VIERNES 25 DE AGOSTO DE 2000

VIERNES 25 DE AGOSTO DE 2000

Ť Severos "roces" entre el gobierno chileno y las fuerzas armadas


Molesta a Lagos el protagonismo de Pinochet

Enrique Gutiérrez, corresponsal, y agencias, Santiago, 24 de agosto Ť El acto público de la víspera protagonizado por Augusto Pinochet provocó malestar al pre- sidente de Ricardo Lagos debido a que el ejército envió en su representación a un alto jefe militar, y esto incidió en roces entre el gobierno y las fuerzas armadas.

Lagos comentó que "lo que ayer ocurrió, a juicio del gobierno, es un acto que tiene carácter político", con lo que expresó la "preocupación" del Ejecutivo debido a la asistencia al acto del general de ejército Sergio Candia, tercero en jerarquía.

El gobierno había decidido darle un bajo perfil a la reaparición pública de Pinochet, pero la presencia de Candia lo obligó a expresar su punto de vista por conducto del CHILE-34-2 ministro de Defensa, Mario Fernández, quien así lo hizo saber por escrito al comandante en jefe del ejército, general Ricardo Izurieta.

"No es un problema de confianza ni un llamado de atención, simplemente es la expresión de una preocupación... que se concurra a determinada manifestación que tiene una clara connotación política y a la cual no debe asistir ningún miembro de las fuerzas armadas", le indicó en el texto.

Sin embargo, Radio Cooperativa reportó que Izurieta defendió la asistencia de Candia, jefe de la guarnición del ejército en Santiago, al afirmar que esa arma tiene clara las facultades de su comandante en jefe para nombrar a su representante en actos a los que sea invitado.

En su réplica al ministro de Defensa, aseveró que "lo anterior no obedece ni depende de la autorización que tenga que dar otra autoridad", al insistir en que se trata de una facultad exclusiva del comandante en jefe.

Por lo demás, el ejército no consideró el acto pinochetista como "político" y al parecer Izurieta envió un representante justamente porque quería evitar fricciones tanto con el presidente Lagos como con Pinochet y sus seguidores, sin que lo haya logrado con el gobierno.

La vuelta al "protagonismo" del ex gobernante de facto, con la inauguración de un mural en homenaje a los militares y civiles pinochetistas caídos durante el régimen militar, significa una estrategia de cara al proceso judicial que debe enfrentar por violaciones a los derechos humanos.

No obstante, la ceremonia realizada el miércoles en la Fundación Pinochet puso en evidencia a los militares, pues en la placa de homenaje a 500 caídos de la dictadura falta el general Carlos Prats, ex comandante del ejército asesinado junto con su esposa en 1974 en Argentina, atentado atribuido a agentes del pinochetismo.

Llamó la atención que en cambio aparezca el nombre del general René Schneider, comandante en jefe del ejército chileno asesinado el 22 de octubre de 1970 en Santiago por un comando derechista que pretendía evitar la llegada a la presidencia del socialista Salvador Allende Gossens, cuyo operativo encabezó el entonces general Roberto Viaux Marambio.

En el terreno judicial, mientras se presentaba la querella número 169 en contra de Pinochet por los homicidios calificados de dos personas en la ciudad de La Serena, en 1973, en el ejército también hubo malestar por la filtración de un testimonio de un militar retirado que implica a dos altos oficiales activos en crímenes de la dictadura.

En tanto, el presidente Lagos firmó un proyecto de ley que, de ser aprobado por el Legislativo, con mayoría derechista, permitiría el derecho a voto de unos 800 mil chilenos que viven en el extranjero.