que él preside, ni la mesa directiva que tiene a su cargo Jackson, podrían decidir precipitadamente el acabar con comisiones "que tendrían, en todo caso, que quedar o suspenderse en sus funciones por decisión del pleno".

Acerca de las 29 comisiones ordinarias, tanto Jackson como Fernández de Cevallos sostuvieron que las negociaciones van por buen camino, "sin jaloneos para el acomodo de personas o de grupos", sino en busca de un "redimensionamiento" del trabajo legislativo.

Informaron que siguen discutiendo la creación de nuevas comisiones, y aunque el panista declaró que no serán más de cinco las que se sumen a las 29 existentes, siguen negociando la propuesta priísta de que haya otras 13.

La demora en integrar los organismos de trabajo en el Senado obedece, en versión de Jackson, a ese redimensionamiento del quehacer legislativo, el cual incluye dar una conformación plural a las comisiones e impedir que sólo algunos legisladores acaparen responsabilidades que luego no puedan cumplir.

De tal forma, aunque la ley orgánica posibilita que cada uno de los 128 legisladores pueda participar en cuatro comisiones, se buscará que en cada una de ellas haya una composición plural.

Pero como otro de los criterios que imperan es el porcentual, de los 15 integrantes de cada comisión, al tricolor le corresponden siete; al blanquiazul, seis, y al sol azteca, dos.

Por ello, a fin de hacer un espacio a los legisladores del Verde Ecologista y a los dos independientes, tanto priístas como panistas cederán uno de sus espacios, con el objetivo de lograr una integración plural.

Además de lo anterior y pese a las declaraciones de los coordinadores, sigue el estira y afloja entre el PRI y el PAN por las principales comisiones; dentro de cada fracción también hay pelea por las presidencias y la ubicación en los órganos senatoriales de trabajo.