VIERNES 25 DE AGOSTO DE 2000

Ť Refuta informe de Alta Comisionada de la ONU


Rechaza la OMC ser calificada como pesadilla para países pobres

Reuters, Ginebra, 24 de agosto Ť Importantes funcionarios de la Organización Mundial de Comercio (OMC) manifestaron su ''profunda preocupación'' a la Alta Comisionada de las Naciones Unidas para los Derechos Humanos, por un informe que califica al organismo multilateral como ''una pesadilla'' para las naciones pobres.

Las normas de la Organización Mundial de Comercio, que todos sus miembros prometen acatar, fueron denunciadas en el informe como ''injustas y hasta prejuiciadas'' en contra de las economías más pobres, y diseñadas para permitir que las naciones ricas impongan su voluntad.

En una carta dirigida a la Alta Comisionada, Mary Robinson, el subdirector general de la OMC, Miguel Rodríguez, indicó que el informe elaborado por dos juristas de naciones en desarrollo choca con los puntos de vista del secretario general, Kofi Annan.

La misiva, redactada con un lenguaje diplomático pero firme, que Rodríguez dijo fue enviada a solicitud del director general de la OMC, Mike Moore, también manifestó ''sorpresa'' de que los dos juristas no hubiesen solicitado los puntos de vista de la Organización Mundial de Comercio para preparar su reporte.

El documento, escrito por J. Oloka Onyango, de Uganda, y Deepika Udagama, de Sri Lanka, y aprobado la semana pasada por la Subcomisión de Derechos Humanos de Naciones Unidas, enfocó el tema de la Globalización y su impacto en el pleno goce de los derechos humanos.

Rodríguez dijo a Robinson que los dos juristas serán bienvenidos, en caso de que desearan visitar la OMC, para enterarse directamente de cómo funciona.

El informe de los dos juristas ha sido elogiado por organismos antiglobalización y por algunos grupos de defensa de los derechos humanos, que argumentan que la OMC, integrada por 137 países (con otros 30 en espera de unirse) favorece a las grandes potencias.

El documento será presentado para su discusión y posible aprobación a la próxima sesión de la Comisión de Derechos Humanos de la Organización de las Naciones Unidas, cuando celebre su reunión anual de seis semanas en marzo y abril de 2001.

En su carta, Miguel Rodríguez citó tanto a Annan, como al ex presidente sudafricano, Nelson Mandela, elogiando el sistema global de comercio abierto, con base en normas establecidas por consenso, que la OMC administra desde su creación en 1995.

''Permítanme recordarle que esas normas fueron negociadas y acordadas en 1994 por consenso por todos los miembros de la OMC, incluyendo a los países en desarrollo, que ya conforman los dos tercios del total de los miembros'', sostuvo Rodríguez, luego de indicar que es difícil comprender porqué las economías en desarrollo y las en transición de países ex comunistas ya miembros y en espera de incorporarse a la OMC, accederían a acatar normas ''injustas''.

El funcionario de la Organización Mundial de Comercio también disputó la sugerencia hecha en el informe de que el proceso de toma de decisiones en el organismo sólo estaba ''aparentemente'' fundamentado en el consenso, es decir, en la aprobación sin necesidad de voto, siempre que no haya país miembro que objete la medida.