SABADO 2 DE SEPTIEMBRE DE 2000

* Rosario Ibarra señala el pasado represor de los militares recién detenidos


"Infinidad" de abusos de los dos generales presos

Triunfo Elizalde * Rosario Ibarra de Piedra, presidenta del grupo Eureka, afirmó ayer que "los generales Mario Arturo Acosta Chaparro y Francisco Humberto Quirós Hermosillo no sólo tienen nexos con el narcotráfico y el crimen organizado, sino que tienen un pasado tenebroso en la historia de la represión en México".

"Si volvemos los ojos al estado de Guerrero ųdice a La Jornadaų, encontraremos infinidad de testimonios de personas cuyos derechos humanos fueron conculcados por órdenes ilegales dictadas por ellos". Eureka, agregó, tiene en su poder testimonios y puede obtener muchos más, ya que venimos rastreando sus trayectorias desde 1974.

Sólo por citar un caso, comentó que Eureka, comité fundado hace más de 20 años, cuenta con el testimonio de un hombre "cuya familia fue casi aniquilada por la represión. Arturo Gallegos Nájera fue víctima de atropellos de parte de los grupos terroristas que organizaban y financiaban caciques como Isidro Galeana, Ramón y Bruno Muñoz, el capitán Barquín N..., todos bajo las órdenes de Arturo Acosta Chaparro".

Ibarra considera que aún se pueden recoger testimonios en todas las regiones de Guerrero, de víctimas de atropellos. "Bastaría hablar con gente de Chilpancingo, de Iguala, de Acapulco, de la Costa Grande y la Costa Chica y de las sierras, para hallar testimonios vivos de esa naturaleza".

No sin sorna, hizo notar que "aquí la gente se asusta de las actividades del torturador argentino Ricardo Miguel Cavallo que, dicen, negoció con los bienes de las personas que él y otros militares desaparecieron en Argentina... Aquí también (en Guerrero) los saqueadores se robaban los vehículos de los secuestrados, se cateaba sus casas y se llevaron todo objeto de valor".

Ellos presionaron a las familias de detenidos o secuestrados "para que les dieran ibarra-aniversario-eureka2- fuertes sumas de dinero para liberarlos, y de esto bien sabe el general Quirós".

Dijo que "hay similitud entre Cavallo y los militares mexicanos aprehendidos... Ojalá, quiero pensar, que el encarcelamiento de Acosta Chaparro y Quirós Hermosillo obedezca a una intención del gobierno actual, como despedida del doctor Zedillo, de hacer bien las cosas, que tuviera una sacudida de conciencia y en lo que le resta de gobierno hacer un poco de lo mucho que pudo haber hecho a lo largo de seis años, aunque también pudiera resultar sólo un chispazo propagandístico en la víspera de su último Informe presidencial".

Por su parte, el Centro de Derechos Humanos Miguel Agustín Pro Juárez manifestó que la detención y el inicio de un proceso penal contra los generales Acosta Chaparro y Quirós Hermosillo, aunado al proceso y sentencia de que fue objeto el general Jesús Gutiérrez Rebollo, "concreta la sospecha de diversos sectores de la sociedad de que el narcotráfico ha permeado a múltiples instituciones nacionales".

El caso del general Acosta Chaparro, según la citada ONG jesuita, "va más allá; él ha sido señalado como responsable de desapariciones forzadas y tortura, violaciones de derechos humanos graves, por lo que también debe ser objeto de una mayor investigación... La justicia, para que lo sea efectivamente, debiera también abarcar las investigaciones sobre esos y otros asuntos pendientes".