MIERCOLES 30 DE AGOSTO DE 2000

Ť El Presidente se reúne con diputados electos del PRI

Asumiría Zedillo la derrota priísta del pasado 2 de julio

Ť Al menos 30 representantes populares faltaron a la cita

Rosa E. Vargas y Enrique Méndez Ť Al menos 30 diputados electos del PRI faltaron anoche a la reunión convocada en Los Pinos por el presidente Ernesto Zedillo. Casi a la medianoche, algunos de los asistentes apuntaron que el discurso del mandatario -que se prolongó más de una hora- fue reiterativo, al señalarles que, si así lo prefieren, pueden responsabilizarlo a él de la derrota de su partido el 2 de julio. Pero más allá de quienes retuvieron la esencia del mensaje, muchos otros dieron al mismo inmediata interpretación y dejaron la residencia con la convicción de que este martes se reafirmó el distanciamiento entre el Presidente y los priístas.

Señalaron así que el titular del Ejecutivo si bien les hizo también un detallado recuento del estado de crisis en que encontró al país en 1994, y de los logros que alcanzó su administración en todos los órdenes, en alguna mesa se comentó en voz baja: "pues que nos consigan unos lentes iguales a los de Zedillo, para ver la realidad igual que él''.

El Presidente, que se declaró "liberal en lo político y en lo social'', asumió -entre muchas- la parte de responsabilidad que le corresponde en la derrota de su partido, pero cuando afirmó que su gobierno ha sido el que más presupuesto ha destinado al gasto social, entre sus escuchas surgieron otros cuestionamientos: "šAhora resulta que el mejor gobierno de la Revolución fue el que entregó el poder!''.

Los priístas consultados coincidieron en que el discurso que pronunció en nombre de los legisladores la coordinadora de la bancada, Beatriz Paredes, fue muy fuerte, "crudo e inteligente'', porque no soslayó mencionar ninguna de las molestias que desde la noche de la elección afloraron entre los militantes de ese partido.

Hubo también quien notó "sentido y molesto" al mandatario con su partido, sobre todo ante la evidencia de que se han impuesto las estrategias del llamado sector duro del PRI, logrando retrasar todas las decisiones importantes que deben necesariamente adoptarse -sesión del Consejo Político y la 18 asamblea nacional- para cuando Zedillo ya no se encuentre en el poder.

En su mensaje, comentaron los legisladores, el Presidente les recordó que desde el inicio del sexenio él había planteado la necesidad de una reforma en el partido y que emprendió acciones para insertar al país en la normalidad democrática.

Ahora, les dijo, ante la derrota, el PRI debe aprender de las experiencias de otros partidos del mundo y convertirse en alternativa real de poder. Y como en otros temas, entre su auditorio volvieron a surgir los señalamientos: "Bueno, si él dice que había que democratizar al PRI, por qué no toma en cuenta que en su sexenio cambió seis veces al presidente del partido...''.

De acuerdo con Rafael Rodríguez Barrera, ex presidente del PRI, Zedillo se mostró satisfecho porque, en su opinión, a raíz de la elección la ciudadanía tiene conciencia de dos cosas: que se hizo un trabajo electoral limpio y honesto y, segundo, que dentro de sus opciones y sus expectativas sigue estando presente el PRI.

El diputado por Baja California y secretario de Gestión Social del CEN del PRI, Jaime Martínez Veloz, dejó Los Pinos "decepcionado" del encuentro. "Sigo discrepando de la visión de Zedillo respecto de temas como la reforma democrática y la defensa de un modelo económico y de una política social que aumentaron el número de pobres en el país. Reconozco su respeto por la democracia, pero esa actitud no fue acompañada con proyectos que en lo social promovieran el desarrollo de las comunidades''.

Oscar Levín Coppel, presidente del PRI en el Distrito Federal -donde ese partido sufrió uno de sus más fuertes descalabros el 2 de julio- afirmó que con el Presidente "no había ningún problema que limar; la reunión fue muy amable y muy cálida''.

Empero, comentó que Zedillo sabe que entre las causas del revés electoral están "muchas acciones del gobierno y decisiones que asumió en su momento''. En el encuentro, continuó, se consideró de los factores que los llevó a perder la Presidencia fue haber firmado la reforma política "que permitió la alternancia''.

Con todo, aclaró que los priístas no se arrepienten de haber aprobado esas transformaciones políticas. "Esta vez -apuntó- el Presidente trató de estar más cerca de nosotros, pero Zedillo ya no es el líder del PRI, es un priísta muy destacado pero nada más''.

Levín Coppel rechazó que los legisladores del PRI vayan a adoptar alguna actitud de rechazo a Zedillo el próximo viernes durante la lectura de su último Informe. Confió entonces que no habrá chiflidos ni gritos por parte del Partido Acción Nacional; "como nos dan, damos'', en referencia a lo que podría ser la "revancha'' priísta, el próximo primero de diciembre, cuando Vicente Fox se coloque la banda presidencial.