JUEVES 24 DE AGOSTO DE 2000
* Lo hago en nombre de la seguridad de EU, afirma
Autoriza Clinton liberar los mil 300 mdd del Plan Colombia
* Exime al país latinoamericano del cumplimiento de las condiciones
Afp, Dpa, Ap y Reuters, Washington, 23 de agosto * En medio de fuertes críticas el presidente Bill Clinton autorizó el desembolso del paquete de mil 300 millones de dólares antidrogas para el llamado Plan Colombia, al eximir a Bogotá del cumplimiento de la mayoría de las condiciones exigidas sobre derechos humanos.
"Lo hice porque creo que el presidente Andrés Pastrana está comprometido con las cuestiones de los derechos humanos, sobre las cuales seguimos muy preocupados", señaló el mandatario estadunidense al defender su decisión de firmar la orden en nombre de la seguridad nacional de su país.
Clinton aprovechó que el Congreso, cuando en julio aprobó el paquete financiero, le otorgó facultades para eximir a Colombia del cumplimiento de las condiciones si consideraba que el desembolso de la millonaria ayuda era acorde con el interés nacional.
En ese sentido, el presidente expresó su creencia de que "protegimos nuestros intereses fundamentales en materia de derechos humanos y hacemos posible que el Plan Colombia tenga éxito, lo cual creo que es muy importante para la estabilidad a largo plazo de la democracia y y los derechos humanos en Colombia".
Clinton tomó esta decisión de ejecutar el Plan Colombia a una semana de su visita a Colombia, prevista para el 30 de agosto. De este modo, desistió de varias condiciones a la recomendación del Departamento de Estado, pues de siete exigencias Colombia sólo había cumplido una.
Los organismos de derechos humanos criticaron que Clinton haya ignorado la colaboración existente entre militares y paramilitares de derecha, matanzas y desplazamientos masivos, de acuerdo con Amnistía Internacional y Human Rights Watch, entre otros.
El director de Human Rights Watch para América Latina, José Miguel Vivanco, calificó como un "craso error" esta excepción presidencial, y sobre todo aludiendo sólo a la seguridad nacional, al considerar que así se debilita la credibilidad de Washington y se pone en entredicho su política sobre derechos humanos.
Por su parte, el gobierno colombiano se declaró complacido por la decisión de Clinton al considerar que se trata de un voto de confianza. Aseveró que Colombia asume la defensa de los derechos humanos por "convicción y no por presión internacional", aunque admitió que la decisión de Clinton compromete al gobierno colombiano.
Por otro lado, mientras Ecuador daba su apoyo a Pastrana en el Plan Colombia, Venezuela dijo compartir con otras naciones de la región temores de que el plan antidrogas colombiano incida en grandes desplazamientos de colombianos hacia sus fronteras.
Entre tanto, continuó la polémica entre Perú y Colombia sobre el anuncio de la víspera del presidente Alberto Fujimori, de que su gobierno descubrió un tráfico de armas para las guerrillas del vecino país, al rechazar la afirmación colombiana de que sus servicios de inteligencia le habían proporcionado pistas al respecto.
Mientras Perú presentaba una protesta formal contra Jordania por su presunta implicación en el citado trasiego de armas, Colombia afirmó conocer más de 20 rutas internacionales y 30 nacionales para el tráfico de armas con destino a la insurgencia y paramilitares.
Un líder de las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia, Andrés París, calificó a su vez de "falsas" y producto de un "montaje circense" las aseveraciones de Fujimori de que su gobierno descubrió una red de tráfico de armas para esa guerrilla, y comentó que su objetivo es congraciarse con Estados Unidos.