VIERNES 1o. DE SEPTIEMBRE DE 2000

* El especialista advierte que Pemex y CFE no son las únicas en la mira


Privatizar, asunto de soberanía: Saxe-Fernández

* Con los ferrocarriles, aeropuertos y puertos se transfiere a extranjeros el espacio territorial

Mayela Delgadillo Bárcena * Pemex y la CFE no son las únicas empresas que se constituyen como asunto de seguridad nacional, con la privatización de los ferrocarriles y ahora de los últimos aeropuertos y puertos del país, México está transfiriendo a extranjeros todo su espacio territorial, el cual es el pilar de la soberanía, señaló John Saxe-Fernández, durante la presentación del libro Cambios Urgentes en la Política Económica a partir del año 2000.

Pese a que la discusión y el foco de atención siempre han sido los energéticos, el especialista expresó que la privatización de los ferrocarriles fue un golpe para la independencia de México como podría serlo Pemex, ya que el transporte para la industria minera mexicana, otra fuente de recursos no renovables, quedó separado de la explotación. "Los ferrocarriles son una infraestructura de enorme valor estratégico", aseveró.

De hecho, parte de la debacle que sufre la industria en la actualidad puede ser atribuida a que dejó de contar con un medio de transporte barato y coordinado con la explotación de los metales. Curiosamente, Estados Unidos consume 4 mil millones de toneladas de minerales.

Saxe-Fernández agregó que parece que México olvidó cómo perdió Texas, al grado que ahora cuesta trabajo encontrar una bahía en el territorio nacional que no sea propiedad de extranjeros.

El gobierno ha establecido un proceso de transferencia a particulares de las empresas claves del país y, mientras eleva el problema del narcotráfico al rango de asunto de seguridad nacional, la venta de la infraestructura estratégica queda al margen de esta discusión.

El narcotráfico ha sido utilizado como elemento central para justificar que México ocupe el primer lugar como receptor de tecnología militar por parte de Estados Unidos, empero, lo que realmente se está permitiendo es una cada vez una mayor injerencia y presencia de estrategas estadunidenses en la política nacional. "El narcotráfico le ha servido a Estados Unidos como un caballo de Troya para penetrar a todos los países, y un ejemplo de esto es lo que actualmente está pasando en Colombia".

Durante la presentación del citado libro, en la que también estuvieron el general Luis Garfias Magaña, Fernando Carmona de la Peña, y los autores Arturo Ortiz Wadgymar y Arturo Bonilla, además de coincidir en que el modelo globalizador que se está aplicando en el ámbito mundial no tiene futuro, y se deben iniciar cambios para evitar una severa crisis social, el tema paralelo fue la militarización.

Luis Garfias Magaña señaló que la guerra siempre ha estado vinculada con las decisiones económicas, por lo que hizo un reconocimiento a los autores por unir ambas aristas, y Saxe-Fernández añadió que la estrategia que aplica Estados Unidos en Colombia ųjustificada bajo el manto de lucha contra el narcotráficoų tiene una clara intensión de guerra contrainsurgente, ya que se está enfocando precisamente hacia el territorio que controla la guerrilla y no los paramilitares o narcotraficantes.

El panorama que plantearon no fue optimista, sin embargo, todos los expositores confiaron en que se lleven a cabo reformas urgentes para evitar que sigan creciendo las desigualdades económicas en México y el mundo.