MIERCOLES 13 DE SEPTIEMBRE DE 2000
Ť Niega presidente del TSJDF que se deba a señalamientos en su contra
Cambian a juez que dictó arraigo a Espinosa
Ť Es parte del proceso de rotación que lleva a cabo el Consejo de la Judicatura del DF, asegura
Angel Bolaños Sánchez Ť En el marco de las rotaciones de jueces que realiza el Consejo de la Judicatura del Distrito Federal, ahora fue el juez 61 de lo penal, Eugenio Ramírez Ramírez, titular de la sala de primera instancia, quien concedió a la Procuraduría General de Justicia capitalina la orden de arraigo en contra del ex regente Oscar Espinosa Villarreal, quien fue readscrito de juzgado.
El presidente del Tribunal Superior de Justicia del Distrito Federal, Juan Luis González Alcántara Carrancá, señaló que el cambio no es resultado de algunos señalamientos que se referían a él como "juez de consigna".
"Eso no existe, o suponemos que no existe. Simplemente le tocó que lo cambiáramos de adscripción", dijo.
Recordó que el juez Ramírez Ramírez había solicitado una licencia y el 10 de agosto pasado, cuando se libró el arraigo contra el ex secretario de Turismo del gobierno federal y actualmente prófugo de la justicia, al frente de la sala se encontraba el juez por ministerio de ley Gerardo Rubén Saldívar.
Otro caso, refirió, fue el del juez Rafael Guerra Alvarez, quien en el juzgado 55 de la penal llevó el caso Stanley y recientemente fue enviado a otro juzgado. Los cambios, aseguró, el presidente del TSJDF, no afectan la administración de la justicia por el hecho de que los juzgadores tengan que conocer los expedientes.
"Quienes van integrando el expediente y colaboran con el juez son los secretarios, que son los que llevan todo el procedimiento y tienen conocimiento de los asuntos. Revisar un expediente, terminarlo, completarlo, lo puede hacer cualquier juez", añadió.
El Consejo de la Judicatura, explicó, es el que determina la rotación de los jueces, para lo cual no se requiere la opinión del mismo funcionario, por el contrario, se realiza en función de los criterios que el órgano colegiado determina convenientes: desde el trabajo que están desempeñando, o si se requiere de un juez con experiencia en alguna sala que por alguna razón se encuentra vacante, entre otros. "Simplemente buscamos que la experiencia se vaya difundiendo en las distintas áreas".
Indicó que no existe sanción o apercibimiento alguno para los jueces que dejan sus tribunales con trabajo rezagado, sin embargo ellos saben que hay una responsabilidad "y hay una nota que se va al expediente".
Pero aseguró que el rezago en los tribunales del Distrito Federal es mínimo, comparado con otros del país e incluso con los del Poder Judicial Federal. En los locales se trabaja en forma expedita, "hay una gran supervisión y tenemos el control de lo que dictan y lo que resuelven diariamente. Todos los días sabemos qué juez se está retrasando y quién saca sus asuntos, pero hay casos que son muy complicados y demandan más tiempo".
Los cambios continuarán, así como ya ocurrió en el juzgado 55, donde se encuentra el caso Stanley, y estos cambios se realizan bajo criterios como el tipo de trabajo que desempeñan; es algo similar a la situación de los embajadores, explicó.