DOMINGO 27 DE AGOSTO DE 2000
* Antonio Gershenson *
Robacoches y seguridad
La detención de un torturador argentino que, además, está acusado en su país de origen de robo de coches y falsificación de documentos, y que ocupaba la Dirección General del Renave, tiene muchas vertientes. Varias de ellas han sido exploradas en estas páginas, pero considero necesario agregar algo al respecto. Finalmente, ha habido una polémica sobre el Renave, por lo menos desde hace un año y un mes, cuando el procurador del Distrito Federal, Samuel del Villar, señaló por escrito el peligro de poner en manos de particulares la información que se tendría en ese registro.
No podemos ver aisladamente los cargos de robo de automóviles y falsificación de documentos. Al contrario, el robo organizado de vehículos requiere, entre otras cosas, de documentos que los hagan pasar como legales y que permitan su venta en las condiciones deseadas por los delincuentes. El asunto es que, teniendo el Renave bajo su mando, el ex militar argentino del que hablamos ya no necesitaba falsificar los registros porque simplemente podía expedir registros "auténticos". A eso debemos agregar que también tenía o tiene empresas similares en Centroamérica. Además, podía conocer "desde dentro" los movimientos encaminados a detectar bandas de robacoches, y proteger sus propias actividades, al tiempo que permitía la eliminación de la molesta competencia de otras bandas.
Habían llovido críticas y protestas contra el Renave (Registro Nacional de Vehículos) desde hace tiempo. Ya había un Registro Federal de Automóviles y quién sabe por qué fue suprimido. Luego se dice que es muy necesario, pero se entrega a una empresa privada y además se quiere cobrar por el servicio, como si no se hubieran ya pagado todos los cargos que se debía. La jefa de Gobierno del DF, Rosario Robles, se había negado, luego de protestas de varias otras entidades, a suscribir un convenio para obligar a la gente a registrar su automóvil y pagar. Todos estos problemas palidecen ante los peligros que se revelan con los hechos que mencionamos al principio de este artículo.
El problema no concluye con la posible extradición del personaje en cuestión. Es preocupante que el secretario de Comercio y Fomento Industrial, Herminio Blanco, después de haber defendido a capa y espada al Renave y a la empresa que lo opera, al resultar una fichita su director general diga que era "sólo un empleado". Además de que el director general no es empleado, sino que contrata empleados y funcionarios de su confianza, no hay bases para presuponer que sea sólo uno. El robo organizado de coches implica a muchas personas: hay que transformar la apariencia de cada coche robado, dotarlo de todos los documentos legalmente requeridos, cambiarle el número del motor y ubicarlo en el mercado al que vaya destinado. Tal vez más que esto. ƑQué pruebas tiene el señor Blanco de que es sólo uno, y de que no era, hasta el momento de su detención, el director general sino sólo un empleado? ƑA quiénes contrató este señor, en su carácter de director general? ƑPara qué?
La situación es verdaderamente grave. Tienen razón quienes han exhortado a los ciudadanos a no llevar sus automóviles al Renave, por lo menos mientras no se aclare todo esto, mientras no sea un organismo público y gratuito y mientras no se completen las investigaciones sobre las posibles actividades ilícitas cometidas en México por el citado torturador.