JUEVES 31 DE AGOSTO DE 2000

Ť Les hizo falta meterse a la cancha: Jorge Campos; Luis Hernández: fue estupido

En el Tri arremeten contra De la Torre, al distorsionarse una declaración

Ť La afirmación de que le tienen más amor a las primas que a la camiseta nacional causó enojo

Miguel Angel Ramírez Ť Una declaración de Alberto de la Torre, presidente de la Federación Mexicana de Futbol, se distorsionó ayer y los seleccionados reaccionaron con indignación. Como se les aseguraba que el dirigente había dicho que pensaban más en las primas que en el tricolor, hubo quien, como el delantero Luis Hernández, las calificó de "estúpidas".

El pasado martes, cuando De la Torre comentaba sobre el sueldo del técnico Manuel Lapuente, un colega le preguntó: "El licenciado Lebrija, hace unas semanas, hablaba mucho del amor a la camiseta, que los seleccionados tienen que pensar más en el amor a la camiseta que en las primas, Ƒse puede decir esto también de los técnicos? ƑSerá un orgullo ser técnico nacional?".

Y respondió: "Yo pienso que se ha perdido el orgullo en técnico, en jugadores, en su momento. Pero hay que hacerlo renacer. Yo he platicado con el señor Lapuente, él está en eso también, en tratar de que el jugador sienta esa hambre de jugar en la selección nacional, y que nosotros mismos también sintamos que la selección nacional es lo más importante para nuestro futbol, porque es lo que internacionalmente nos ve, lo que hace crecer a los futbolistas, a nuestros jugadores, y creo que hay que recobrar eso. Hay que recobrar eso en todo, directivos, en cuerpos técnicos, jugadores, afición. Todos tenemos que unirnos por la selección, que siempre hablamos que es de todos, pero al final resulta que no es de nadie".

Pero ayer, luego de concluir la práctica de la selección, el bombardeo a los jugadores era con la supuesta declaración del presidente de la FMF, de que le tienen más amor a las primas que a la camiseta nacional. Ramón Ramírez indicó que eran preguntas para buscar algún "tipo de enfrentamiento, y si así lo dijo habrá que pedirle alguna explicación, pero no le voy a mandar mensajes por la prensa". Se le insistió y él se defendía argumentado que no había escuchado la declaración y que al entrar a la cancha se olvida si gana o no dinero, pues su deseo es triunfar y jugar bien. Concluyó diciendo que si De la Torre en realidad externó eso, fue sumamente inoportuno y de muy mal gusto. "No creo que a ningún compañero le caiga bien ese comentario, si es cierto".

Y le sobraba razón. Rafael Márquez dijo que los debía "apoyar y no hacer ese tipo de declaraciones". Resaltó que les gusta vestir "la casaca, como mexicanos que somos", y le van a demostrar que no lo hacen tanto por dinero.

Jorge Campos, por su parte, aseguró que han planteado que si el problema es el dinero, ellos están dispuestos a no cobrar. Pero "está muy equivocado, aquí la camiseta la sudamos a muerte". Puntualizó que "nunca hemos pensado primero en el dinero", sino simplemente han exigido que les paguen en la fecha acordada, "porque nunca cumplen". Recordó que se "han tardado un año" en pagarles y nunca dejaron de entrenar. Es más, todavía les deben.

-ƑQué les deben?

-Lo de los empates, respondió, pero nunca pudo explicar cuáles.

El portero manifestó su deseo que los apoyen en las buenas y en las malas, porque en los buenos momentos si "festejan con nosotros", pero en los adversos los dejan solos. Terminó diciendo que a algunos dirigentes "les hizo falta meterse a la cancha".

Para Francisco Palencia está sugiriendo "como que eres mercenario", y le dejó en claro que para ellos "primero está el amor para con México". Apuntó que lo primordial es poner en alto el nombre de nuestro país, pues con ello vendrán beneficios, como el económico. Le recordó que todos comen del futbol, "tanto ellos como nosotros".

Cuauhtémoc Blanco, a su vez, dijo que "siempre es lo mismo con los directivos", y que De la Torre se "equivocó. No se si algún día jugó futbol".

Luis Hernández, por su parte, señaló que "podrá decir misa quien quiera", pues lo importante es que están trabajando a conciencia. Agregó que no se valen "decir por atrás cosas", y así las calificó: "son declaraciones para mí estúpidas".

El técnico Manuel Lapuente tenía otra óptica del problema y no se unió al coro de protestas. Confió que los dirigentes estaban preocupados, porque sintieron que en el pasado partido contra Panamá el equipo perdió la mística. El aseguró no haberlo percibido, pero se preocupó y comprometió a analizarlo. Lo platicó con los jugadores "y ofrecieron dar su mejor esfuerzo". Consideró que ante Canadá todo quedó superado.

En lo único que coincidió es que algunos abandonan el barco cuando llegan los fracasos, y trató de involucrar en esto a los medios de comunicación. El definitivamente dice que no lo hace, pues "el capitán muere con el barco".